CAPÍTULO 32: NO PUEDE SER

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CAPÍTULO 32: NO PUEDE SER

Kurt estaba asustada pero siguió a Jesse. Llegaron a una sala y el joven se quedó sin habla. Nada lo podría haber preparado para lo que vio allí.
– ¿Santana? – Susurró el joven. La morena levantó la mirada.
– ¡Kurt! – La chica se levantó mientras él fue corriendo hacia ella. Cuando se abrazaron, los dos cayeron sobre la cama en la que estaba sentada la latina. La adolescente emitió un grito de dolor al notar el golpe en su espalda, a pesar de que caían en un sitio blando. El castaño se apartó asustado.
– ¿Estás bien? – Preguntó St James mientras se acercaba con varias botellas y gasas. La chica asintió aun con una expresión de dolor. El rubio ignoró el gesto y levantó la camiseta de Lopez, permitiendo al Blue ver las marcas que tenía su amiga. Todo el pecho, vientre y espalda estaba en un tono diferente al de su piel. Si no tenía uno más rosado por una herida, estaba morado, azul o amarillo por los golpes. El joven palideció, imaginándose todo lo que la hermana de su novio había tenido que sufrir. Jesse comenzó a limpiar todo para evitar que se infectara.
– ¿Podría alguno explicarme qué ha pasado? – Pidió Rose.
– Yo formo parte de una organización que se formó cuando Artie no quiso aceptar que entráramos a La Revolución del Árbol. Hace dos años fui a La Fábrica y me fijé en ella. No me podía creer que alguien tan joven trabajara en algo tan peligroso. Cuando la vi con las lentillas haciéndose pasar por una Blue, la reconocí de inmediato. Me interesaba ayudarla, quiero que las cosas cambien y colaborar con Santana era mi manera de hacerlo. Hace un mes alguien la descubrió y la detuvimos y la encerramos aquí. Cuando ya se hizo oficial que era una Brown y empezaron a torturarla, cogimos a nuestra presa y la llevamos allí. En el momento que se descuidaron, hicimos el cambio y sacamos a Santana. – Informó el rubio.
– ¿Por qué nos lo ocultasteis? – Quiso saber Hummel.
– Intentamos localizaros pero estabais desaparecidos.

Kurt se abrazó a la morena, se imaginó la felicidad de todos cuando se enteraran de la noticia. Era algo que todos celebrarían si conseguían sobrevivir.
– Tengo que volver al congreso. Tengo que ayudar a los demás a ganar la guerra. – Dijo el ojiazul.
– Ahora que sabéis en qué bando estoy, supongo que yo también puedo ir. – Añadió el otro Blue.
– ¿Qué guerra? ¿De qué habláis? – Quiso saber la latina.
– Se ha levantado la revolución. Tú te quedas aquí a descansar. Cuando todo acabe, alguien vendrá a buscarte. – Dijo autoritario St James.
– ¡No! Algo me dice que si Kurt quiere volver es porque Blaine está ahí. Supongo que habrá más gente allí pero con que esté él es suficiente motivo para que yo también esté. – Aseguró la Brown.
– Están todos menos tu madre que se quedó cuidando a Maria junto a Carole. Nos cuidaremos los unos a los otros. Tú quédate aquí. – Comentó el castaño dulcemente.
– No voy a esperar aquí mientras todos estáis en peligro. – Agregó Lopez.

***

Los tres llegaron al congreso y Artie los vio acercándose a donde él y Blaine estaban estableciendo un plan para asegurar el congreso.
– No puede ser. – Dijo el Blue con la voz entrecortada y emoción en los ojos. No podía negar que se había encariñado con Santana y verla viva era toda una alegría. Al darse cuenta de la reacción de Abrams, el moreno se volvió y su vista se dirigió a su novio de manera que ni siquiera se dio cuenta de que iba acompañado. Corrió hacia él con lágrimas en los ojos.

El abrazo de la pareja fue intenso, el más bajo pensaba que lo había perdido y poder tenerlo otra vez entre sus brazos era algo mágico. Hummel se alivió al verlo vivo y junto a él. Jesse y la latina se quedaron observando la escena con una sonrisa. Cuando se separaron, Kurt se hizo a un lado para que el menor viera a los dos acompañantes del joven. El Brown no podía creer lo que veía, su hermana estaba frente a él con los brazos abiertos esperando un abrazo. No tardó en dárselo, dejándose consolar por la mayor, como lo había hecho de pequeño. Nunca pensó que podría volver a verla y tenerla junto a él era algo más que un sueño.

***

Después de todos los abrazos y aclaraciones, Artie se reunió con los cuatro para hablar de como estaba la situación. El jefe de La Revolución del Árbol miraba a la mayor de los Lopez con miedo, pero aun así, decidió hablar.
– Hemos perdido el contacto con el ministerio, no sabemos nada de Tina, Marley, el señor Rose y Rachel. Estoy intentando localizar a mis agentes pero no hay manera de saber cómo están las cosas. En el palacio presidencial están todos muertos, allí había destinado a Finn, Elliot, Jake y Kitty. – El ojiazul hizo una pausa para secarse una lágrima. – Por último está la residencia del vicepresidente. Allí tenía dos grupos, uno era el de Sam, Mercedes y Harmony, que están todos bien y a salvo fuera. Ha sido evacuado el edificio por los guardaespaldas del vicepresidente. Sabemos que los del otro grupo están muertos o como prisioneros suyos. Eran Puck, Quinn y Brittany.
Santana sintió como si le faltara el aire. Su hermano y Jesse la sujetaron para que no cayera. Estaba débil por sus heridas y la noticia no le había sentado bien. Su novia, sus hermanos, sus amigos... Necesitaba hacer algo. Estaba claro que no podía hacer nada por muchos de ellos pero...
– Iré a buscar a Brittany. Encargaros de localizar a Rach y avisarme en cuanto sepáis algo.
– Voy contigo, no puedes ir sola. – St James se acercó a ella.
– Yo también. – Se ofreció Hummel.
– Kurt, no. Voy yo. – Dijo el menor de los Lopez.
– Blaine, tú localiza a Rachel. Yo cuido de Santana... ¿Confías en mí?
La pareja se despidió con un beso y los dos Blues acompañaron al ojimiel a uno de los coches que los llevaría al lugar donde Brittany estaba... Viva o muerta...


Con Otros Ojos (Brittana girlxgirl)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora