Capítulo 4: florida!!! - taylor swift, feat. florence the machine

Comenzar desde el principio
                                    

"Schatje, ¿me estás escuchando?" El mexicano ni siquiera se había dado cuenta, pero había estado divagando tan profundo que su celular había terminado en el suelo. Fue el mismo ruido de su teléfono cayendo lo que alertó al neerlandés que su pareja no se encontraba bien. Pero fue la misma mirada de ciervo perdido del pecoso lo que terminó por confirmar la falta de atención por parte de su pareja.

"Dios, perdóname, amor. No sé qué me pasó." Confesó el moreno, notando por fin la presencia de su celular en el suelo. Asustado, se apresuró a levantarlo, comprobando que, para su suerte, aún seguía funcionando. Cuando lo prendió, únicamente para asegurarse que estaba en buenas condiciones, un titular con una foto de Lewis y Nico fue lo primero que vio. El mexicano no pudo evitar el pequeño quejido que soltó, mismo que terminó por encender todas las alarmas en la cabeza de Max quien, más rápido de lo que canta un gallo, terminó por tomar lugar al lado de su novio en el sofá. 

"Chequito, ¿está todo bien? No me importa que no me hayas escuchado, la verdad estaba diciendo pura tontería. Estoy feliz de que Hamilton haya tenido un buen rendimiento, se lo merecía." El neerlandés se acercó a su pareja, empezando a acariciar la espalda del mayor. No pudo evitar, debido a la cercanía, y aunque sabía que estaba mal, observar la pantalla del celular de su novio. A primera instancia, no entendió el porque Checo estaba viendo una noticia de Lewis y Nico, pero conforme puso más atención a las micro expresiones faciales del mexicano, Max pudo darse una leve idea de qué era lo que estaba pasando por la cabeza del castaño.

"Mijn liefje, necesito que me seas muy sincero." El mexicano dejó de ver su celular, dándole toda su atención, o la que su agitada mente le podía proporcionar, al rubio. Checo evitó verlo a los ojos, pues sabía que una simple mirada del muchacho de Países Bajos era más que suficiente para que se terminará por quebrar. "Verme quejarme de Hamilton te recordó la época de 2016, ¿verdad?"

Max no tuvo que siquiera ver la reacción de su pareja, pues el simple temblor de su cuerpo se lo confirmó. "Amor, tú y yo no somos nada como ellos dos. Somos muy distintos, ¿sabes por qué?" El mexicano negó, sintiendo como algunas lágrimas traicioneras cayeron por sus pecosas mejillas. "Porque nos comunicamos. Lo hicimos después de Brasil 2022 y aún seguimos aquí. Eso debe contar para algo, ¿no? Porque para mí cuenta, y mucho." Con movimientos pausados, Max se permitió pasar sus brazos por las axilas de su pareja, logrando levantarlo sin ningún esfuerzo para dejarlo sentado sobre sus piernas. "Porque para mí, el que me hayas perdonado, el que hayas vuelto a creer en mí, lo es todo. Me demostraste que me amas y estás dispuesto a arriesgar todo por esta relación."

El neerlandés sostuvo a su pareja más cerca, logrando que el piloto mayor se recargará en su pecho. Sabía que lo que necesitaba Checo eran palabras de afirmación, ya después se encargaría, por medio de actos, recordarle lo mucho que le importaba y amaba. "Y quiero que seas consciente que yo también. Si pudiera regresar en el tiempo a ese día, te cedería el lugar sin siquiera pensarlo. Porque para mí tú vales más que cualquier campeonato que pueda ganar. Porque aprendí a las malas que sin ti no soy nada y que seré un completo estúpido si te vuelvo a perder de nuevo por mi maldito orgullo."

Checo ya no pudo soportarlo más. Había tratado de evitar llorar solamente para no terminar de molestar a Max, pero se estaba dando cuenta que simplemente lo evitó para no verse débil. Sabía que estaba bien mostrar debilidad, pues era imposible que siempre pudiera ser fuerte, mas las horribles y machistas tradiciones de México aún seguían muy presentes en su ser. Cada que derramaba alguna lágrima no podía evitar sentir vergüenza, 'Dios, soy un fallo de hombre, ¿qué me diría mi papá si me viera así?' Sergio sabía que sólo eran sus inseguridades hablando, pues su padre era un hombre de hogar. Para él, su familia era lo más importante y ver a sus hijos llorar, en lugar de generarle odio y enojo, solamente le generaría una gran preocupación por comprobar su bienestar emocional. 

chestappen mis papás; yuki & chestappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora