21. Hogar, dulce hogar

                                    

                                          
            
                          
Narrador 3ª Persona:
                          
-Entonces ¿Jenn y Daryl ya son novios?- Preguntó en un susurro Carl a su padre. Rick miró a su hija y a Daryl que estaban sentados uno enfrente del otro y se miraban cada dos por tres.
                          
-Creo que eso tendrás que preguntárselo a ellos.- Sonrió Rick a su hijo.
                          
El grupo acabó de comer y todos ayudaron a recoger la mesa, Jenn estaba posando su plato en el fregadero cuando Lori le agarró el brazo haciendo que la chica se mirara para mirar a su madre.
                          
-¿Qué quieres?- Preguntó con resignación Jenn.
                          
-Solo quería decirte que me alegro que al final hicieras las paces con Daryl. Sé que te tiene quiere, lo supe desde el primer momento.
                          
-¿Gracias..?
                          
-Jenn, siento mucho que no me hable con tu padre pero no tienes que estar así conmigo.
                          
-¿Cómo quieres que esté mamá?- Preguntó Jenn alzando la voz, acción que hizo que Lori mirara hacia atrás para comprobar que nadie las observaba y le hiciera un gesto a su hija para que no gritara.- En el momento en el que papá más te necesitaba a su lado le mandaste a la mierda. No, espera. No solo le mandaste a la mierda, le tomaste por un asesino. ¿Te crees que pudo hacer otra cosa? Si no lo hubiera hecho el hombre con el que le engañaste le habría matado a él. Shane estaba paranoico mamá, ¿acaso no lo veías? O igual no lo querías ver y preferías vivir en un mundo de fantasía.
                          
-Jennifer, yo no he hecho nada...
                          
-¡¿Que no has hecho nada?! ¿Y ESTO QUE ES?.- Gritó Jenn señalando la barriga embarazada de la mujer.
                          
-¡¿Ahora tengo la culpa de haberme quedado embarazada?!
                          
-PUES SÍ. EXISTEN LOS MALDITOS PRESERVATIVOS.
                          
-¡JENNIFER!.-Llamó la atención Lori a su hija mayor.
                          
-Oh, perdóname. ¿He dicho algo malo? Si no te hubieras quedado embarazada Shane no habría ido a por papá, y lo sabes de sobra. Pero no, sigue negándolo todo lo que quieras. Papá no ha hecho nada malo así que no tienes derecho a enfadarte con él. 
                          
-Jenn... Voy a salir a cazar, ¿vienes?- Jenn dejó de mirar a su madre desafiante y vio a Daryl a unos pasos de ambas. Carol, Hershel y Beth miraban la escena entre madre e hija. Jenn bufó y salió de la casa seguida de Daryl después de decirle que sí.
                          
-Lori, no te preocupes, se le pasará...-Dijo Carol a Lori acariciándole la espalda. Lori se había puesto a llorar y se odiaba a sí misma por haber fallado a su hija.
                          
Jenn caminaba sin decir nada delante de Daryl, el cazador la seguía con la ballesta preparada por si algún caminante se cruzaba en su camino. Después de unos minutos caminando Jenn se paró y se giró para mirar a Daryl, suspiró y se tiró a sus brazos abrazándolo. El gesto pilló a Daryl por sorpresa pero en seguida correspondió el abrazo de la chica sabiendo que la discusión con su madre le había afectado más de lo que quería admitir.
                          
-Lo siento...-Susurró Jenn sobre el pecho de Daryl. 
                          
-No pasa nada, te entiendo de sobra.
                          
Jenn se separó de Daryl sin dejar de abrazarle, le miró sonriendo y le dio un pequeño beso. Daryl dibujó una pequeña sonrisa en su rostro y apartó un mechón de pelo de la cara de Jenn dejando su mano en el cuello de esta. La chica sonrió al suelo mordiéndose el labio inferior y Daryl agachó su cabeza para besarla de nuevo. 
                          
-Oh, vaya... Lo siento.- Daryl y Jenn se separaron del beso y se encontraron con un Glenn algo cortado por haberles interrumpido.
                          
-¿Qué quieres?- Preguntó Daryl algo molesto. Jenn soltó una risita y volvió a morderse el labio.