- Ah muy bien, bueno yo me retiro, hasta luego.

Taehyung se apresuro a irse y ni siquiera dirigirle la mirada a Hoseok, el cual se quedo algo extrañado de lo rápido que se había retirado, no le dio importancia y se metió al departamento para recoger los papeles que necesitaba.

Taehyung se dirigió a su departamento casi en modo automático, ni siquiera fue consciente del transcurso y ya estaba sentado en el sofa de su sala.

Trató de recapitular todo lo que habia pasado hasta ahora y recordo que le había dicho a Jungkook que no lo buscara. Y ahora él se había marchado a Nueva York, a comenzar una nueva vida y dejar en el olvido los últimos meses que paso con él, que mejor que poner distancia de por medio para eso.

Creyó que no podía sentirse peor, pero ahora saber que Jungkook estaba al otro lado del mundo lo llevo del dolor a la desesperanza.

Jungkook lo había dejado, así de simple, continuaría con su vida y empezaría de cero, mientras él se quedaba varado en el mismo sitió.

Las semanas siguientes pasaron lentas, ya habian pasado dos meses desde que habia ido a buscar a Jungkook a su departamento enterandose de su partida a nueva york
Desde entonces su vida estaba llena de noches en vela y días grises.

Ese día por la tarde terminaba su larga jornada en el hospital su moto estaba en el taller ya que por las constantes lluvias había quedado arruinada, así que decidió caminar hasta su departamento, se sentia sofocado después de pasar todo el día en quirofano.

Caminaba por las calles con la nostalgia en su espalda, muchos lugares los habia recorrido con Jungkook, cada memoria que venia a su mente era un alfiler encajandose en su corazón.

Los arboles verdes, el cielo azul junto al sol y algunos vestigios de nubes que yacian de la lluvia que se habia precipitado hace algunas horas, evocaban los últimos días del verano.

Caminaba pausadamente sintiendose extraño en su propia piel, como si ya no fuera él, sino solo un observador de su patética existencia.

Pasaba sin cuidado por los charcos de lluvia que había por todo el camino.

Algunas gotas remanentes en las hojas de los arboles caían en su rostro debido a la brisa que los agitaba.

El olor a lluvia y el aroma fresco de los árboles se colaba por sus fosas nasales cuando trataba de tener respiraciones profundas buscando que disminuyera la ansiedad que lo habia atormentado desde su separación con Jungkook y los días posteriores en los que no sabia nada de él.

Era agosto pero en su corazón se sentía el invierno.

Del otro lado del mundo había alguien que sufría con los mismos recuerdos

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Del otro lado del mundo había alguien que sufría con los mismos recuerdos.

Todo había dejado de tener sentido para Jungkook, sus días transcurrían como una copia del otro.

Se levantaba se aseaba salia del hotel, una escolta lo llevaba a la embajada, trabajaba apoyando en algunos casos de gente coreana residente en estados unidos.

En la mañana en su oficina solo tomaba un café, el nudo que sentía en su estomago y las nauseas que sentia desde el momento en que despertaba no se iban hasta pasado medio día

En la hora de la comida le llegaba a su oficina la comida que encargaba de un pequeño restaurante cercano a las oficinas y que diario le enviaban por petición de él, ya que salir al exterior en esos días le resultaba abrumador.

Y como cada día solía jugar con la comida en el envase desechable, revolviendo la ensalada continuamente, probando dos o tres bocados, le costaba tragar un bocado en extremo.

Aunque la gente que trabajaba en la embajada tenia pocas semanas de conocerlo había sido muy evidente la rapidez con la que había bajado de peso esos días, resultado de comer poco y ya no ejercitarse como lo hacia en su vida en corea, habia perdido masa muscular. Seguía siendo atractivo aún con su delgadez pero ya no parecía el hombre corpulento que había pisado las oficinas de la embajada los primeros días de su llegada, pero asumían que era por que no terminaba de adaptarse a su vida en estados unidos.

Aún así estar en la oficina lleno de trabajo era lo que lo mantenía cuerdo, el problema venia una vez que pisaba de nuevo el solitario cuarto de hotel.

Ahí su ánimo se iba totalmente por la borda bajando en una espiral de tristeza en la que navegaba cada noche desde su llegada, y asi mismo como cada noche para acallarla tomaba la botella de whisky que le hacia compañía hasta quedarse dormido.
Pero ese dia antes de comenzar a emborracharse como siempre, sentado en la orilla de la cama, su celular sonó, era Hoseok.

- Hola
- Jungkook amigo me da gusto que respondas tan rápido, estos de los horarios es complicado pense que estarias dormido, escucha acabamos de salir de la audiencia de Lee, fue sentenciado a cadena perpetua y sera extraditado a una de las carceles de mayor vigilancia, lo bueno de todo esto es que durante la investigación y el juicio se desmantelo la gente que trabajaba para él en sus negocios fraudulentos, ¿Jungkook sabes lo que significa?

- Que ganamos el caso - dijo de una manera desganada.

- Eso es obvio amigo pero yo hablo de qué todo sucedió rápido y tal vez en dos semanas mas ya puedes regresar sin peligro.

Jungkook se puso de pie en cuanto escucho eso, su corazón latia rápidamente.

¿Regresar? la sola idea de poder ver de nuevo a Taehyung aunque sea de lejos le provocaba querer irse en ese mismo momento.

-¿ Puedo regresar ya? No quiero esperar dos semanas más, estoy harto de vivir en un hotel.

- Sería lo mas prudente que esperaras las dos semanas, para que terminen de trasladar a Lee a la cárcel donde cumplira su condena.

Jungkook se tocaba la frente con desesperación.

-¿ Y como sabre cuando ya lo hayan trasladado?

- Yo te avisare de inmediato por eso no tengas cuidado.

Después de despedirse colgaron, Jungkook ni siquiera recordó la botella de whisky, se acostó mientras imaginaba volver a ver a Taehyung, le invadia la emoción de solo pensar en ello, aunque un sentimiento de miedo se apoderaba de él, ¿Taehyung ya lo habría olvidado? Quería aferrarse a la mínima esperanza de que aún no lo hacía, y a esa esperanza se aferraría en los siguientes días.

Después de despedirse colgaron, Jungkook ni siquiera recordó la botella de whisky, se acostó mientras imaginaba volver a ver a Taehyung, le invadia la emoción de solo pensar en ello, aunque un sentimiento de miedo se apoderaba de él, ¿Taehyung ya ...

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Volteado como tazoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora