Cap 55

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Nos enfocamos en el presente nuevamente, Reiko caminaba por los pasillos vacíos de la U.A ya que es hora de clases y es técnicamente la única afuera. Hablar con su nueva jefa Inko Midoriya fue un tanto extraño, nunca ha habido conocido a alguien así en su vida y eso que ella se ha juntado con bastantes personas de todo tipo. Sin duda, su ahora maestra es única en su especie, y es la única que le ha planteado la idea de ser ella misma, ser independiente, tener una personalidad.

Quizás muchos piensen que lograr algo como eso es muy sencillo, simplemente tienes que hacer lo que quieras ¿Verdad? Solo fluí y dejar que todo pase ¿Cierto? Pero para Reiko que se ha pasado la mayor parte de su vida tomando papeles, guiones de cómo debe: Actual, hablar, sus gustos, sus disgustos. Ciertamente, ella se ha olvidado quién es ella realmente.

Pero hoy tuvo una pizca de eso, cuando se atrevió a levantarle la voz a su superior, cuando expresó su disgusto sobre las acciones de Inko. Es la primera vez que ella dice lo que piensa en realidad sin reservarse ni un poco. Es complicado, ni siquiera sabe por qué algo como eso le disgusta ¿Cuál es su filosofía? ¿En qué basa sus acciones? ¿Por qué pelea? Ella no sabe nada de eso de sí misma. Inko Midoriya tiene razón, a Reiko le falta mucha experiencia y más como soldado se refería en la vida general.

¿Cómo puede juzgar los deseos y motivaciones de alguien cuando ella no sabe cuáles son sus deseos ni motivaciones? Ni siquiera tiene un código moral, ni siquiera sabe qué le importa y lo que no, simplemente se ha limitado en seguir órdenes. Esto es más duro de lo que la peli gris pensó, necesita de alguien quien le diga qué hacer, necesita una estructura a la cual seguir, necesita alguien que controle sus acciones.

Pero a Inko Midoriya no le da nada de eso, simplemente una libertad que sinceramente Reiko Yanagi no sabe qué hacer con lo que su maestra le ha regalado. La libertad es la cosa más buscada del mundo; sin embargo, por alguna razón, quizás por costumbres, Reiko preferiría estar encadenada.

—En serio que eres una mujer muy peculiar— se dijo la joven mientras abre su casillero, pensaba mucho en su conversación con ella, es lo único que tiene en mente ahora —todos dicen que yo soy tu futuro remplazo ¿Eso quiere decir que todos esperan que sea igual a ti? Ese es mi papel, ser tú, tomar tu lugar cuando te retires, pero ¿Por qué se siente insatisfactorio? Es todo lo que debo hacer; sin embargo, se siente un sin sentido para mí—

Ella abrió su casillero, no hay mucho. Una de las cosas que posee es una foto con todos sus compañeros de la clase B. Al principio la guardó porque era parte de su guion, pero ahora esa foto tiene cierto valor para ella.

— ¿Debí de intervenir cuando la liga de villanos nos atacó en el campamento? Tenía prohibido hacerlo y solo obedecí y tres de mi clase fueron secuestrados. Y uno de ellos es un viejo conocido mío, Shihai Kuroiro. Se puede decir que somos algo así como amigos de la infancia. Aunque bueno, yo siempre he tenido un personaje. Todos mis amigos son falsos, porque yo soy falsa ¿Seguirás vivo a este punto? —

Los recuerdos inundaban la mente de esta joven chica, pensaba cómo empezó todo, cómo se convirtió en aprendiz para la comisión de héroes, y cómo empezó su entrenamiento para ser la siguiente Inko Midoriya. Ella suspiró y dejó de pensar, era inútil para ella hacerlo.

—Me siento un poco mal ahora—

Ella seguía caminando, se dirigía a su habitación. No tiene sentido tomar clases cuando ya no eres una estudiante. Sus días como alumna de la U.A terminaron, y ahora es guardaespaldas de ellos. Oficialmente le dieron su primer trabajo como agente de la comisión de héroes, es un gran paso para su futuro y carrera profesional, también tendrá buenas referencias cuando entre finalmente al ejército. Lo único que se lo impide es que aún no es mayor de edad, y en dos años y medio podría por fin comenzar su camino como soldado.

Daño ColateralDonde viven las historias. Descúbrelo ahora