Si lo tuyo es el mar, es recomendable que te alojes en un cómodo apartamento en Jávea durante tus vacaciones estivales y recorras las numerosas playas de la zona, mientras deleitas tu paladar en los restaurantes ubicados a pie de playa. Así que un buen plan para tu primer día en Jávea es visitar, por ejemplo, la playa del Arenal, situada cerca del centro que ofrece todo tipo de servicios. Aunque si prefieres arenales menos concurridos, acércate a la cala Sardinera y cala Granadella, ubicadas a 7 y 10 kilómetros de distancia del centro de Jávea, respectivamente.
Tras una jornada refrescante de playa y de descanso en tu apartamento, puedes continuar tu periplo visitando el casco histórico, un hermoso recinto amurallado con mucho encanto: calles empedradas y laberínticas, palacetes antiguos y detalles arquitectónicos que reflejan el legado cultural de diferentes civilizaciones. Los edificios más significativos son el mercado de abastos, el museo histórico y etnológico y la iglesia de San Bartolomé.
Después del recorrido urbano y de descansar en tu alojamiento, puedes hacer la ruta de los miradores, un recorrido señalizado de 25 kilómetros que te permitirá contemplar el precioso entorno natural de Jávea, con calas salvajes y bellos acantilados. Otro estupendo plan para aprovechar tu estancia en el alojamiento de Jávea es visitar el Parque Natural Mongó, que se eleva sobre los valles de Dénia, Jávea y Ondara. No menos interesante es la ruta que conduce a los antiguos molinos que hay, entre Denia y Jávea, en el cabo de San Antonio. Y si te gusta el submarinismo, sumérgete en el espectacular fondo marino de Jávea.