-Salmón - Dice en bajito.
                          
Antes que nada logra abrazarme con fuerza y sujetarme contra él, sin embargo aún sentía como su brazo seguía inexistente. Osea que todo lo que sucedió, ¿Fue real? Me separo lentamente de él y le quedo mirando, mi mano la llevo a su mejilla y la ahueco allí, con mi pulgar logro darle pequeñitas caricias y sólo veo cómo él sonríe. 
                          
-¿Qué fue lo que sucedió? - Pregunto temiendo querer saber y a la vez no.
                          
-Creo que yo puedo responder más rápido, señorita.
                          
La voz que nos interrumpe nos hace separarnos de golpe, al voltearme puedo reconocer que está el hombre que es la mano derecha del clan Inumaki y a un lado de este, está el hombre de la última vez que ví. 
                          
Sólo me limito en hacer una pequeña reverencia.
                          
-Yo...hola - Digo mirándolos incómoda y algo cohibida.
                          
-Me temía que ya no despertara, lleva dos semanas sin dar señales señorita t/a - El hombre me miraba con una mirada comprensiva - Me parece que no entiende mucho lo que sucede, ¿No?
                          
-La verdad es que no señor - Agarro la tela de mi yukata y aprieto mis puños, a ver si la ansiedad logra irse.
                          
-El incidente de Shibuya del 31 de Octubre marcó un antes y un después - Explica - Pero lo primero, él es el señor Inumaki-sama, líder del Clan Inumaki y padre de Toge-sama - Apunta elegantemente al sujeto de su lado.
                          
Este sólo me mira como si estuviera inspeccionando mi persona, sin embargo suaviza sutilmente su mirada para hacer una leve inclinación de cabeza.
                          
-Pulpo - Pronuncia con una voz neutra y ronca.
                          
No quiero fruncir el ceño al escuchar eso, pero me vino un leve deja vú a cuando conocí al ojivioleta por primera vez en la escuela.
                          
-Inumaki-sama, al igual que Toge-sama, utilizan ingredientes de comida para comunicarse, tradición del abuelo de Toge-sama - Contribuye el hombre.
                          
Ay dios, mi suegro.
                          
-Hola señor Inumaki - Le miro tímidamente.
                          
Este sólo levanta una ceja y su rostro aún está neutro.
                          
-Bien, debes tener hambre, ¿Qué tal si vamos a comer? Es hora del almuerzo ya - El hombre comienza a ordenar a las señoras que miraban atentas la escena.
                          
-¡A trabajar! - Da un aplauso.
                          
Tiro de la manga de él, pues aún no sabía su nombre.
                          
-Señor, ¿Me podría decir su nombre? Por favor.
                          
-Dirígete a mi como Miyamoto.
                          
-Cla..claro señor miyamoto.
                          
-Hojuelas de bonito - Toge toma mi brazo y comienza a caminar conmigo.
                          
Nos dirigimos por los pasillos hacia un gran salón, éste era decorado con pinturas en sus paredes con figuras de serpientes de óleo, estas tenían los símbolos del clan. Además, al medio de la habitación había una gran mesa con diferentes comidas. 
                          
Como veo que todos comienzan a se sentarse alrededor de la mesa, imito la acción. Sin embargo, aún sigo algo cohibida. 
                          
-Mmh...Inumaki-senpai - Repongo tirando de la manga de su yukata, éste de inmediato me mira atento - Necesito una explicación, ¿Qué sucedió con todos?
                          
-Dije que yo iba a contestar eso, señorita t/a - Miyamoto me sonríe levemente - Esperemos a que llegue la señora Inumaki a comer. 
                          
Mierda, ¿Cómo que señora Inumaki? ¿Que es el día de conocer a toda la familia?.