AVISO: La historia es como una ida al pasado.
NO ESTÁ EDITADA, en el libro que saldrá a la venta estará editado y con escenas extras.
Míchigan/Estados Unidos.
Diciembre 24-2065
La familia estaba reunida en la casa de los abuelos en Míchigan compartiendo la navidad, un día que acaba de empezar, todos están sonrientes cantando canciones navideñas mientras la abuela prepara el postre y el pavo relleno.
Los nietos mayores que son Patrick, Elizabeth y James, de tienen catorce y quince años, están sentados en unos columpios en el jardín trasero que años atrás eran de sus padres. Patrick era el mayor, tenía quince años, y Elizabeth y James, catorce.
- ¿Cómo se habrán conocido la abuela y el abuelo? -Preguntó Patrick.
-No lo sé, nunca nos ha hablado de eso, y ya Camila y yo le preguntamos a mamá y nunca nos contó. -Respondió James.
-Mamá tampoco sabe ¿Y si le preguntamos ahora? -Preguntó Elizabeth.
-Vamos, será interesante. -Exclamó James.
-Se nota que están aburridos sin los celulares ¿verdad? -Preguntó Patrick. Los tres rieron.
-Mucho, esto de pasar navidad a la antigua es raro. -Afirmó James.
Patrick le pasó un brazo por los hombros a su hermana Elizabeth y la abrazó, hizo lo mismo pero omitiendo el abrazo con su primo James y caminaron hasta la cocina de la enorme casa.
La abuela Luce estaba haciendo el postre con ayuda del abuelo Jackson, ambos estaban muy enamorados todavía. El abuelo al vernos sonrió y besó la sien de la abuela.
-Iré a darme una ducha. -Informó e hizo una mueca divertida.
-Hola, abuela. -Dijo Elizabeth.
-Hola, mis niños. ¿Quieren ayudarme a hacer galletas? -Preguntó la abuela muy dulce.
-Sí, claro. Con una condición. -Dijo Patrick.
- ¿Cuál? -Preguntó intrigada.
-Que nos cuente cómo se conocieron, tú y el abuelo. -Dijo James.
-Oh, mis niños, claro que les contaré. Primero saquen los ingredientes, unos están en el refrigerador y otros en las gavetas de arriba. -Habló con delicadeza.
-Vale. -Asintieron todos.
Cuando ya estaban todos los ingredientes en la mesa de la cocina, los nietos se colocaron unos delantales para empezar a hacer las galletas para Santa.
-Ya abuela, cuéntanos. -Le animó Elizabeth.
-Está bien, era 2014, yo tenía catorce años y era verano...