😊✨Capítulo 31 : Extra 3: Dulces sueños✨😊

                                    

                                          
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Liu Qingge se despertó con una presencia que se colaba por su ventana.
Las comisuras de su boca se torcieron hacia arriba mientras fingía estar todavía dormido.
Solo había una persona que haría esto en Cang Qiong, y realmente no entendía por qué siempre estaba a través de la ventana, pero no le importaba la visita.
De nada.
Cuando la persona se deslizó en su cama, Liu Qingge disparó un brazo, atrapó al intruso por la cintura y lo atrajo hacia su pecho.
Shen Yuan apenas logró sofocar un grito cuando el hombre que pensó que estaba dormido lo capturó sin ningún problema.
"¿H-hola-?" tartamudeó, parpadeando con esos hermosos ojos verdes, un poco avergonzado.
Liu Qingge simplemente colocó una mano detrás de la cabeza de Shen Yuan y lo besó en la sien. "Hola", dijo una vez que terminó.
Shen Yuan se sonrojó maravillosamente, le dio a Liu Qingge un rápido beso en la comisura de su boca antes de hundirse en las sábanas y en el pecho de Liu Qingge, tratando de ocultar su vergüenza.
Hubo silencio en la habitación por unos momentos mientras Liu Qingge disfrutaba la sensación de Shen Yuan en sus brazos.
"... ¿Shen Qingqiu no estará enojado mañana?" preguntó finalmente.
Sintió que Shen Yuan se tensaba por un momento antes de decir: "... Duermo mejor así".
Esa no fue realmente una buena respuesta, pero Liu Qingge solo sonrió y metió la cabeza de Shen Yuan debajo de su barbilla. Mañana se ocuparán del Jiu-ge de Shen Yuan.
Momentos después, Liu Qingge se movió y miró a Shen Yuan con los ojos entrecerrados.
"... ¿No te ibas a dormir?" preguntó.
Shen Yuan lo miró inocentemente y continuó enredando sus piernas, frotando sus espinillas contra las piernas de Liu Qingge. Una mano delgada se coló debajo de la túnica de Liu Qingge, acariciando su costado y sus abdominales.
"Shen Yuan", gruñó en advertencia, pero Shen Yuan solo se rió y puso su otra mano en juego.
Liu Qingge dejó a un lado su autocontrol, rodó rápidamente sobre Shen Yuan y sujetó esas manos mal portadas a la cama.
"Lo estás pidiendo si sigues así", dijo Liu Qingge, su voz un poco más profunda de lo normal, causando un escalofrío en la columna de Shen Yuan.
A pesar de estar completamente sonrojado, los ojos de Shen Yuan miraron directamente a Liu Qingge, brillando con picardía.
"¿Qué pasa si tengo la intención de... pedirlo?" preguntó.
Liu Qingge se puso rígido por un momento, sus ojos rastrearon el bonito rubor que se extendía por el esbelto cuello de Shen Yuan, y las afiladas clavículas se asomaban por debajo de su ropa de dormir ligeramente holgada.
Este hombre era tan...
Liu Qingge se inclinó ferozmente hacia adelante para borrar esa sonrisa, capturando esos labios de color rosa pálido con los suyos y besando al tentador hechizante dentro de una pulgada de su vida mientras sus manos recorrían ese pecho suave y esbelto.
Traer a Shen Yuan a su vida la ha cambiado completamente, pero Liu Qingge no se arrepiente de nada.
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Notas:
Esta es la última parte de la historia real. ¡Gracias por leer!
El siguiente capítulo son solo algunas divagaciones de escritores sobre lo que podría suceder después.