9- 炎の再生と闇の儀式" (Honō no Saisei to Yami no Gishiki

                                    

                                          

**Raito sonríe de manera grotesca mientras observa el cuerpo sin vida de la joven. El muchacho se da la vuelta, caminando de espaldas, hasta que escucha una voz:**
- Eres demasiado débil... me encargaré yo a partir de ahora...
**Raito se gira rápidamente al escuchar la voz y ve algo curioso que lo deja en shock: a Nanao. Lo que realmente lo sorprende es el aspecto de la chica. Nanao ha regenerado su esqueleto, pero ahora solo tiene una calavera envuelta en llamas con dientes afilados. Su cuerpo se ha regenerado, pero solo su esqueleto. La chica tiene un aspecto completamente demoníaco. Raito sonríe al verla:**
- Vaya... realmente me has sorprendido. ¿Acaso has vuelto de los muertos para vengarte? - expresa de manera sarcástica mientras camina a su alrededor. - Realmente te ves como uno de esos demonios...
**Raito sonríe y, moviéndose velozmente, intenta dar una patada descendente hacia la cabeza de Nanao con la intención de acabar con ella. Sin embargo, la joven se mueve más rápido que antes, evitando la patada y lanzando una patada con su pierna envuelta en llamas, golpeando a Raito en el rostro con la planta esquelética de su pie, obligándolo a retroceder.**
- Vaya, vaya; parece que cuando alguien está muerto se vuelve más fuerte - dice Raito mientras envuelve sus puños con luz y empieza a lanzar golpes seguidos contra la chica de aspecto zombificado.
**Nanao, por su parte, esquiva los ataques con dificultad, pero logra evitarlos. Poco a poco, su piel y otros tejidos comienzan a aparecer, empezando por las piernas. La chica agarra a Raito por las muñecas, separando sus brazos, y le da una patada ascendente en el mentón. Sin embargo, Raito echa la cabeza hacia atrás, evitando un golpe directo, y a continuación golpea con su cabeza la frente de Nanao. El choque de la cabeza de Raito con la cabeza llameante de la chica genera un vendaval que se extiende desde el punto de impacto.**
**La chica, tras el cabezazo, retrocede rápidamente unos centímetros, lo que Raito aprovecha para saltar sobre ella como un depredador sobre su presa. Estira los dedos de su mano derecha, envuelta en luz, dispuesto a usar su corte de luz con la intención de decapitarla. Sin embargo, la calavera que era la cabeza de Nanao empieza a recuperar tejido en su cráneo hasta la mitad. El ojo que ha recuperado la chica ahora brilla con un resplandor rojo, y su macabro rostro comienza a sonreír mientras dice:**
- Vrak Drok: Thrak
**Al pronunciar esa frase, la chica mueve su brazo en dirección a Raito. Este, teniendo un mal presentimiento, esquiva el ataque de Nanao por puro instinto, yendo en la dirección contraria. Puede ver que hizo lo correcto, ya que lo que Nanao había señalado con su movimiento empieza a arder siguiendo la dirección que marcó su brazo, con unas llamas negras y rojas que queman todo como si una explosión hubiera sacudido esa zona.**
- Tomaste una buena decisión, humano - dice Nanao con varias voces mientras observa a Raito con su rostro a medio regenerar y una sonrisa siniestra. - En caso de haberlo recibido, dudo que siguieras con vida...
**Raito muestra una enorme sonrisa y le pregunta a Nanao:**
- Ese idioma, ¿es el idioma jittai, verdad? - pregunta el chico a la joven. - No pensé que la hija de los emperadores conocería ese idioma, y mucho menos que pudiera usar una técnica similar a la que algunos jittai pueden hacer.
**La joven sonríe mientras mira al mago de la luz.**
- Eso es porque ellos han copiado la técnica - contesta la chica. - Y te equivocas un poco en que yo soy la hija de los emperadores.
**Raito mira confundido a la chica.**
- Puedes llamarme Oanan, la llama de la destrucción - se presenta la chica con una reverencia teatral. Su voz se mezcla con ecos oscuros, y su sonrisa se ensancha, mostrando una fila de dientes afilados como cuchillas. Las llamas que envuelven su cráneo chisporrotean, iluminando su rostro a medio regenerar con un brillo siniestro.