Baekhyun vive en una sociedad que desprecia a los omegas, una sociedad que los oprime, los rechaza y, al mismo tiempo, ansía explotar sus cuerpos. Los omegas no tienen derechos, ni patrimonio, ni vida propia; su única esperanza es convertirse en el esposo de un alfa, si tienen suerte, o, en el peor de los casos, ser rechazados incluso por su propia clase.
Baekhyun ha aprendido a aceptar esa realidad, hasta que su vida da un giro inesperado y cae en las garras de Park Chanyeol, un alfa que, desde su infancia, se ha convencido de que es su dueño. Sin opciones, Baekhyun se resigna y se ofrece como tributo, buscando solo un techo bajo el cual refugiarse y un poco de comida.