Especial 2

                                    

                                          
Aún estando dormido, escuchó las voces de mis hijos y como lo mujer los regaña. Quiero ponerlos en silencio pero ellos parecen no querer callarse. Cubro mi cabeza con mi almohada e intento seguir durmiendo. 
                          
Abro mis ojos sobresaltado por el movimiento brusco de mi cama. Frunzo el ceño cuando veo a Brad y Sky saltar sobre la cama.
                          
-¡Papi!.-Grita mi hijo riendo tirándose sobre mi.
-Feliz día papi.-Dice Sky abranzandome. Confundido abrazo a mis dos hijos. La puerta de la habitación se abre y Megan aparece con una canasta. Una sonrisa se dibuja en mi rostro. Ella siempre lucirá hermosa. Mi hermosa. Se acerca a nosotros con una sonrisa en su rostro. Se inclina y deposita un beso en mis labios. 
-Feliz día al papá más hermoso.-Dice ella sonriendo. 
-Gracias mi amor.
-Chicos, denle a su padre sus regalos.-Dice Megan y mis hijos inmediatamente me tienden una bolsa y una caja. Con una sonrisa en mi rostro los abro y les agradezco.
                          
Me han dado una camisa y unas zapatillas. Mi hijo me toma la mano y lo miro. Aún me cuesta un poco entender que ya no es mi bebé. Y que no hable mucho me hace olvidarme a veces que ya tiene tres años. El me da una hoja y sonrió mirando el dibujo de nuestra familia. Y escrito «papá te amamos» con la "O" hecha un corazón rojo. 
                          
Desayunamos todos juntos en la cama. Sky como siempre, no cierra la boca. Le encanta hablar y a mi me encanta escucharla. He aprendido que tengo que valorar estos momentos. En unos años más, en su vida aparecerán chicos y su papá dejara de ser el hombre de su vida. 
                          
Luego de desayunar, nuestros hijos fueron a jugar a el cuarto que me he encargado de hacerles. Miro a Megan que me mira y noto algo extraño. Ella quiere defirme algo.
                          
-Dilo.-Le digo acercandome a ella y abrazandola por la cintura.
-¿Decirte qué?.-Pregunta y besa mi barbilla.
-Lo que tienes que decirme. Te conozco.
-No eres bueno, Jared.-Me dice y yo la miro confundido.-No puedo ocultarte nada.-Me dice y se separa de mi. 
                          
Camina hacia su mesa de noche y saca una cajita alargada color roja con un moño blanco. Me lo tiende y yo la miro confundido. No me esperaba un regalo de su parte. Le deshago el moño y abro la cajita. Hay una varilla que ya he visto anteriormente. Levanto la cabeza sorprendido. Ella asiente y sonrió.
                          
-Pensé que dijiste que no querías otro bebé.-Digo un poco emocionado.
-No,pero paso. Felicidades. 
-Juro que te amo como no tienes una idea Megan. Me haces tan feliz que nunca encontraré palabras para demostrarte.
-Yo se cuanto me amas.-Dice sonriendo y deposita un beso en mis labios. 
                          
Me acerco a Brad y me siento a su lado y revuelvo su cabello. El me mira y deja de arrancar el pasto. Se acerca a mi cuerpo y yo lo rodeó con mis brazos.
                          
-¿Qué sucede campeón?.-Pregunto algo preocupado.
-Me siento solito.- Me dice y yo frunzo el ceño.
-¿Cómo puede ser eso cariño?.-Pregunto ahora bastante preocupado.
-No lo sé. ¿Me quires?
- Claro que te amo. Yo amo a todos mis hijos.
-¿Si?.-Dice sonriendome.
-Claro bebé. Eres mi principito. 
-Si.-Dice abrazandome. Nos quedamos así durante un largo tiempo. Cuando miro su rostro, me doy cuenta que se ha quedado dormido. Depositó un beso en su frente y me pongo de pie con el en brazos. Camino hacia su habitación y lo dejó en su cama.
                          
Levanto unos cuantos juguetes del suelo y pongo a su peluche de perro en su cama. El aún dormido lo abraza. Depositó un beso en su frente y salgo de la habitación. 
                          
Camino por el pasillo y miro dentro de la habitación de mi hija, se encuentra sentada frente a su tocador con su cabello mojado y envuelta en una toalla morada. Entró a la habitación y ella me mira.
                          
-Mami dijo que iba a vestirme pero aún no viene.-Me dice y yo asiento. 
-Ven, te cepillare el cabello antes que se seque.-Le digo tomando el cepillo color rosa con brillos. Lo paso por el largo del pelo de mi hija hasta haber cepillado todo su cabello. Comienzo hacerle una trenza cocida de esas que tanto ama ella. Cuando término, le pongo un moño al final y beso su mejilla. 
- Gracias papi -Me dice y yo sonrió. Me separo de ella y busco ropa limpia para vestirla. Cuando término con mi hija sonrió. Sin duda, Megan y yo, hemos creado dos niños perfectos. 
-Que haré contigo.-Digo abrazandola.
-¿Por qué papi?.-Pregunta confundida.
-Porque eres una niña hermosa y tendrás muchos chicos detrás tuyo.
-Yo solo te quiero a papi.-Dice y yo beso su frente.
-Te amo mi niña. 
-¿Foto?.-Dice ella y yo río. Mi hija ama las fotos. Me siento con ella sobre mis piernas y le doy mi teléfono para que saque la foto. 
                          
En una beso su mejilla.
En otra, ella besa la mia.
Y en la última, ambos sonreimos a la cámara.
                          
Miro las fotos y sonrió. El día que mi hija salga mal en una foto, yo no se que será de mi. No exagero para nada cuando digo que ella es hermosa, parece un ángel de porcelana. Nos han ofrecido muchas ofertas para que ella sea cara de alguna marca. Pero bajo ningún concepto voy a ganar dinero por mi hija. 
                          
-Papi.-Me llama y yo la miro.
-¿Qué sucede dulzura?.-Pregunto y ella me sonríe.
-¿Vamos a ver películas a tu cama? ¿Con mami y Bady?
-Con mami, Brad está durmiendo.-Le digo y ella asiente. 
                          
Espero que les haya gustado esta sorpresa. Besos x