La caja estaba brillando.
La luz se reflejó en sus ojos mientras miraba los papeles que había dentro. Lo que antes era tinta negra se volvió dorada y las palabras escritas en ellos comenzaron a... flotar en el aire.
' ¿Qué demonios?'
Cale instintivamente dio un paso atrás mientras las palabras se arremolinaban como un tornado, cubriéndose el rostro con los brazos mientras soplaba una fuerte ráfaga de viento que hizo que los papeles se dispersaran.
En medio de la extraña situación en la que se encontraba, solo registró el grito de advertencia de Igneel en el último segundo.
"¡¡Bien!!"
Para entonces, ya era demasiado tarde para darse cuenta de lo que estaba a punto de suceder.
Las letras que giraban formaban una línea que atravesaba su cabeza; no, era más bien como si su cerebro las estuviera absorbiendo.
Sus ojos se abrieron y sintió como si estuviera viendo una película, presenciando lo que el niño de las cartas había experimentado, sintiendo lo que el niño sintió cuando las escribió.
"Puaj-!"
Cale se agarró a la mesa más cercana para sostenerse.
Se vio obligado a revivir un pasado que no quería recordar.
Entre el metal retorcido y los cristales rotos, se encontró atrapado, incapaz de moverse. El aire estaba cargado de un olor que le revolvía el estómago, y el sonido de sus propios sollozos resonaba entre los escombros. Su pequeño cuerpo temblaba de miedo y confusión mientras miraba a la mujer que tenía delante, que lo protegía del entorno afilado.
—Rok Soo ya... Está bien... Mamá está aquí, no llores... —La voz de su madre, tensa por el dolor, atravesó el caos como una melodía tranquilizadora. A pesar de la agonía grabada en su rostro, reunió todas las fuerzas que le quedaban para consolar a su hijo.
"Pero papá..." gimió Rok Soo, con voz temblorosa.
—Papá está durmiendo, cariño... —las palabras de su madre vacilaron levemente y una lágrima se le escapó del rabillo del ojo mientras hablaba de su padre, que yacía inmóvil junto a ellos.
—Oh, mi querido Rok Soo... Te amo, ¿de acuerdo? Siempre estaremos aquí para ti... Recuerda... que... —Su voz era suave, su conciencia se desvaneció junto con sus susurros.
Con lágrimas corriendo por sus regordetas mejillas y pequeños sollozos desgarradores, el pequeño Rok Soo se aferró a la mano de su madre, sus pequeños dedos entrelazados con los de ella mientras el sonido de una ambulancia comenzaba a acercarse desde la distancia.
Mientras Rok Soo sollozaba en la habitación vacía del hospital, murmuró: "Mamá, eres una mentirosa..."
Desde aquel accidente, siempre se sintió solo.
—Ese es Kim Rok Soo, ¿no? Perdió a sus padres en un accidente.
¿Estás simpatizando conmigo?
Pobrecito. Es muy joven todavía. ¿Quién lo cuidará ahora?
"No necesito tu simpatía."
Mientras los susurros se escuchaban detrás y alrededor de él, Rok Soo los ignoró como si fueran una brisa pasajera. Cuando vio una hoja volar ante sus ojos, miró al cielo.
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sonámbulo de skyrndipity
FanfictionCale Henituse fue arrojado a otro mundo por segunda vez tras enfrentarse a su nuevo enemigo, Los Cazadores. Con la ayuda de sus compañeros y los dioses, ¿podrá sobrevivir una vez más en un mundo apocalíptico? Menos mal que su especialidad es la supe...