CAPÍTULO XV

                                    

                                          
CONDOR VS C.U.B.E
Dante y Steins observan al cóndor gigante. Su portador baja del edificio y se para frente a ellos, diciendo:
—Cóndor, usa ráfaga de aire cortante.
El titán agita sus alas, y el viento que crea arrasa con los edificios. La gente evacua el sitio de inmediato antes de que sea tarde. Las ráfagas cortan el lugar.
—Electrical, usa un puñetazo trueno.
El robot hace brillar su puño derecho y avanza para golpear al enemigo con fuerza. Archie lo esquiva, extiende sus brazos y golpea al enemigo en el pecho, haciéndolo estrellarse contra el suelo. El cóndor vuela por la ciudad y ataca con tornados que arrasan con todo.
—Hippo Samba, usa chorro de agua —dice Dante.
El hipopótamo carga una esfera de agua en su hocico y la dispara contra el Cóndor. El ave se protege con sus alas y responde con una esfera de aire que rompe el suelo. El impacto arroja a los dos lejos, contra los escombros. Dante se golpea la cabeza y se hace una herida.
Jaundiced sonríe despiadadamente y ordena:
—Cóndor, usa aire comprimido.
El titán dispara su aire comprimido contra el chico. Él mira con preocupación.
—Electrical, usa protección iónica —dice Steins, alarmado.
Electrical patina y se coloca al frente del chico. Invoca energía iónica del cielo, golpeando el suelo y desviando el ataque a los lados. Dante mira a su padre con preocupación, se levanta y se limpia la sangre que cae por su frente.
—Hippo Samba, ve hacia el titán y usa torbellino acuático.
Hippo Samba corre con rapidez y se coloca debajo del titán. Gira su tela a gran velocidad, creando un torbellino de agua que se eleva y cubre una gran área. El titán ataca con su aire, pero no logra romper el torbellino que cubre una gran parte del cielo.
—Al menos mi sacrificio no será en vano.
El agua cae sobre el titán y lo aplasta junto con Hippo Samba. Las costillas del muchacho se rompen, y una de ellas perfora su corazón. El chico cae hacia atrás y es agarrado por el oficial.
—¿Qué hiciste? —pregunta Steins, angustiado.
El cubo de Dante desaparece para hallar a un nuevo portador. Jaundiced se incorpora y le ordena al Cóndor que ataque. Escucha un grito de “alto” del oficial.
—Acabas de matar a tu único hijo —dice Steins, enojado.
—¿Hijo?, Hijo…
—Papi, agárrame. Yo te quiero mucho —dijo un niño pequeño. 
Archie tomo a su hijo y lo levanto al cielo; ambos están felices.
<<Esto es falso, tu hijo nunca te quiso. ¿O olvidaste lo que te hicieron?>>
Le recuerda a Archie lo que sucedió ese día, y el hombre también recuerda cuando vio a su hijo que le pidió que no se fuera.
—¿Qué me hiciste hacer? —pregunta Archie, enojado—. Maté a la única persona que me quería…
Archie cae de rodillas al suelo, con mucha tristeza, y se pone a llorar. El titán desaparece, y del cuerpo del hombre emana un aura café que forma al Cóndor de Nazca.
—Ya no quiero esto… Quiero estar con mi hijo.
Saca una pistola de su chaqueta, y Steins corre para detenerlo. El estruendo del disparo llena el aire, y la maldad desaparece, dejando atrás un pilar con la línea de Nazca del cóndor. Steins se lamenta y llama a la policía y a las ambulancias.
Los habitantes de la ciudad Scrap-Junk arrojan piedras y disparan contra las ambulancias y patrullas. Están furiosos por la destrucción y la muerte de inocentes.
Chell, que viaja en la ambulancia, mira por la ventana a su gente y se siente triste.
Sinose corre hacia la enfermería y, al llegar, abre la puerta con fuerza. Allí ve a una niña sentada, y sobre la camilla está Yuzhe, con las mejillas enrojecidas y un paño húmedo en la frente.
—¿Qué sucedió? —pregunta Sinose, preocupado.
—Lucho con un titán, y él me protegió —responde Chell triste.
Sinose se acerca y cuida de la pequeña niña. Toma la mano de Yuzhe y espera a que despierte.
Yuzhe despierta, mira el techo de la enfermería y aún tiene fiebre. Se sienta en la camilla y ve a Sinose dormir. Con calma, acaricia el cabello del chico y observa la luz de la luna a través de la ventana.