Y como el mexicano dijo, empezaron a cocinar todo para la cena de esa noche, iba a tomar tiempo, pero al menos los tres disfrutaban estando juntos en la cocina.

Y como el mexicano dijo, empezaron a cocinar todo para la cena de esa noche, iba a tomar tiempo, pero al menos los tres disfrutaban estando juntos en la cocina

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Había pasado bastante cuando ya dejaron cocinando la cena, y el pequeño Pato ya estaba aburrido de esperar. Así que Sergio les dijo que podían ir a jugar a la nieve como familia.

El pequeño aceptó de inmediato. Junto a Max fueron a colocarse ropa más adecuada para la nieve, mientras que Sergio terminaba de colocar la mesa.

Pato bajó rápidamente las escaleras dejando escuchar su risa por toda la casa. Sergio lo volteó a ver y lo cargó cuando se lanzó a sus brazos.

—¡Oh! No tan rápido campeón, ¿dónde esta pa Max?

—Ahí viene... Cada vez es más lento... ¿Va a ser como los abuelitos?

Sergio lo miro extrañado, miro la escalera viendo como su prometido venía bajando las escaleras lentamente, como si tuviera miedo de caerse.

—¿Todo bien, Maxie? —preguntó el mexicano cuando su pareja llegó a su lado.

—Claro que sí, ¿qué te hace creer que no? —murmuró Max besando la mejilla de ambos chicos.

Sergio no quiso preguntar más. Dejó a Pato en el suelo, el niño tomo la mano del rubio y juntos fueron al jardín. El mayor lo miro atentamente, lo veía bien, dudaba que estuviera enfermo.

Solo suspiró y salió de la casa directo al jardín, donde su pequeño hijo ya estaba haciendo bolas de nieve para lanzarle a su pa Checo.

—¡Papá, ven! —exclamó emocionado el menor corriendo hacía él y esconderse detrás.

Sergio reía por la acción, ya que su prometido tenía una gran cantidad de nieve en sus manos.

—¡Ven aquí Patito! ¡Pa Max quiere darte algo!

Max se acercó a ellos y le lanzo la nieve a ambos, sorprendiendo a Checo que rápidamente empezó a correr detrás de él junto a Pato.

Estar así le hacía recordar bastante a algo, ¿pero a quien?

Estuvieron corriendo por algunos minutos, hasta que Patricio se canso al costarle más por la nieve. Así que Max le dio la gran idea de hacer un muñeco de nieve.

Pato se encargó de hacer la bola más pequeña, Max le de al medio y por último, Sergio haría la base del muñeco.

En vez en cuando se lanzaban bolas de nieve entre ellos, hasta el punto que el pequeño quedo de espalda en la nieve.

Cuando estuvieron listo, Max coloco su parte del muñeco sobre la de su prometido. Sergio se dirigió dónde Patricio y cargo para que colocará la cabeza del muñeco.

—¡Quedó muy linda! Pero le hace falta algo —murmuró Patito viendo el muñeco, movió rápidamente sus pies — ¡Papá, voy a ir a buscar algo!

Sergio rio levemente y bajo al menor, se acercó rápidamente hacia su pareja colocando sus manos sobre sus cinturas para levantarlo y dar una vuelta.

Medical Love | ChestappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora