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"Cuando el corazón  ya no pudo más llore por él y por mi, le pedí a Dios que no permita encontrarme con él nunca más"
                          
el dolor de dejar de amar  embriagaba mi soledad, en aquella habitación cuando la noche oscura llegaba casi a su fin, la tenue luz de la vela a punto de apagarse revelaba la seriedad de la situación  que  veía venir.
                          
desdichada y abandonada como una rosa marchita, bajas  la guardia y entras en un conflicto tratando de olvidarlo como el ya lo hizo, entonces son muchas de  aquellas noches cuando aquellos recuerdos vuelven, abren heridas  y otra noche mas llora amargamente.