Línea Original. PWP.
Escrito durante la emisión del capítulo 29 del cómic.
«Toques suaves para hacerte sentir seguro».
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Aunque había intentado ocultarlo por todos los medios posibles, sus constantes escalofríos acabaron por delatarlo. Era terco y odiaba la idea de no ser constantemente útil, así que por supuesto que negó estar enfermo. Quizá le habrían creído si no hubiera tenido un ataque de pequeños estornudos; todo fue peor porque Brayan se burló de él, diciendo que estornudaba como minino y no dejó de atormentarlo con el tema.
Al parecer tenía gripe y algo de fiebre; Yeni había acabado por persuadirlo de quedarse en cama, al menos hasta que mejorara «un poco», lo cual en realidad significaba que no lo dejaría salir hasta que se hubiera recuperado completamente. Kevin solo se consoló pensando que, de todas formas, nunca tardaba en mejorarse.
Incluso así, no le gustó cuando tuvo que quedarse en cama, sintiéndose más un inútil estorboso que otra cosa; si bien se sentía cansado y el cuerpo le dolía, no le gustaba la idea de no hacer nada. No fue mejor cuando Brayan le dijo que él podía encargarse de cuidarlo; simplemente se sintió peligroso por la manera en la que sonrió y ladeó la cabeza.
Kevin casi se sintió como una de las muñecas de su prima, próximo a sufrir destrozos y quizá la pérdida de una extremidad. Brayan casi hasta se veía propenso a envenenarlo accidentalmente.
—Ya he hecho esto antes, no te preocupes —le había dicho Brayan, como si eso fuera garantía de su seguridad. Claro que la manera brusca en la que lo sujetó de los hombros y lo obligó a sentarse en la cama fue ligeramente contradictorio—. Estás en buenas manos.
—Yo dudo —farfulló Kevin, con cierta dificultad por su nariz congestionada. Se sintió mareado cuando Brayan lo recostó sin cuidado y una punzada de dolor le atravesó el cerebro. La habitación se tornó oscura por unos segundos.
Kevin escupió un par de lisuras en murmullos, sin la energía suficiente para discutir en voz alta. Sentía frío, le dolía la cabeza, le picaba la garganta y ni siquiera podía respirar bien. Detestaba estar enfermo; era como destruirse desde dentro.
—Quiero morir —se lamentó Kevin. No fue una sorpresa.
¿Cuál era el sentido de existir si tenía que lidiar con algo como la gripe?
Hizo ademán de taparse con las sábanas porque sentía que el frío iba a acabar con él, pero Brayan no se lo permitió. Le quitó la única posible fuente de calor que tenía cerca y Kevin intentó protestar por eso.
—Es obvio que tienes fiebre —dijo Brayan, como si no darse cuenta de eso fuera estúpido—. No puedes abrigarte, te hará mal.
—No tengo fiebre —replicó Kevin, bufando cuando Brayan se sentó a su lado.
—Sé que eres un poco tonto, pero no pensé que tanto. Tienes fiebre.
—Pruebas, bastardo.
—Deberías mirarte —respondió Brayan, acariciando su mejilla con el dorso de la mano. Quizá era porque su piel ardía, pero Kevin sintió que el tacto fue casi gélido; de alguna manera el contraste se sintió más como un alivio que otra cosa—. Y estás temblando. Vamos, lindo, no soy estúpido. Reconozco la fiebre cuando la miro.
—No basta eso —farfulló Kevin. Algo dentro suyo le decía que contradecirlo no tenía sentido, que Brayan tenía razón y solo debía aceptarlo; pero la idea de aceptar que Brayan tenía razón en eso no le gustaba, sentía la necesidad de darle la contra solo para no ver satisfacción en su rostro—. Deberías tomar la temperatura, eso es una prueba.
Brayan tarareó. No tenía un termómetro a la mano; pero no dejaría que eso lo limitara.
Se inclinó sobre Kevin, observando su indiferencia cansina; ver cómo algo tan trivial como la gripe podía mantener a Kevin así de quieto (aunque un tanto más malhumorado y arisco) era curioso cuanto menos. Tomó sus mejillas entre sus manos y sintió cómo su piel hervía; no fue sorpresivo, no cuando la fiebre ya le había causado un rubor que le cubría desde la punta de la nariz a las orejas.
Juntó sus frentes y sintió el sobresalto de Kevin. La manera en que sus manos tantearon su ropa y se aferraron a él no lo sorprendió, no demasiado. Sus pupilas se dilataron, pendientes a cualquier cosa; a Brayan le gustaba cuando pasaba eso.
Tenía razón, su frente también ardía en calor enfermizo y Brayan estaba seguro de que era igual con todo su cuerpo. Por supuesto que no intentaría comprobarlo.
—Estás caliente —susurró Brayan. Kevin intentó decir algo, pero pareció difícil para él encontrar alguna palabra—. Yo tenía razón, tienes fiebre.
—Bien —murmuró Kevin, desviando la mirada. Aparentemente resignado.
Brayan se separó, pero Kevin tardó unos segundos en soltarlo, como si costara hacerlo. Lo hizo cuando Brayan sujetó sus manos y lo instó a soltarle la ropa; Kevin se aferró al contacto y cerró los ojos, sintiendo que sus párpados pesaban.
—Descansa —le dijo. Aunque su voz fue casi tierna, Kevin sabía que eso era una orden.
La manera gentil y lenta que tuvo Brayan para soltarle las manos fue extraño, pero de algún modo transmitió cierta confianza y el cuidado que no recordaba haber recibido jamás. Olvidó completamente lo mala idea que le había parecido tener a Brayan cuidándolo y decidió que podía dormir, desconectarse por un rato de su cuerpo y descansar.
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Me gustan los escenarios fluffy de los dos 🥺
Terminé esto, le di un par de revisadas hasta que me pareció decente, y luego me dije: «Espera, ¿no escribí ya algo con la misma temática?». Me resigné, por las webas escribiendo esto; mejor lo dejo
No le sé a los idols coreanos pero me define. Se supone que no iba a repetir prompts 😭😭😭
Cuando digo que no tengo absolutamente ningún borrador guardado es 100% en serio. Pasen ideas o esto entra en hiatus hasta q regrese el cómic en un mes
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Acopio [ EBW ; Brayan & Kevin ]
Fanfiction30 días sin sentido y poco relacionados, pero que giran en torno a la pareja no canónica conformada por Brayan y Kevin.