Todo el mundo sabe que el Demonio Sparda tuvo hijos gemelos, Vergil y Dante. Sin embargo, sin que todos lo supieran, Sparda tuvo un tercer hijo con otra mujer. T/N T/A, un hombre que pasa sus días como cazador de demonios. ¿Qué pasará cuando su medi...
El sonido de gritos humanos llamó mi atención, al mirar hacia arriba vi una serie de personas corriendo hacia mí, provenientes de la dirección del gran templo. Inicialmente supuse que tenía algo que ver con los demonios Espantapájaros que me atacaban, sin embargo, uno de ellos se detuvo justo frente a mí y me gritó en la cara: "¡SU SANTIDAD HA SIDO ASESINADO! ¡CORRED POR SUS VIDAS!"
Antes de que pudiera pedirle más detalles a la mujer, ella salió corriendo por la calle gritando. Me volví hacia Lady levantando una ceja confundido. Lady se rió de mi gesto y respondió: "Parece que tu hermano nos ganó aquí. Ya está dejando su huella"
Si bien era muy posible que fuera simplemente la horda de demonios la que matara al líder de la Orden. Sin embargo, era muy poco probable que fueran directamente hacia el líder. Preferirían simplemente masacrar a todos los presentes. No, esta vez tuve el presentimiento de que Dante o Trish habían dado su primer paso.
Me reí un poco y comenté: "Sí, ese es Dante para ti". Luego me volví hacia el templo al que inicialmente planeábamos dirigirnos. Lady y yo continuamos por ese camino, abriéndonos camino en esa dirección. Y como era de esperar, pronto nos encontramos ante aún más demonios.
Por supuesto, esta vez también tuvimos en cuenta a los peatones corriendo. Por lo tanto, no pudimos utilizar explosivos pesados, a riesgo de causar víctimas innecesarias. En lugar de eso, Lady sacó ambas pistolas mientras yo una vez más blandía a Eclipse y me lanzaba a atacar ferozmente.
Mi primer ataque apuñaló el torso del demonio, luego corté hacia abajo, cortando a la criatura por la mitad. Me giré y realicé otro corte contra otro demonio. Cuando ambos cayeron al suelo, centré mi atención en el tercero.
En ese momento me encontré sacando a Cinder y disparándole varias veces en la cabeza. Lady se divirtió tanto como yo aquí. Ella disparó tiro tras tiro con ambas armas, eliminando demonio tras demonio con poco esfuerzo. Me ayudó especialmente ahora que estaba usando Cinder, permitiéndome hacer prácticamente lo mismo.
Con los dos trabajando juntos, no nos llevó mucho tiempo abrirnos camino a través de la horda que era más pequeña que las que habíamos luchado antes. Y después de eso, continuamos nuestro camino hacia las profundidades de la ciudad hasta que finalmente llegamos a un gran patio abierto centrado alrededor de una estatua.
Aquí, naturalmente, encontramos aún más demonios y no perdimos el tiempo para atravesarlos. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de matar a otro demonio, alguien se me adelantó. Realizó un corte hacia abajo y cortaron al demonio por la mitad.
Me volví para mirar quién era y me encontré con un hombre de aspecto bastante estoico que vestía un abrigo largo blanco con la insignia de la Orden de la Espada estampada en los brazos. Él sostenía un tipo único de espada que supuse era el arte de espada usado aquí en Fortuna.
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Instantáneamente se volvió hacia mí y me advirtió: "Será mejor que salgas de aquí ciudadano. Habrá más demonios en el área en breve" Una vez que pareció asimilar mis detalles, dijo: "Espera, no te reconozco. A juzgar por tu elección de vestimenta, asumo que eres un extraño" Su tono cambió a uno algo agresivo cuando preguntó: "¿Cuál es tu negocio en Fortuna?"
Luego, sus ojos se posaron en Eclipse y se abrieron por un momento cuando dijo: "Esa espada, es de naturaleza demoníaca" Levantando una ceja le pregunté "¿Qué pasa? ¿Quién eres?" Toda la conducta del hombre cambió de repente. Sus ojos se entrecerraron mientras abruptamente me apuntaba con su espada.
"¡Soy Credo, capitán de los Caballeros Sagrados! ¡Entrega tu arma a la Orden de la Espada inmediatamente o sufre las consecuencias!" Su voz tenía un tono amenazador, sin embargo, no me desanimó en lo más mínimo.
En lugar de eso respondí con calma: "Mira, ¿Credo era así? Esta espada ha sido mía durante muchos años. Con el debido respeto, no la voy a entregar voluntariamente, ni a ti ni a nadie" Credo preparó su propia espada y dijo: "¡Que así sea, prepárate para la batalla!"
Lady dio un paso adelante, pero yo la detuve y le dije: "No, tengo a este tipo cubierto. Tú sólo concéntrate en mantener a raya cualquier problema adicional" Parecía lista para protestar, sin embargo, una mirada severa de mi parte fue suficiente para hacerla simplemente asentir.
Me alejé de ella cuando Credo se abalanzó sobre mí con su espada. Hizo un swing hacia abajo. Levanté a Eclipse y pude bloquear fácilmente el ataque. Con un gruñido pude empujar con firmeza, derribando a Credo y haciéndolo tambalearse.
Seguí con un movimiento hacia la pierna, haciendo que el capitán de la Orden cayera de espaldas. Hice un corte hacia abajo, muy parecido al de Credo antes. Se las arregló para levantar su propia espada para bloquear seguido de una patada también. Sin embargo, esto lo evadí fácilmente.
Credo giró hacia arriba, aterrizando sobre sus pies antes de precipitarse instantáneamente una vez más. Murmuré "¿Cuándo aprenderás?" Fui a defenderme, pero para mi sorpresa, Credo rápidamente se arrodilló y lanzó un poderoso corte en la parte inferior de mi torso.
Un humano normal definitivamente habría muerto por una herida como esa. Pero al ser mitad demonio, solo me quedó un pequeño rasguño que pronto se curó solo. Credo notó esto cuando se detuvo, rodó por el suelo hasta que estuvo sobre una rodilla y tartamudeó: "¡¿E-eres un demonio?!"
Antes de que pudiera responder, él se puso de pie y espetó: "Ahora no puedo dejarte escapar. ¡Morirás en mi mano!" Y así, corrió hacia adelante de nuevo, esta vez vine a su encuentro y chocamos en el medio.
Saltaron chispas de nuestras espadas cuando dije: "Eres un guerrero talentoso. Te lo concedo. Pero no puedes vencerme. Te animo a que te rindas" Credo espetó "¡No seré menospreciado por gente como TÚ!" Con eso nos separamos y nos miramos fijamente.
A partir de ahí, simplemente nos batimos en duelo. Nuestras espadas chocan entre sí una y otra vez. Lo admito, aunque claramente tuve la ventaja durante toda esta batalla. Credo estaba lejos de ser débil, de hecho, era probablemente el segundo humano más fuerte al que me había enfrentado, sólo superado por Lady. No estaba contando a Arius o Arkham en esa ecuación ya que ambos se mejoraron con energías y magia demoníacas.
Al final, después de una batalla sorprendentemente interesante. Credo y yo corrimos hacia adelante una última vez. Esta vez, fui yo quien se agachó, evitando un corte de Credo en el proceso. Luego procedí a seguir con un rápido codazo en la parte posterior de su pierna, lo que lo hizo caer y luego una patada en la espalda que lo derribó de frente.
Lo miré fijamente y dije lentamente: "Se acabó" Mientras rodaba sobre su espalda, le señalé a Eclipse y le dije: "Ahora, dime. ¡¿La Orden está vinculada a estos ataques de demonios?!" Credo me miró sorprendido por un momento antes de escupir: "¿Qué? ¡¿No?! E incluso si lo fuéramos, ¿por qué te importaría? ¡Los demonios como tú son simplemente monstruos despiadados!"
Gruñí y mi visión casi se puso roja, sin embargo, Lady abruptamente me impidió hacer algo de lo que me arrepentiría. "¡Detente T/N! No vale la pena" Jadeé pesadamente por un momento, no sé qué estaba pasando por mi cabeza.
Finalmente di un paso atrás, bajando a Eclipse en el proceso. Lady me tranquilizó: "Vamos. Estoy bastante segura de que hay un castillo no muy lejos de aquí. Puede que haya algo allí" Me volví hacia ella y le respondí: "Tienes razón. Lo siento, no sé qué me pasó"
Lady sonrió y dijo: "Está bien. Vamos, tenemos mucho terreno por recorrer" Sin embargo, nos dimos vuelta para irnos antes de escuchar a Credo decir "¡Demonio, para!" Hice precisamente eso y nos quedamos en silencio por un rato.
No se dijo nada y al final, simplemente me di vuelta y seguí alejándome. Hacia lo que podría ser la siguiente pista...
