11. SHIT

                                    

                                          
Me dirigí hacia Carol y le pedí alcohol y algodón.
                          
- ¿Para quién son?- preguntó antes de dármelos.
                          
- Daryl. Rick y él se pelearon antes y no acabó muy bien, que digamos.- Carol negó con la cabeza antes de dármelo todo.
                          
Me fui hacia la caravana junto con Daryl, ya que había anochecido y empezaba a hacer frío. Este se sentó en la cama y se quitó la camiseta, enseñando un fuerte cuerpo con varias cicatrices. No pude evitar sonrojarme. Empecé a caminar hacia él mirando la etiqueta del alcohol para no mirarle a él cuando, de pronto, me tropecé, cayendo encima de él. Entonces le miré y él me miró. Creo que por instinto me tumbó, quedando así él encima de mí. Pasaron unos segundos muy intensos hasta que Glenn entró.
                          
- Vaya, parece que he entrado en el mejor momento...
                          
- Hijo de...- Glenn cerró la puerta de golpe.- Ahora vuelvo.- dijo, poniéndose su camiseta de nuevo y saliendo por la puerta, dejándome allí cual niña pequeña esperando el regreso de sus padres a casa. Suspiré y me levanté, dirigiéndome a la "cocina". Abrí la nevera para buscar algo de comer, pero vi que no había nada y la cerré. Sentí una ráfaga de aire frío. Por lo que me giré para ver de dónde provenía: La ventana.
                          
Me dirigí hacia la ventana para cerrarla, pero al mirar a través de esta, me quedé quieta, observando como todo el grupo hablaba y reía alrededor de la hoguera. Inconscientemente sonreí al ver esa escena. Parecía como si nadie le diera importancia a la situación y fuera como si estuvieran de acampada. Me abracé a mí misma por el frío, y entonces alguien me abrazó por detrás.
                          
- ¿Qué miras?- me preguntó Daryl.
                          
- Todos parecen tan felices ahí fuera... Parece... parece como si todo fuera un sueño.
                          
- Sí... Ojalá lo fuera...
                          
- Ya... Bueno. Voy a curarte las heridas, venga.- Daryl resopló y volvió a quitarse la camisa. Esta vez pude curarle las múltiples heridas de la espalda sin ningún incidente.- Daryl, gírate. Te voy a curar las de la cara.- Daryl se giró y seguí curándole.
                          
Empecé con la herida del ojo izquierdo y proseguí con la del pómulo derecho. Cuando fui a curarle la del labio, el ambiente se volvió algo tenso. Empecé a curársela con cuidado, procurando no mirarle a los ojos.
                          
- Escuece...
                          
- L-lo siento... Espera...- con mi dedo pulgar le toqué la herida, nos miamos y me mordí el labio. Mierda. 
                          
Daryl se acercó a mí lentamente y nos besamos. Tras unos segundos de beso nos separamos.
                          
- Em... D-deberíamos ir fuera... Se preguntaran dónde estamos...
                          
- Nah, no lo creo.
                          
- Pues yo creo que sí.- dije levantándome. Daryl me frenó y se levantó, dirigiéndose hacia la puerta.
                          
- Chicos, Joyce y yo estamos en la caravana, no tenemos hambre.- dijo Daryl.
                          
- Vale. No hagáis cosas malas.- se le escuchó decir a Rick.
                          
- No lo haremos.- volvió a entrar y cerró la puerta- ¿Ves? Problema solucionado.
                          
- ¡Pero yo sí que tengo hambre!
                          
- Demasiado tarde.
                          
- Pero eso no val...- Daryl me besó, dejando la inacabada frase en el aire. Me levantó de la cama para abrazarme por la cintura. El beso fue suave y dulce durante los primeros segundos, pero poco a poco fue subiendo de intensidad. Me arrojó a la cama, dejándome coger aire.- No creo que debamos...
                          
-No vamos a hacer nada si tú no quieres.- contestó.
                          
- Mientras no pasemos de este punto...- Daryl sonrió y volvió a besarme, pero esta vez, Daryl estaba sobre mí en la cama. Tras unos segundos, Glenn se asomó por la ventana.
                          
- Pues para no tener hambre bien que os coméis la boca... En fin. Nos vamos a dormir. Saca las tiendas de campaña, Daryl. Joyce, Dale hace guardia.
                          
- De acuerdo...- dije sonrojada.
                          
- Ahora sí que vas a morir, maldito.- dijo Daryl poniéndose la camiseta.
                          
- No, no lo creo. ¡Venga! A poner las tiendas de campaña.
                          
Yo reí ante la reacción de Daryl, quién se levantó, muy enfadado.
                          
- Ya te he curado las heridas, ten cuidado.- le dije.
                          
- La del labio ha estado bien...- yo me sonrojé y antes de salir de la caravana, él añadió:- Además, el que debería de andar con cuidado es él.- Yo negué con la cabeza y salí de esta. Busqué un árbol cercano y me subí, no sin antes despedirme de todos y decirles que me llamaran si necesitaban algo. Coloqué mi arco a mi alcance y me dormí en una de las ramas.
                          
- ¡Joyce!- susurró alguien debajo de mí.
                          
- ¿Quién eres?- dije aún medio dormida.
                          
- Soy Daryl.- susurró de nuevo.- No hagas ruido, los demás ya se han dormido.
                          
- ¿Qué quieres?- dije esta vez susurrando.
                          
- Bueno, pensé que podríamos retomar lo que no acabamos, ya sabes a lo que me refiero.
                          
- No hay nada que acabar. Solo ha sido un beso y ya.
                          
- Han sido tres. Y... ¿quién ha dicho que me refería a eso?- susurró juguetón.
                          
- Yo... em...
                          
- ¿Vamos a cazar? Dale sigue de guardia.
                          
- Sí, claro. Vamos.- bajé del árbol y nos encaminamos a buscar a Dale. Cuando llegamos a la caravana, Glenn salió de dentro de esta.
                          
- ¡No empujéis!- dijo Glenn enfadado.
                          
- Lo siento.- dijeron al unísono Rick, Shane, Lori... Espera.
                          
- ¿Qué hacéis ahí?- pregunté.
                          
- Veníamos a por agua...- respondió Lori.
                          
- Sí... Ya nos vamos.- dijo Shane.
                          
- Adiós.- se despidió Rick. Todos se fueron menos Glenn.
                          
- En realidad no veníamos a por agua. Adiós.- dijo y se fue.
                          
- En fin... ¿Qué queréis? Apenas son las cinco de la madrugada.- nos preguntó Dale.
                          
- Nos vamos a cazar. Volveremos sobre las siete o así.- respondió Daryl.
                          
- De acuerdo. Avisaré al resto. Id con precaución. Toma el walkie-talkie. Habla con Glenn si pasa algo.
                          
- Gracias Dale. Vamos.- dije yo.
                          
Nos dirigimos de nuevo hacia el bosque. Entablamos una conversación mientras cazábamos. Acabamos con una docena de ardillas. Íbamos riendo cuando, a lo lejos, vimos lo que no queríamos ver.
                          
- Mierda...- dijo Daryl.
                          
- ¡Corre!
                          
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¡Hola! Iba a subir este capítulo ayer, pero se me olvidó -.-'. En fin, he decidido que subiré un capítulo cada semana. Y no sé qué día subirlo. Dejadme en los comentarios si lo preferís el Lunes o el Martes. Vosotros elegís el día. Otra cosa, no sé si el beso es muy repentino, pero no os preocupéis, porque no todo irá bien en la historia. Tengo muchas cosas pensadas para hacer y no sé si eso es bueno o malo. Pero bueno, ¡muchísimas gracias a todos los que leéis esta historia y espero que sigáis haciéndolo! Dejad vuestro bonitos y sexys votos y comntarios que me alegran el día y hasta luego. ¡Adiós!