Arrancé el sobre sin ninguna preocupación y saqué la nota que estaba dentro. Juro que nunca había tocado un papel más caro en mi vida. No sé que textura era, pero se sentía como que cada milímetro costaba mil pesos.
— Está en blanco. — me desilusioné al no ver nada escrito. Levanté la nota para mostrársela a mis simis y fue cuando me di cuenta que en realidad la estaba viendo al revés. — Ay, que pendejo.
Le di la vuelta para comenzar a leerla, tomando como primera impresión que la persona que lo había escrito tenía muy bonita letra.
Querida _____.
Ay no.
Cerré los ojos en cuanto leí las primeras dos palabras de la carta. No era para mí, era para _____.
Abrí los ojos para dirigir mi mirada a los simis, mi fieles consejeros.
— No debería de leer.
Lo simis asintieron, dándome a entender que no, no debería hacerlo.
— Pero lo quiero leer...
Mis simis volvieron a negar, por lo que no me quedó de otra que tomarlos a todos y aventarlos al sillón para que no me juzgaran por lo que iba a hacer.
Regresé al comedor y tomé la nota nuevamente entre mis manos. Solté un suspiro para volver a leer las letras.
Querida _____.
Extraño tu compañía. Ruego saber porque te fuiste sin previo aviso.
Lo único que deseo es poder hablar o que al menos contestes mis llamadas.
Con cariño, D.V.
— ¿D.V? — cuestioné con extrañeza.
Recordaba esas siglas, por supuesto que lo hacía. Era la persona que llamó a _____ el día que nos encontramos en el parque.
También recordaba que ella no quería contestarle cuando le marcó, tanto así que me había arrebatado el celular para silenciarlo.
Tenía muchas preguntas en mente, pero sabía que ninguna le podía preguntar a ______ porque para empezar, no debí leer la carta que le correspondía.
Luego me preocuparía por la carta, ahora lo que haría sería sentarme en el sillón y relajarme por un buen rato después de haber pasado la mayoría de mi día de aeropuerto a aeropuerto.
Me deje caer pesadamente sobre el sillón, soltando un largo bostezo y estirándome. No me caería mal un sueñito...
Llamada entrante. ☏
Tomé una almohada para gritar silenciosamente antes de contestar la llamada, ¿por qué me me llaman cuando no quiero ser llamado?
— ¿Bueno? — pregunté con la voz cansada.
Por favor que no sean los de Telcel.
— ¡Quackiris! — exclamó la otra voz de la línea, notablemente más contenta que yo. — ¿Qué haces, Quacks?
En cuanto reconocí su voz, me enderecé en el sillón y mi sueño había desaparecido mágicamente. Mi cara adormilada fue cambiada por una tenue sonrisa que agradezco que no la haya visto, porque si no, me delataría.
ESTÁS LEYENDO
Quackity x tú || 𝐀𝐌𝐎𝐑 𝐏𝐎𝐑 𝐂𝐎𝐍𝐓𝐑𝐀𝐓𝐎
Fanfiction❝ En donde Alex/Quackity firma un contrato junto con _______ para hacer crecer sus carreras como streamers mutuamente. ❞ Fingir una relación no es tarea fácil, pero aún así, ¿el amor se quedará como parte del contrato? ¡NO COPIAS NI ADAPTACIONES! ➥...
XXI. 𝑾𝒉𝒊𝒕𝒆 𝒍𝒊𝒍𝒊𝒆𝒔
Comenzar desde el principio