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—Al fin despiertas

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—Al fin despiertas.- Hyunjin dejo de lado su celular.

Mientras acomodaba su cabello hacia atrás haciendo lo notar más atractivo si no fuera por la luz del sol que traspasaba la ventana chocando con su cara, Felix podría haber quedado más encantado por la acción que realizo el pelinegro.

Felix se acostumbro a la luz al poder abrir bien los ojos, su vista iba a cada rincón del lugar ¿Dónde estaba? esa era la pregunta que se hacía el pecoso y al darse cuenta que no estaba en su recámara ni muchos menos parecía la del mas alto ya que el olor a medicina llegó hasta sus fosas nasales. Frunció el ceño ante el olor ya que los hospitales eran uno de los lugares menos preferidos de Felix, la razón los doctores y las inyecciones una combinación para nada buena.

Dónde algunos recuerdos de su niñez abundaron su mente e relatos hecho por su madre ante las experiencias. Cómo la vez que golpeó a una enfermera quien trataba de ponerle una inyección en su brazo quien solo hacia su trabajo.

—¿Que hago aquí?.- trato de levantarse pero algunos artefacto estaban sobre su cuerpo y una pequeño tuvo estaba infiltrado sobre su piel.

Debido al como se encontraban tuvieron que inyectar algún suero, ya que su color de piel no era normal.

—Tuviste una recaída en tu trabajo y bueno la idea era llevarte a tu casa para que descansarás.- comento el pelinegro tan tranquilo, aunque eso pretendía parecer. Mantenía el semblante serio dándole total confianza a Felix de que todo estaba bien.—Pero empezaste a sudar mucho que decidí traerte hasta aquí.

—¿Cuánto tiempo?.

—Tres días.

—¿Qué?.- Felix no podía creer que había pasado tres días en el hospital y del como en un abrir y cerrar de ojos paso tan rápido. Porque incluso el no de dio mucha importancia a su estado de salud.—¿Que es lo que tengo?.- pregunto preocupado, debido a que tres días inconciente era demasiado.

—Tienes la Presión intracraneal demasiado alta por lo que a su principio fueron pequeños mareos y...

Fue interrumpido por el sonido de la puerta ser tocada llamando la atención de ambos chicos quienes miraron hacia la puerta de una manera tan sincronizada, una cabellera castaña se asomo tras la puerta con una sonrisa adentrándose al lugar.

Hyunjin en respeto se levantó de su lugar dando una reverencia, mismo acto que hizo Felix pero a comparación de su mayor dio una leve reverencia.

—Al fin despierta joven Lee.- La enferma se acercó empezando a revisar los signos vitales de Felix anotando los en su carpeta. Ambos se mantenía en silencio dejando que la joven enferma hiciera su trabajo.—Pensé que estaría así por mucho más tiempo. Debería cuidarse bien.- le regaló una sonrisa.

—Gracias- susurro bajo mirando de reojo al pelinegro quien solo se mantenía callado dejando hacer su trabajo a la enfermera.

—Tienes un buen amigo, estos días se la pasaba por aquí.- aseguro la chica.—Siempre atento a su salud.

¡¡NO SOY CHICA!!💌 HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora