conociendo a la familia

                                    

                                          
Harry suspira por cuarta vez en menos de dos minutos, jamás había tenido que organizar una comida para que sus papás y hermana conocieran a alguna de sus parejas, nunca pensó que fuera tan necesario.
                          
Louis le envía un mensaje diciendo que está por llegar, el aroma a comida y pastel reina por su casa. Su mamá se había esforzado tanto, diciendo que estaba bastante emocionada pues su bebé había al fin encontrado a su príncipe, Harry puede asegurar eso.
                          
Des le había restado importancia, si bien se preocupaba por las compañías de sus hijos, sabía que al final era decisión de sus retoños, obviamente él querría conocer a sus parejas pero no iba a ser un padre anticuado ordenándoles que hacer.
                          
Gemma estaba feliz por él, sintiéndose orgullosa de que Harry al fin había superado a Adam y le había dado una oportunidad al amor. Era lo que su hermanito necesitaba.
                          
Se observa en el espejo y acomoda bien sus rizos, le llegan al hombro y se le ven bastante bien.  Suspira y sale de su habitación, baja las escaleras y va hasta la cocina, su madre tiene un delantal rosa que dice "la mejor mamá del mundo" en letras medio deformes, él recuerda que Gemma y él lo hicieron cuando tenían 7 y 4, Anne lo guarda como si fuera un tesoro.
                          
—Mamá tranquila, solo es un chico.
                          
—¿Cómo que solo un chico? ¡Es Louis Tomlinson! ¡Tu novio! No sé como no estás nervioso, en serio...termina de ponerle las cerezas al pastel, iré a cambiarme.
                          
Anne sale de ahí parloteando sobre buenas impresiones y Harry insensible, el ojiverde suspira y camina hasta el frasco con cerezas, toma una y la mete a su boca, tararea una canción de rock y mueve sus caderas mientras pone las cerezas alrededor del pastel.
                          
Come otra y sigue concentrado en lo suyo cuando siente unas manos en sus caderas, suelta un pequeño grito y casi se atraganta con el palito de la fruta. Da vuelta y ve a su novio parado con una sonrisa en la cara.
                          
—¡Puta madre, Louis, me asutaste!
                          
—Así tendrás la mente, puerco.
                          
Harry rueda los ojos y saca el palito de la fruta de su boca y lo avienta al bote de basura. Se acerca a su novio y envuelve los brazos en el cuello de Louis.
                          
—¿Quién te abrió?
                          
—Tu prima, muy educada por cierto, me dijo que entrara y dejara de estorbar en la puerta porque su amigo iba a venir a dejarle su tarea.
                          
Harry carcajea y niega con la cabeza, Celeste tiene 8 años pero parece de 16.
                          
—Ella es medio rara—Louis le ve elevando una ceja como diciendo "no te muerdas la lengua" y el ríe —Okay, somos medio raros, pero en su defensa, ese niño le gusta.
                          
—Um—Louis acerca su nariz al cuello de Harry e inhala su perfume, es bastante rico, es dulce pero no llega a ser empalagoso. Sus labios recorren un camino por su mandíbula hasta los labios de Harry, donde da un rápido beso—¿Dónde está tu mamá, bonito?
                          
Harry parece un poco ido, pero ¿Quién no se perdería en una azul tan hermoso como el de los ojos de Louis?
                          
—Harry, ¿a qué hora viene tu chiquito?
                          
Ante la voz de su mamá, Harry parece reaccionar, sus mejillas toman color de inmediato y agacha su cabeza, escucha la leve risa de Louis y muerde su labio inferior.
                          
—Buenas tardes, señora Anne—Louis se presenta una vez suelta a Harry, estira su mano y Anne la estrecha.
                          
—Buenas tardes, Louis—la mujer le sonríe con ternura a su hijo y luego a Louis—Ya está lista la comida, vayan pasando a la mesa porque no tarda en llegar el papá de Harry para comer.
                          
El ojiverde asiente y mira a su mamá con enojo, la mujer le aprieta la mejilla y ríe mientras camina hasta la estufa, Louis suelta una risita y camina detrás de Harry después de despedirse de su suegra.
                          
—Tu mamá es un encanto.
                          
—Ella solo vive para avergonzarme.
                          
—Como todas las madres, cariño.
                          
Harry asiente y se sienta en una de las sillas del comedor, Louis a su lado y empiezan a besarse.
                          
—Oigan, en serio no queremos verlos besarse durante la comida, es desagradable—la chillona voz de Celeste les interrumpe.
                          
La niña se sienta en el comedor y a su lado se sienta un niño de cabellos rojos y ojos azules.
                          
—Hola, Matt.
                          
—Hola, Harry—el pequeño saluda con alegría y después mira a Louis—Hola, me llamo Matt.
                          
—Y yo Louis, un gusto, Matt—el niño sonríe mostrando la falta de uno de sus dientes y Celeste le ve encantada.
                          
—Ya deja de babear, mugrosa—molesta Harry, Celeste le ve con sus ojos verdes totalmente abiertos, su piel blanca se empieza a poner roja de vergüenza y Matt le mira con preocupación.
                          
—¿Qué pasa, Celeste?...¿Te duele tu panza? ¿Quieres que llame a Anne?
                          
Harry carcajea y Celeste le patea por abajo de la mesa, Louis ríe discretamente y Matt ve la escena sin entender bien lo que pasa, es uno de los más listos de su salón pero simplemente jamás ha entendido a sus vecinos.
                          
—¡Ya llegué!—se escucha la voz de Des, Louis mira a su novio con el ceño fruncido y el rizado solo le sonríe.
                          
—¡En la mesa!—grita Celeste.
                          
Un hombre entra en la habitación, lleva un traje negro y no se parece en nada a Harry, decide Louis.
                          
—Hola papá —Harry saluda con una sonrisa.
                          
—Hola tío Des.
                          
—Tú eres el famoso Justin ¿Verdad?—Louis alza una ceja en confusión y mira a su suegro, Harry empieza a toser y Des ríe—Ya ya, estos muchachos que no entienden de bromas—Des estira su mano y se la ofrece a Louis, el ojiazul la estrecha con desconfianza—Mi hijo no deja de hablar de ti, Louis. Tienes muy enamorado a mi pequeño.
                          
Las mejillas de Harry vuelven a ponerse rojas y Celeste ríe, Louis mira a su novio con amor y ternura y Anne empieza a servir la comida.
                          
El tiempo se pasa rápido, pero es muy agradable. Louis quedó encantado con los Styles y los Styles con él, se llevan de una manera bastante familiar, como si se conocieran de toda la vida. 
Anne avisa que Gemma no podrá llegar a comer por culpa del trabajo, Harry parece un poco decepcionado pero se le pasa cuando empiezan a comer pastel. Louis se da cuenta de lo diferente que es Harry en la escuela y en su casa.
                          
En la universidad siempre está tan a la defensiva, viendo a todos como si fueran menos...y en su casa es tan risueño y encantador, tan delicado y él solo quiere sentarlo en su regazo y darle muchos besos y mimos...y sexo.
                          
Cuando la comida termina, Louis ya intercambió facebook con Anne y teléfono con Des, según dijo el hombre, eso era muy importante.
                          
Des se despide para volver a trabajar, Celeste y Matt se van al porche a ponerse al corriente con la escuela, Anne se pone a ordenar la cocina y Harry y Louis deciden ver una película en la sala. Harry se levanta por un poco de agua y ve a Anne riendo en la cocina con su teléfono.
                          
—Y...¿Qué tal te cayó Louis?
                          
El rizado muerde su labio, está bastante nervioso pues es el primer novio que presenta ante sus padres, Anne le mira con una ceja arqueada y después niega con la cabeza.
                          
—Pues...—la mujer se alza de hombros y sigue viendo su celular—¡Es perfecto para ti, cariño!
                          
Harry suelta un grito y abraza a su mamá, ambos chillan -sin saber muy bien por qué- y dan pequeños brincos mientras ríen.
                          
Harry no entiende como es que la vida es tan linda aveces.