Maddy, Helen, Rue, Lexi y Cassie estaban dentro del lugar, demasiado amplio y hermoso como para ser realmente un baño de hospital dónde una desconsolada novia lloraba sobre su sencillo vestido blanco, sabiendo que posiblemente, en menos de un día, ya sería viuda.

Helen observaba a su novia rodear torpemente con sus brazos a su pequeña amiga, sabiendo que la chica no estaba cómoda con la idea de hacerlo. Helen sabía que lo hacía porque su corazón no le permitía dejar a su amiga sola en un momento así. La conocía bien.

Rue y Lexi apenas se miraban. O, mejor dicho, Rue apenas miraba a Lexi. La castaña había intentado hablar con su amiga un par de veces al llegar, pero la chica más alta simplemente se alejaba, como si le doliese estar cerca de ella. Finalmente, Lexi parecía haberse rendido.

Helen: Cassie, no llores. Sé que es difícil, pero Joe no querría verte así.

Cassie: ¿Cómo lo sabes? ¿Cómo puedes pedirme que no llore? ─No estaba molesta, estaba dolida. Y esto era cien veces peor.

La chica simplemente suspiró y se sentó junto a Cassie en el suelo de aquel baño.

Helen: Hace ocho meses mi mamá recibió una llamada de mi abuela. Tenía cáncer terminal e iba a morir pronto. Muy pronto. Tomamos el primer vuelo disponible, y finalmente la encontramos en su habitación, con una enfermera tan estúpida que dudo que en realidad lo fuese... Yo no la veía seguido, pero la quería como no puedes imaginarte... Me dolía estar perdiéndola, así que comencé a llorar. Cuando me vio, ella simplemente me pidió que dejara de llorar, pero le dije que no. Le dije que lloraría porque ella iba a morirse, y era yo quien iba a sufrir por no tenerla. Le dije que lloraría hasta que ella se fuera, e incluso después de eso. Le dije que jamás dejaría de llorar porque me estaba destrozando ─A este punto ya estaba llorando, Rue y Lexi acercándose a ella y envolviéndola con sus brazos, olvidando por esos momentos todo lo sucedido días atrás─. Entonces ella comenzó a llorar, Cassie. Lloró, y yo jamás la había visto hacerlo. Yo estaba tan enojada y dolida porque ella iba a dejarme que, simplemente, no pude recordar que no había sido su elección... Fue entonces cuando comenzó a ahogarse. Sabía que se estaba yendo, e iba a morir llorando, todo por mi culpa. Comencé a gritar... Mis padres me sacaron de la habitación, y ella murió quince minutos después... Si hubiese sabido que eso sucedería habría sonreído. Falsamente, pero lo habría hecho. Y tal vez ella habría vivido un poco más, y habría podido decirle cuánto la quería... Y no habría muerto llorando... Está bien llorar, Cassie. Pero no cerca de él. Vas a romperlo. Más de lo que ya lo está... Te va a doler como la mierda, pero no llores, porque si no tú te sentirás como una.

Finalmente, Helen se entregó a las lágrimas, recordando el momento, abrazándose fuertemente a Rue y sintiendo las caricias de Lexi en su espalda. Sabía que Maddy también deseaba abrazarla. Lo sabía porque la conocía bien. También sabía que habría decidido quedarse junto a Cassie, abrazándola con torpeza.

Cassie la necesitaba más.

Maddy: Recuerdo ese día ─Escuchó susurrar a Maddy. Helen se alejó un poco del abrazo de Rue y la miró. La chica abrazaba a Cassie fuertemente, y, por primera vez, no parecía incomoda. Tal vez ella necesitaba un abrazo también─... Yo la vi morir, Eli... Yo lo estaba mirando todo a través de la ventana y ella solo... No fue bonito y no fue ni un poquito bueno, pero no pude alejarme. Lo siento.

Helen: Seguro pensaste que yo era una pésima persona...

Helen observó como su novia negaba con la cabeza, una pequeña sonrisa en sus labios.

Maddy: Tal vez suene cruel, pero pensé que eras muy bonita.

***
Cassie finalmente había dejado de llorar y había limpiado sus lágrimas. Rue y Lexi se ocuparon del maquillaje, y por primera vez desde que había sucedido lo del beso las chicas bromearon entre sí. Finalmente, la pequeña chica se miró al espejo, encontrando una sonrisa en su rostro.

"La chica de la ventana" - | Maddy Pérez |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora