CAP 35

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Había llegado la noche. Matteo y Lucas se encontraban en la sala de estar jugando unos videojuegos, mientras que Lisa y Zoe estaban en la habitación.

—¡Es que me pongo celosa! —decía Zoe, tirándose sobre la cama.

—¡Oh, vamos! Olvida el tema y dime cuál me pongo. —Zoe se levantó y la miró.

Lisa le estaba mostrando algo de lencería que había comprado para modelársela a Matteo.

—No tengo idea, no sé de ese tema. —Se volvió a tirar en la cama.

—¿¡Qué!? Espera, ¿tú y Lucas no lo han hecho? —Zoe se levantó y negó con la cabeza.

—¿¡Qué mierda!? Si escuché que él es divino en la cama y que lo hace súper bien.

—¿Dónde escuchaste eso de mi novio? —dijo cruzándose de brazos.

—Tu novio no es un santo. Se ha acostado con unas cuantas chicas.

Zoe negó con las manos.

—Mejor no hablemos mucho del tema. —Se volvió a acostar.

—Si no te lo ha propuesto, es porque de verdad te quiere.

—¿Será? —Zoe cerró los ojos un momento. Desde hacía rato tenía un poco de migraña. Al cerrarlos, recordó algo que había pasado en la mañana—. ¡Lisa! —La chica dio un pequeño brinco.

—Me asustas, niña.

—Esta mañana... yo empecé a saltar encima de él, y me dijo que no lo hiciera. Entonces yo le pregunté: "¿Por qué?" Y él me respondió: "Son cosas de hombres". ¿Eso significa algo? —Lisa se levantó de su lugar y le dio un pequeño golpe en la cabeza a Zoe.

—¿Eres estúpida? A los hombres les encanta eso. Bueno, solo he estado con tu hermano y a él le encanta que me le suba encima. No sé si a tu novio también.

—¡Dios! Qué difícil. ¿Cómo lo deduzco? —Zoe miró a Lisa, y cuando ella iba a hablar, tocaron la puerta.

La puerta de la habitación se abrió, y Lucas entró con una toalla alrededor del cuello, luciendo relajado tras una partida intensa de videojuegos con Matteo.

— Chicas, me voy a dar un baño, así que no hagan ruido, ¿sí? —dijo Lucas, mirando rápidamente a las dos antes de dar un paso atrás.

Zoe lo observó en silencio, la pregunta sobre la mañana aún rondando en su mente. Al ver a Lisa sonreír con picardía, ella ya sospechaba que estaba tramando algo.

Lisa, sin embargo, no tardó en levantarse de la cama y mirar a Zoe con una expresión traviesa.

— Oye, ¿por qué no te quedas aquí y lo seduces? Aprovecha ahora que está relajado y tú sabes... — Lisa levantó una ceja, claramente jugando con la idea.

Zoe frunció el ceño, un poco confundida pero intrigada al mismo tiempo. No había pensado en eso. Siempre había sido tan cautelosa con su relación con Lucas, pero ahora parecía que Lisa le estaba dando una especie de... permiso.

— ¿Seduce? —Zoe preguntó, casi como si estuviera preguntándose a sí misma si era una buena idea. Miró hacia la puerta del baño, sintiendo el impulso de ir tras él.

Lisa le dio un empujón juguetón en el hombro.

— ¡Vamos, Zoe! Tienes todo lo que necesitas. Ya no eres una niña, y Lucas es un hombre... seguro que le gustaría mucho. Sólo tienes que ser un poco más atrevida.

Zoe la miró, sorprendida, pero luego, con un suspiro de resignación, asintió lentamente.

— Está bien… pero solo... solo un poco, ¿ok? No quiero hacer nada raro.

¡El Sexy Hijos de Mis tíos! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora