Hemos hablado de la naturaleza de la compasión y del procedimien-
to para adiestrar la mente y cultivar la compasión. Estos versos especia-
les que vienen a continuación se recitan con el propósito de generar la
bodichita, la mente de la Iluminación, el deseo de liberar a todos los se-
res del sufrimiento. Durante la recitación de los mismos, debéis tratar de
traer a la memoria toda vuestra comprensión de la compasión y la nece-
sidad de cultivarla.
Con el deseo de liberar a todos los seres
tomaré siempre refugio
en el buda, el darma y la sanga
hasta que alcance la Iluminación completa.
Este primer verso es un modo formal de tomar refugio. Las personas
que practiquéis el budismo, tomad refugio aquí.
Los practicantes religiosos que no sean budistas, cristianos, judíos, mu-
sulmanes, etc, también podéis participar. Cuando nosotros, los budistas, to-
memos refugio en las Tres Joyas, vosotros podéis tomar refugio en vuestra
propia divinidad y utilizar esa fórmula para reafirmar vuestra fe en ella.
Enardecido por la sabiduría y la compasión
hoy, en presencia de los budas,
genero la mente para el completo despertar
por el bien de todos los seres sentientes.
Este verso pertenece a la generación de la mente de la Iluminación.
Por mucho que dure el espacio,
mientras quede algún ser,
quisiera yo también quedar
para poder hacer desaparecer del mundo la aflicción.
El tercer verso nos inspira e infunde un verdadero sentimiento de va-
lentía que nos ayuda a mantener nuestro compromiso con los principios
altruistas.
Así pues, esta ceremonia consistirá en la recitación de estos tres versos.
Debéis recitarlos lentamente y al unísono. Durante la recitación, debéis re-
flexionar en el significado de los versos y cultivar en vuestra mente la con-
templación adecuada.