Capítulo 19: Lágrimas ~Nunca te haría sufrir~

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Shigeo asintió.

—Kageyama-kun, ¿puedo hacerte una pregunta personal? No tienes que responder si no quieres.

—¿Qué es?

—Esa persona de la que estás enamorado, ¿es un chico? ¿Es por eso que no pueden estar juntos?

Shigeo se sonrojó hasta las orejas respondiendo así a la pregunta.

—¿P... Po... Por... Por qué dices eso?—preguntó nervioso.

—Porque te refieres a esa persona como "él".

<<¡No puede ser! ¿Ahora qué hago? Hoyuelo me advirtió que no dejara pistas. ¿Dónde está metido ahora?>>

—Es el chico rubio de la fiesta, ¿verdad?

—¿Hablas de Hanazawa?

—Sí. Él me dijo que ustedes son más que amigos y la forma en que ustedes se llevan... Bueno, ¿me entiendes?

<<Lo siento, Hanazawa-kun.>>

—Eh... Sí, es él—y por algún motivo que no entendía, volvió a sonrojarse.

Misaki suspiró y levantó su mirada al cielo. Ya comenzaban a salir las estrellas

—En fin, eso explica muchas cosas. Como sea, ese chico es muy afortunado. Y no te preocupes, no le diré a nadie tu secreto.

—Gracias, Haru.

<<Al menos no sospecha del maestro Reigen. Eso es un alivio.>>

El teléfono de Misaki sonó. Tras leer un mensaje, se despidió del chico deseándole mucha suerte.

Y sí que la iba a necesitar. Aunque ya había dejado de llorar, aún se sentía triste. Hasta donde conocía a Reigen, cuando una idea se le metía en la cabeza, no había forma de convencerlo de lo contrario. Se aferraba con toda su fuerza a cualquier decisión que tomara. Ni siquiera estaba seguro de si su maestro le iba a permitir volver a la oficina. No iba a ser fácil y las probabilidades de éxitos eran bajas. Se levantó para emprender su camino a casa.

Mob llegó a su casa temprano a pesar de la conversación con Misaki

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Mob llegó a su casa temprano a pesar de la conversación con Misaki. A penas si saludó. Se encerró en su habitación y se recostó contra el futón a mirar el techo. Hoyuelo, que ya había llegado, entró con él y le hacía compañía, flotando en silencio fuera de su campo visual.  Ritsu tocó a la puerta y le sorprendió que su hermano lo dejara pasar.

—¿Estás bien? Llegaste temprano.

—Quise venir a casa más temprano—Shigeo ocultó su rostro bajo el flequillo.

—¡Ah! Te peleaste con Reigen de nuevo.

—Algo así.

—¿Que sucedió?

El significado de un besoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora