Todo el mundo sabe que el Demonio Sparda tuvo hijos gemelos, Vergil y Dante. Sin embargo, sin que todos lo supieran, Sparda tuvo un tercer hijo con otra mujer. T/N T/A, un hombre que pasa sus días como cazador de demonios. ¿Qué pasará cuando su medi...
Se podría argumentar que no era seguro para mí continuar la lucha contra Urizen, y mucho menos seguir mi propia ruta donde me encontraría con una multitud de demonios, cualquiera de los cuales podría causar que Eclipse recayera. Y tal vez tengas razón, tal vez hubiera sido más seguro para mí quedarme en la camioneta con Lady, Trish y Nico.
Pero no, sin que nadie lo supiera, sabía que Eclipse no podía resurgir. Porque para desbloquear mi nuevo estado demoníaco, tuve que asimilar la encarnación demoníaca dentro de la propia espada, lo que significa que ahora tenía control total sobre la espada.
Además, incluso sin eso, esto era algo que necesitaba llevar a cabo hasta el final. No es que no tuviera confianza en la capacidad de Dante, Nero y V para detenerlo. Pero con lo que nos hizo a mí y a Lady, había ido más allá de simplemente salvar a la humanidad de un demonio malvado, no, ahora se había vuelto personal.
Con eso en mente, me abrí camino a través de los oscuros senderos del Qliphoth. En este punto, en realidad era solo una cuestión de quién podría llegar primero a la cima del Qliphoth y entre aquí y allá, como mencioné antes, había múltiples hordas de demonios que tendríamos que atravesar, lo cual era una ventaja para nosotros y para mí, ya que aún podría usar Eclipse para cosecharlos, solo que sin las repercusiones negativas de atacar a todos los que me rodean.
Y efectivamente, no me tomó mucho tiempo llegar a mi primera horda de demonios oponentes y estos fueron particularmente interesantes. Unos diez minutos después de que nos separamos, me encontré en una habitación abierta que, por supuesto, era el lugar perfecto para una emboscada.
A mi alrededor, con un movimiento circular, los demonios emergieron del suelo. Estos no eran como los típicos demonios que había encontrado antes, estos parecían caballeros, similares a los caballeros utilizados por la Orden de la Espada hace cinco años. Por supuesto, sin el esquema de color blanco brillante y en su lugar había un negro intenso.
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Al mirar más de cerca a estos demonios, noté un parecido con Nelo Angelo, la persona demoníaca bajo la cual Vergil estaba mientras estaba bajo el control de Mundus. Lo cual, con lo que estaba empezando a entender sobre Urizen, fue muy interesante.
Me interrumpieron mis pensamientos cuando todos los caballeros me rodearon y adoptaron posiciones defensivas con sus escudos levantados frente a ellos y sus espadas listas para ataques punzantes. No es que esto les fuera a servir de mucho.
Una sonrisa se dibujó en mi rostro mientras hablaba conmigo mismo: "Bueno, este parece que podría ser el ejercicio perfecto. Mi cuerpo se ha sentido un poco rígido desde que obtuve el control de Eclipse, así que esto debería permitirme estirarme y probar mi nueva arma de fuego"
En una mano sostenía Eclipse y en la otra tenía el nuevo y mejorado Cinder. Los caballeros comenzaron a acercarse a mí, pero mi sonrisa permaneció. Había unos diez caballeros a mi alrededor y todos a la vez se apresuraron hacia adelante.
