Capítulo 3

                                    

                                          
—  ¿¡DÓNDE MIERDA ESTÁ!? —. Jimin escucho un fuerte grito, apenas habían bajado sus maletas de aquel taxi, cuando el aura se llenó de terror para él. 
                          
—  ¿El que grito es tu jefe? —. Jimin asiente ante la pregunta Jungkook. 
                          
—  Es difícil—. Le dice a su joven hermano.
                          
—  ¿Te grita también? —. Pregunta el joven omega.
                          
—  Le grita a todo mundo—. 
                          
—  ¿En realidad necesito operarme? —. 
                          
—  Kookie—.
                          
—  Bien, camina, antes de que se enoje más—.
                          
...
                          
—  ¡QUE DONDE MIERDA ESTÁ! —. Un nuevo grito adorno la enorme sala de los Min.
                          
—  Cálmate Yoongi, ya viene—. Hoseok intenta tranquilizar a su hermano, pero este parece enfurecer más. 
                          
Para todos fue una sorpresa el encontrarse a Yoongi en el pasillo hecho una furia, lanzando todo lo que encontraba a su paso.
                          
—  Vamos hyung, vas a lastimarte—. Namjoon intente acercarse a Yoongi, pero este parece abnegado a recibir ayuda de cualquiera que no fuese Jimin.
                          
—  Hasta que por fin—. Jimin se detiene al escucharle, observa a los presentes algo apenado viendo a su jefe con la ropa mal puesta, y un desastre escaleras bajo de objetos y prendas esparcidas por do quiere.
                          
—  Eh, hola—. Saluda tímidamente. — Lamento llegar tarde, debía bajar mis cosas—.
                          
—  No me interesa, sube, llévame de nuevo a mi cuarto—. Yoongi estira su mano, Jimin le entrega su bolsa a Kook, quien observa todo en silencio. 
                          
Yoongi se tensa un poco al sentir los pequeños dedos de aquel chico atrapar los suyos, un poco brusco se suelta. —No me tomes así, es tu brazo chiquillo idiota—. 
                          
—  ¡Hey! —. Enfurece Jungkook. — No le hable así a mi hyung—. 
                          
—  Kookie guarda silencio—. Le reprende Jimin a regañadientes, el menor obedece.
                          
—  Vamos hyung—. Le dice Jimin, mientras le ayuda a subir las pocas escaleras que alcanzo a bajar. 
                          
Al llegar al cuarto, Jimin se impresiona con el desorden de este. — ¿Qué paso, un terremoto? —. 
                          
—  No llegaste, debía tomar un baño y vestirme, tuve que hacerlo por mi cuenta—. 
                          
—  ¿Un baño? —. Pregunta Jimin a la par que escucha el sonido del agua caer. — ¡Oh, no! —. Jimin corre a este, observando la tina desbordarse. — ¿Cómo se apaga? —. 
                          
—  No lo sé—. Responde Yoongi, quien se acerca con dificultad.
                          
—  No, no entres puedes caerte, hay mucho jabón—. Le dice Jimin, mientras aun con sus zapatos puesto, lucha por encontrar la forma de cerrarla, cuando descubre la manera, ahora otros problemas le quedan. El piso completamente húmedo, amenazando con entrar a la habitación es uno de ellos. —¿Por qué hay tanto jabón? —. Pregunta Jimin, tomando la espuma he intentado alejarla de la habitación. 
                          
—  La verdad no se ni que le puse a mi baño, pude haberle colocado veneno, como no llegabas—.
                          
Jimin intenta correr a pagar también los lavamanos al verlos encendido. — ¿Y eso por qué? —. 
                          
—  Cepillar mis dientes —. Responde Yoongi desde el umbral de la puerta, Jimin intenta moverse a tomar alguna toalla, pero la espuma resbalosa le hace perder estabilidad, lo único que Yoongi escucha es el sonido del cuerpo de Jimin cayendo contra el suelo.