WISH, la hermosa ciudad donde florece el amor, enfrenta una nueva aventura. Tras un gran problema en Wayland, Lee Taeyong, el jefe a cargo de Wishland, decide enviar a los novatos Neowishitos en su primera misión como cupidos. Sin embargo, al ser su...
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Wish-land, la ciudad de los cupidos, rebosaba de energía mientras los nuevos reclutas se entrenaban con entusiasmo. En el centro de entrenamiento, los Neowishitos, los más recientes miembros de la ciudad intentaban dominar sus habilidades bajo la mirada atenta de Jisung, un veterano del escuadrón NeoDream. Con una leve sonrisa, observaba los esfuerzos de los novatos.
De pronto, el dispositivo de comunicación en su bolsillo vibró. Jisung contestó rápidamente y su expresión cambió a una de preocupación tras escuchar el mensaje. Sin perder tiempo, se dirigió con urgencia hacia el edificio central de Wish-land.
Al llegar a la oficina del jefe, abrió la puerta sin detenerse a tocar, haciendo que el sonido resonara en toda la sala y sobresaltara a quien estaba sentado detrás de un escritorio lleno de documentos y archivos.
"¡Jefe, aquí Jisung, escuadrón NeoDream, Cupido de la Alegría!" anunció Jisung con firmeza, tomando posición de militar y saludando con respeto.
Lee Taeyong, el jefe de Wish-land, lo miró con sorpresa, pero enseguida sonrió suavemente.
"Jisung, ¿cuántas veces te he dicho que no me llames 'jefe'? Llámame 'hyung'," corrigió con una sonrisa.
"Jef... hyung, tenemos un problema serio," dijo Jisung sin rodeos.
Taeyong lo miró por unos segundos antes de hablar.
"Ya lo sé," respondió mientras tomaba un archivo de su escritorio. "Después de ocho años, tenemos un caso especial."
Jisung lo miró desconcertado.
"¿Un caso especial?" preguntó, sin entender bien a qué se refería.
Antes de que Taeyong pudiera explicarse, Jisung lo interrumpió de nuevo, agitando las manos.
"Hyung, recibí una llamada de Way-land," dijo, su tono más urgente.
La expresión de Taeyong se endureció de inmediato. "¿Y qué pasó?"
"Necesitamos enviar tropas a Way-land de inmediato," respondió Jisung.
Taeyong negó con la cabeza, visiblemente preocupado.
"No podemos. No tenemos tropas disponibles, la mayoría están en misiones fuera de Wish-land. No podemos quedarnos sin protección aquí."
"Pero... el jefe Kun insistió en que debía estar allí," replicó Jisung con una mirada de súplica.
