Al despertar me levanté para poder salir al evento, fui a tomar una ducha rápida y querer estar bien listo para asistir ahí. También me había puesto la ropa que había encargado, me quedaba muy bien y estaba alegre por ello. Pero algo me inquietaba un poco, recordando el sueño que había tenido.
-Hmm…. Fue un sueño raro, y esas personas que vi ¿Quiénes serán?- no dejaba de pensar en esos chicos que había visto, fue como si fuera tal real como lo habría imaginado, y ese lugar que estaba se veía muy hermoso.
Mientras dejaba todo ordenado ahí mi cuarto, mis juegos, mi ropa, etc., escucho un ruido que venía de mi cama. Me agache a ver lo que era y vi que estaba el brazalete ahí, lo tomé y presionaba unos botones para ver si paraba ese ruido.
-ya apágate, empieza a molestar eso – me decía mientras no soportaba el ruido que daba, pero de repente el brazalete empezó a vibrar, me estaba poniendo nervioso lo que pasaba, vibraba más fuerte y por si sola se puso en mi brazo y libera un gran destello. Abría lentamente mis ojos luego de esa luz intensa que dio, lo que veía ahora era algo que quedaba sin palabras, veía paisajes, mares, un gran desierto, y muchas cosas más que eran increíbles y maravillosos. Luego de eso empezó a oscurecerse todo, ya no veía nada de lo que pasaba, ni siquiera podía verme.
- eh? Creo que ya he pasado con eso antes – al pensarlo el brazalete daba una luz que me iluminaba, era más como linterna – genial, tiene modo linterna.
Caminaba por toda la oscuridad, empezaba a asustarme en todo esto, no sabía que hacer o como salir de aquí. Quise correr lo más rápido para poder salir, y en eso escucho un respiro fuerte, como algo bien grande. Me daba mucho miedo en darme la vuelta para saber que era, pero no tenía más opción, volteé y vi una gran bestia cerca mío, tan grande que ya mi corazón empezó a latir muy rápido y quedando inmóvil, y la bestia me ataca con sus garras.
-Aaahhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!- di un grito bien fuerte que me cubrí con mis brazos rápidamente, esto había sido mucho peor que los otros sueños que había tenido. Al abrir mis ojos estaba en mi cuarto, como si nada hubiera pasado.
-¿Pero qué pasó?-
No sé si lo que vi era bien terrorífico, había quedado muy asustado y mi corazón latía bien rápido, era horrible. Después de todo eso escuche a mi mamá.
-Hijo, ¿Qué pasó? ¿Está todo bien?- Sonaba preocupada luego del grito que di.
-Ahh, no, no pasa nada mamá, solo me asustó una araña- dije eso sin pensarlo, no podía decirle de todo lo que he visto, puede que no me crea y me envíe al psiquiatra, pero no creo que haga eso, y solo se me ocurrió decirle eso, y sí que le tengo miedo.
-Jajajajajaja, bueno hijo, date prisa que se te hace tarde.
-¡Ya voy!
Dejando todo limpio mi cuarto, vestido y listo para salir. Baje de las escaleras con mi bolso llevando mis cosas, como mi celular, billetera y mi cargador portátil, voy a la mesa a desayunar y mi mamá me ve preocupada.
-¿pasa algo? Te ves asustado.
-No mamá, no pasa nada, estoy bien. Y ya me encargue de la araña, no fue nada fácil. – fue lo que se me ocurrió.
-Mmm… Bueno, desayunemos bien y te dejamos en el evento, mientras vamos al supermercado.
-Sí, ahí me apuro.
Mi mamá se veía algo preocupada, pero no quería contarle lo que había visto, si lo supiera no sé qué haría. Ya terminando mi desayuno fui preparándome para ir, revise todo y ya no me quedaba nada, mire el reloj y… ya me queda poco tiempo.
Fui rápido al auto, mis padres ya estaban dentro y mi hermano enseguida entro al auto, casi se le quedaba su celular.
-ya estoy, vámonos – decía mi hermano y empezó a jugar en su celular.
Salimos de la casa ya en el camino, en donde vivo el barrio es algo alegre, lo malo que hay partes sucias ya que se cuida poco ahí, y a veces puede haber gente mala. Nosotros vivíamos bien, al menos.
-Qué bonito brazalete, ¿Dónde lo conseguiste?- dijo mi mamá viéndolo.
-Ah, eso, me llegó junto con el paquete, tiene un buen diseño- le contesté tranquilo.
- Me gusta - dice sonriendo.
-Oye hijo, llegó esta carta para ti- dice mi papá pasándome un sobre.
- ¿para mí? – recibo el sobre y en eso el brazalete da una pequeña luz verde.
-oh, brilla. Jeje, Me encanta - dice mi mamá contenta.
-sí, jeje.
- Alex ¿a qué hora llegaras? – decía mi hermano.
- no sé, como a las 7 pm, o más temprano, no estaré mucho ahí.
Mirando por la ventana vi que ya estábamos llegando, era un local bien grande, seguramente arriendan ahí para hacer estos eventos. Había mucha gente ahí, con música, cosplayers, y muchas cosas más.
Llegando me baje del auto y tome mis cosas.
- ya, ahí nos vemos, los llamo si salgo antes.
-Ya hijo, cuídate. Y que lo pases bien, diviértete. – decía mi madre.
-si mamá – miro a mi hermano antes de irme – Danko, ahí más tarde vemos el nuevo episodio de Avengers.
- ¿sale hoy? – quedando sorprendido.
-sí, bien, ya me voy, nos vemos.
Ya entrando con ánimo y mis padres fueron al supermercado. Al entrar vi que llego cualquier gente, me sentía algo nervioso pero pasaba normalmente, y mi brazalete no dejaba de iluminar, y empezaba a dar un ruido.
- ya apágate – tratando de hacer algo para detenerlo, pero no paraba, presionaba cualquier botón, al parecer quedo descompuesto. Al rato escucho a alguien hablándome y se acerca.
-Hola Alex, si viniste – era Naomi, una amiga que nos conocimos en el colegio, y le gusta también venir a estos eventos.
-Ah, Hola Naomi, creí que no podrías venir.
-Bueno, tenía que terminar rápido mis cosas y así poder ir, no fue nada fácil, créeme. – lo notaba así exhausta, pero relajándose.
Pero que traje tan bueno, ¿Dónde lo conseguiste?- dice encantada.
-Lo mande a hacer, ¿te gusta?
-Me encanta, se te ve muy bien, se ve que llama mucha la atención.
- ¿En serio? Jeje, gracias. ¿Y Cómo la estás pasando?
-Bien, divirtiéndome y esperando la banda, ya quiero oír su música. – quedando imaginando en cantar ellos. Una banda de JRock que fueron invitados al evento, para darle un gran toque.
- Que bonito brazalete. ¿Dónde lo conseguiste? ¿Por qué hace ruido?- preguntaba curiosa, la verdad ya me ponía nervioso eso, no sé lo que puede pasar si hace algo esto.
-Eehh… vino con el encargo, y no sé por qué suena, debe estar defectuoso - dije para que lo creyera y ya estaba pensando en deshacérmelo.
-Hola Naomi, y hola… ¿Alex? – ahí venía un buen amigo, Carlos. Es un amigo del vecindario, a veces vamos a unos lugares para entretenernos, y en ocasiones, algunos problemas.
-Hola Carlos, viniste igual – dijo Naomi alegre.
-Hola, sí, soy yo – diciéndole jugando con él ya que me había desconocido por el traje que tenía.
-Guau Alex, ¡te ves genial!- dice impresionado.
-Gracias, jeje ¿Cómo te ha ido últimamente?
-Bien, gracias, he tenido mejores días. – se queda mirando otro lado apenado, pero también alegre.
Estábamos pasándola bien, bailando y conversando, todo normal. Estaba seguro que todo saldría muy bien, sin que nada me preocupara, hasta que de repente, así de la nada…
PUUUMMM!!!
Hubo una gran explosión en la entrada, la gente estuvo corriendo del pánico, otros resultaron heridos y nosotros tuvimos que escondernos bajo las mesas. Tomamos una mesa volteándola usándolo como escudo, pensamos que pudo haber sido como un ataque terrorista, todo estaba desastroso, las personas buscaban una salida para huir, algunos quedaron lastimados. Después de ese humo de la explosión, aparecieron 3 sombras, no lo distinguían bien, después el humo se desvanecía, y ahí… ¡no lo puedo creer! Era un zorro, no como esas personas vestido de animales, era uno real, con un arma, ropa siniestra y aterrorizaba el lugar, venía acompañado con un rinoceronte y un toro, igual portaban grandes armas de fuego.
-¿Quiénes son ellos?- dijo Naomi asustada. Estábamos sorprendidos de lo que pasaba, yo estaba paralizado por lo que está pasando.
-Tenemos que salir de aquí- dijo Carlos temblando de miedo. Veíamos alrededor una salida.
-Busquen en todos los lugares, debe estar por aquí- dijo el zorro.
-¡Quietos! No se muevan- dijo el toro apuntando a la gente, tomándolos de rehenes.
-¿Y qué hacemos con ellos?- dijo el rinoceronte asustándonos.
-Busquen al elegido, debe tener el Radar de Portales - dijo el zorro.
-¿Qué? ¿Cómo saben del brazalete?- me dije sorprendido por mi mente. ¿Cómo saben de eso? ¿Por qué me buscan? ¿Y de dónde son ellos? Me hacía tantas preguntas pero tenía que reaccionar en este peligro.
El ruido del brazalete había parado por un momento, Carlos nos dijo que nos moviéramos en la otra mesa porque vimos que el zorro se acercaba, nos movimos rápido pasando desapercibido.
-Uff! Estuvo cerca- dijo Naomi.
Después de eso estuve buscando mi teléfono para llamar a la policía, pero antes de eso, en mi bolsillo no estaba el sobre, me asome un poco para ver donde estaba y vi que estaba en la otra mesa.
-Chicos, vuelvo enseguida - les dije y salí a buscar mi sobre.
-Espera, ¿qué haces? – dijo Naomi preocupada.
-No vallas - dijo Carlos alterado.
Fui precavido donde mi sobre, me escondía para que no me pillaran, avanzaba de a poco.
-Parece que no está aquí, ¿nos vamos?- dijo el rinoceronte aburriéndose.
-Aun no, sé que está aquí- dijo el zorro revisando los servicios.
Había llegado donde estaba el sobre, lo tomé y de pronto el brazalete empezó a sonar. El toro lo escucho y me encontró.
-¡Aquí estas!
- ¡ay no!
Me fui corriendo muy asustado, el toro empezó a disparar pero me escondí enseguida.
¡Eso, uff, estuvo, uff, cerca!- dije alterado, asustado y cansado.
El toro me seguía y yo escapaba, me escondí cuando las personas escapaban. Tuve oportunidad.
-Rrgg, Rhino, avísale a…- lo interrumpe el zorro.
-¡no se queden ahí parados! ¡A por él!- estuvo dando la orden.
-¡Rhino, vamos!- dijo el zorro al rinoceronte.
-Ya voy, esta bebida es genial, debes probarlo- dijo Rhino tomando una bebida.
- Ggrr, lo dejamos luego, ahora vamos, ya lo encontramos- con una mirada molesta y salieron a la búsqueda.
Yo salí corriendo y me encontré con Naomi y Carlos, que ya habían escapado.
-Alex, ¿estás bien?- dijo Naomi preocupada.
¿No estás herido?- dijo Carlos también preocupado.
-Descuida, estoy bien, vayámonos.
Salimos corriendo del accidente, estábamos yendo afuera y nos encontramos con ellos otra vez, no sé cómo llegaron acá tan rápido.
-Te encontramos, chico - dijo el zorro intimidándome.
No podía moverme, estaba atrapado, mis amigos estaban asustados y no sabían qué hacer.
El toro y el rinoceronte se preparaban para atacar.
-¿Qué hacemos?- dijo Carlos.
Yo solo reaccioné y fui corriendo a la entrada del centro comercial, los tomé a ellos para que me siguieran. El toro y Rhino empezaron a disparar, los vidrios reventaban pero logramos escapar, pero, lo malo fue que…
-Ah! ¡Mi pierna!
Naomi recibió un disparo en la pierna, tuvimos que tomarla de los brazos y corrimos, en los televisores oímos unas noticias impactantes, ocurrían los mismos accidentes, como lo tuve hace poco. Hubo una en Estados Unidos, en un desfile de modas que mostraban a mujeres jóvenes, luego en Italia invadieron el sector de una escuela militar, en Alemania destrozaron un orfanato, los niños habían escapado, pero la maestra decía que faltaba uno, y por último, en España destrozaron las puertas de una iglesia, había un grupo de estudiantes adentro, quedo atrapada una, pero lo bueno es que logro salir, después de eso no supe más porque íbamos corriendo.
Nos escondimos en un local ya que nos perseguía y ya no aguantaba que mi brazalete sonara mucho, no entendía por qué, por un momento pensé que debía ser el sobre, ya que todo eso empezó desde que lo recibí.
-Alex, por favor, apaga eso- dijo Carlos desesperado.
-Ya espera, déjame ver esto, no sale quien lo envió, pero lo voy a abrir.
Abrí el sobre rápido, lo que vi no lo podía creer, era una moneda como lo había mostrado antes Ulises, era uno color plateado con bordes dorados, por eso el brazalete sonaba mucho, en el auto, en el evento, pero me preguntaba quien lo envió.
-¿Y qué vas a hacer ahora?- dijo Carlos.
-Vamos Alex, no es tiempo para juegos, apágalo de una vez- dijo Naomi desesperada y adolorida.
Oí que ellos se acercaban, no tenía opción, introduje la moneda en el brazalete y de pronto se puso en actualización. El zorro con su pandilla nos habían encontrado, salimos corriendo otra vez, no sé hasta cuando seguiríamos, así que le dije a Carlos que cuidara de Naomi mientras los distrajera.
- chicos, ustedes váyanse, yo los distraeré un momento, es a mí quien buscan.
-Alex, no digas estupideces y vámonos.
-Vete ahora, no hay mucho tiempo, váyanse.
Carlos y Naomi no querían, pero no tenían opción, se fueron y me quede contra ellos.
-Ya estoy aquí, es a mi quien buscan ¿no? ¡Ya paren!
-Jajaja! Con que al fin nos enfrentas, ¿qué quieres hacer con él Rhino?- dijo el toro a Rhino.
-Jeje, lo mismo que tu Bill– dijo Rhino.
-A ver, Rhino y Bill, y el zorro ¿será su líder?- me decía mientras los observaba.
- Van a hacer algo o quieren que haga todo el trabajo – dijo el zorro bien molesto.
De pronto el brazalete empezó a dar una luz brillante, lo apunté a ellos como si los atacara, pero esa luz que lanzó hizo que abriera un… aunque no lo creería, abrió un portal.
-¡Deténganlo, no dejen que entre!- dijo el zorro sorprendido lo que pasaba.
No tuve alternativa, entré adentro del portal y vi como entrara al vacío. Muchas luces aparecían frente a mí. Sentí una pureza en el aire, estaba agotado y después de eso quede inconsciente.
Al despertar me sentí en un lugar diferente, observaba el lugar, estaba verde y colorido por la naturaleza.
-¿Dónde estoy?
Me levanté y miré alrededor, caminé para lograr ver algo, y vi ahí una aldea, pero había visto algo diferente, no sé, pero me sentía raro.
-Hmm…. Fue un sueño raro, y esas personas que vi ¿Quiénes serán?- no dejaba de pensar en esos chicos que había visto, fue como si fuera tal real como lo habría imaginado, y ese lugar que estaba se veía muy hermoso.
Mientras dejaba todo ordenado ahí mi cuarto, mis juegos, mi ropa, etc., escucho un ruido que venía de mi cama. Me agache a ver lo que era y vi que estaba el brazalete ahí, lo tomé y presionaba unos botones para ver si paraba ese ruido.
-ya apágate, empieza a molestar eso – me decía mientras no soportaba el ruido que daba, pero de repente el brazalete empezó a vibrar, me estaba poniendo nervioso lo que pasaba, vibraba más fuerte y por si sola se puso en mi brazo y libera un gran destello. Abría lentamente mis ojos luego de esa luz intensa que dio, lo que veía ahora era algo que quedaba sin palabras, veía paisajes, mares, un gran desierto, y muchas cosas más que eran increíbles y maravillosos. Luego de eso empezó a oscurecerse todo, ya no veía nada de lo que pasaba, ni siquiera podía verme.
- eh? Creo que ya he pasado con eso antes – al pensarlo el brazalete daba una luz que me iluminaba, era más como linterna – genial, tiene modo linterna.
Caminaba por toda la oscuridad, empezaba a asustarme en todo esto, no sabía que hacer o como salir de aquí. Quise correr lo más rápido para poder salir, y en eso escucho un respiro fuerte, como algo bien grande. Me daba mucho miedo en darme la vuelta para saber que era, pero no tenía más opción, volteé y vi una gran bestia cerca mío, tan grande que ya mi corazón empezó a latir muy rápido y quedando inmóvil, y la bestia me ataca con sus garras.
-Aaahhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!- di un grito bien fuerte que me cubrí con mis brazos rápidamente, esto había sido mucho peor que los otros sueños que había tenido. Al abrir mis ojos estaba en mi cuarto, como si nada hubiera pasado.
-¿Pero qué pasó?-
No sé si lo que vi era bien terrorífico, había quedado muy asustado y mi corazón latía bien rápido, era horrible. Después de todo eso escuche a mi mamá.
-Hijo, ¿Qué pasó? ¿Está todo bien?- Sonaba preocupada luego del grito que di.
-Ahh, no, no pasa nada mamá, solo me asustó una araña- dije eso sin pensarlo, no podía decirle de todo lo que he visto, puede que no me crea y me envíe al psiquiatra, pero no creo que haga eso, y solo se me ocurrió decirle eso, y sí que le tengo miedo.
-Jajajajajaja, bueno hijo, date prisa que se te hace tarde.
-¡Ya voy!
Dejando todo limpio mi cuarto, vestido y listo para salir. Baje de las escaleras con mi bolso llevando mis cosas, como mi celular, billetera y mi cargador portátil, voy a la mesa a desayunar y mi mamá me ve preocupada.
-¿pasa algo? Te ves asustado.
-No mamá, no pasa nada, estoy bien. Y ya me encargue de la araña, no fue nada fácil. – fue lo que se me ocurrió.
-Mmm… Bueno, desayunemos bien y te dejamos en el evento, mientras vamos al supermercado.
-Sí, ahí me apuro.
Mi mamá se veía algo preocupada, pero no quería contarle lo que había visto, si lo supiera no sé qué haría. Ya terminando mi desayuno fui preparándome para ir, revise todo y ya no me quedaba nada, mire el reloj y… ya me queda poco tiempo.
Fui rápido al auto, mis padres ya estaban dentro y mi hermano enseguida entro al auto, casi se le quedaba su celular.
-ya estoy, vámonos – decía mi hermano y empezó a jugar en su celular.
Salimos de la casa ya en el camino, en donde vivo el barrio es algo alegre, lo malo que hay partes sucias ya que se cuida poco ahí, y a veces puede haber gente mala. Nosotros vivíamos bien, al menos.
-Qué bonito brazalete, ¿Dónde lo conseguiste?- dijo mi mamá viéndolo.
-Ah, eso, me llegó junto con el paquete, tiene un buen diseño- le contesté tranquilo.
- Me gusta - dice sonriendo.
-Oye hijo, llegó esta carta para ti- dice mi papá pasándome un sobre.
- ¿para mí? – recibo el sobre y en eso el brazalete da una pequeña luz verde.
-oh, brilla. Jeje, Me encanta - dice mi mamá contenta.
-sí, jeje.
- Alex ¿a qué hora llegaras? – decía mi hermano.
- no sé, como a las 7 pm, o más temprano, no estaré mucho ahí.
Mirando por la ventana vi que ya estábamos llegando, era un local bien grande, seguramente arriendan ahí para hacer estos eventos. Había mucha gente ahí, con música, cosplayers, y muchas cosas más.
Llegando me baje del auto y tome mis cosas.
- ya, ahí nos vemos, los llamo si salgo antes.
-Ya hijo, cuídate. Y que lo pases bien, diviértete. – decía mi madre.
-si mamá – miro a mi hermano antes de irme – Danko, ahí más tarde vemos el nuevo episodio de Avengers.
- ¿sale hoy? – quedando sorprendido.
-sí, bien, ya me voy, nos vemos.
Ya entrando con ánimo y mis padres fueron al supermercado. Al entrar vi que llego cualquier gente, me sentía algo nervioso pero pasaba normalmente, y mi brazalete no dejaba de iluminar, y empezaba a dar un ruido.
- ya apágate – tratando de hacer algo para detenerlo, pero no paraba, presionaba cualquier botón, al parecer quedo descompuesto. Al rato escucho a alguien hablándome y se acerca.
-Hola Alex, si viniste – era Naomi, una amiga que nos conocimos en el colegio, y le gusta también venir a estos eventos.
-Ah, Hola Naomi, creí que no podrías venir.
-Bueno, tenía que terminar rápido mis cosas y así poder ir, no fue nada fácil, créeme. – lo notaba así exhausta, pero relajándose.
Pero que traje tan bueno, ¿Dónde lo conseguiste?- dice encantada.
-Lo mande a hacer, ¿te gusta?
-Me encanta, se te ve muy bien, se ve que llama mucha la atención.
- ¿En serio? Jeje, gracias. ¿Y Cómo la estás pasando?
-Bien, divirtiéndome y esperando la banda, ya quiero oír su música. – quedando imaginando en cantar ellos. Una banda de JRock que fueron invitados al evento, para darle un gran toque.
- Que bonito brazalete. ¿Dónde lo conseguiste? ¿Por qué hace ruido?- preguntaba curiosa, la verdad ya me ponía nervioso eso, no sé lo que puede pasar si hace algo esto.
-Eehh… vino con el encargo, y no sé por qué suena, debe estar defectuoso - dije para que lo creyera y ya estaba pensando en deshacérmelo.
-Hola Naomi, y hola… ¿Alex? – ahí venía un buen amigo, Carlos. Es un amigo del vecindario, a veces vamos a unos lugares para entretenernos, y en ocasiones, algunos problemas.
-Hola Carlos, viniste igual – dijo Naomi alegre.
-Hola, sí, soy yo – diciéndole jugando con él ya que me había desconocido por el traje que tenía.
-Guau Alex, ¡te ves genial!- dice impresionado.
-Gracias, jeje ¿Cómo te ha ido últimamente?
-Bien, gracias, he tenido mejores días. – se queda mirando otro lado apenado, pero también alegre.
Estábamos pasándola bien, bailando y conversando, todo normal. Estaba seguro que todo saldría muy bien, sin que nada me preocupara, hasta que de repente, así de la nada…
PUUUMMM!!!
Hubo una gran explosión en la entrada, la gente estuvo corriendo del pánico, otros resultaron heridos y nosotros tuvimos que escondernos bajo las mesas. Tomamos una mesa volteándola usándolo como escudo, pensamos que pudo haber sido como un ataque terrorista, todo estaba desastroso, las personas buscaban una salida para huir, algunos quedaron lastimados. Después de ese humo de la explosión, aparecieron 3 sombras, no lo distinguían bien, después el humo se desvanecía, y ahí… ¡no lo puedo creer! Era un zorro, no como esas personas vestido de animales, era uno real, con un arma, ropa siniestra y aterrorizaba el lugar, venía acompañado con un rinoceronte y un toro, igual portaban grandes armas de fuego.
-¿Quiénes son ellos?- dijo Naomi asustada. Estábamos sorprendidos de lo que pasaba, yo estaba paralizado por lo que está pasando.
-Tenemos que salir de aquí- dijo Carlos temblando de miedo. Veíamos alrededor una salida.
-Busquen en todos los lugares, debe estar por aquí- dijo el zorro.
-¡Quietos! No se muevan- dijo el toro apuntando a la gente, tomándolos de rehenes.
-¿Y qué hacemos con ellos?- dijo el rinoceronte asustándonos.
-Busquen al elegido, debe tener el Radar de Portales - dijo el zorro.
-¿Qué? ¿Cómo saben del brazalete?- me dije sorprendido por mi mente. ¿Cómo saben de eso? ¿Por qué me buscan? ¿Y de dónde son ellos? Me hacía tantas preguntas pero tenía que reaccionar en este peligro.
El ruido del brazalete había parado por un momento, Carlos nos dijo que nos moviéramos en la otra mesa porque vimos que el zorro se acercaba, nos movimos rápido pasando desapercibido.
-Uff! Estuvo cerca- dijo Naomi.
Después de eso estuve buscando mi teléfono para llamar a la policía, pero antes de eso, en mi bolsillo no estaba el sobre, me asome un poco para ver donde estaba y vi que estaba en la otra mesa.
-Chicos, vuelvo enseguida - les dije y salí a buscar mi sobre.
-Espera, ¿qué haces? – dijo Naomi preocupada.
-No vallas - dijo Carlos alterado.
Fui precavido donde mi sobre, me escondía para que no me pillaran, avanzaba de a poco.
-Parece que no está aquí, ¿nos vamos?- dijo el rinoceronte aburriéndose.
-Aun no, sé que está aquí- dijo el zorro revisando los servicios.
Había llegado donde estaba el sobre, lo tomé y de pronto el brazalete empezó a sonar. El toro lo escucho y me encontró.
-¡Aquí estas!
- ¡ay no!
Me fui corriendo muy asustado, el toro empezó a disparar pero me escondí enseguida.
¡Eso, uff, estuvo, uff, cerca!- dije alterado, asustado y cansado.
El toro me seguía y yo escapaba, me escondí cuando las personas escapaban. Tuve oportunidad.
-Rrgg, Rhino, avísale a…- lo interrumpe el zorro.
-¡no se queden ahí parados! ¡A por él!- estuvo dando la orden.
-¡Rhino, vamos!- dijo el zorro al rinoceronte.
-Ya voy, esta bebida es genial, debes probarlo- dijo Rhino tomando una bebida.
- Ggrr, lo dejamos luego, ahora vamos, ya lo encontramos- con una mirada molesta y salieron a la búsqueda.
Yo salí corriendo y me encontré con Naomi y Carlos, que ya habían escapado.
-Alex, ¿estás bien?- dijo Naomi preocupada.
¿No estás herido?- dijo Carlos también preocupado.
-Descuida, estoy bien, vayámonos.
Salimos corriendo del accidente, estábamos yendo afuera y nos encontramos con ellos otra vez, no sé cómo llegaron acá tan rápido.
-Te encontramos, chico - dijo el zorro intimidándome.
No podía moverme, estaba atrapado, mis amigos estaban asustados y no sabían qué hacer.
El toro y el rinoceronte se preparaban para atacar.
-¿Qué hacemos?- dijo Carlos.
Yo solo reaccioné y fui corriendo a la entrada del centro comercial, los tomé a ellos para que me siguieran. El toro y Rhino empezaron a disparar, los vidrios reventaban pero logramos escapar, pero, lo malo fue que…
-Ah! ¡Mi pierna!
Naomi recibió un disparo en la pierna, tuvimos que tomarla de los brazos y corrimos, en los televisores oímos unas noticias impactantes, ocurrían los mismos accidentes, como lo tuve hace poco. Hubo una en Estados Unidos, en un desfile de modas que mostraban a mujeres jóvenes, luego en Italia invadieron el sector de una escuela militar, en Alemania destrozaron un orfanato, los niños habían escapado, pero la maestra decía que faltaba uno, y por último, en España destrozaron las puertas de una iglesia, había un grupo de estudiantes adentro, quedo atrapada una, pero lo bueno es que logro salir, después de eso no supe más porque íbamos corriendo.
Nos escondimos en un local ya que nos perseguía y ya no aguantaba que mi brazalete sonara mucho, no entendía por qué, por un momento pensé que debía ser el sobre, ya que todo eso empezó desde que lo recibí.
-Alex, por favor, apaga eso- dijo Carlos desesperado.
-Ya espera, déjame ver esto, no sale quien lo envió, pero lo voy a abrir.
Abrí el sobre rápido, lo que vi no lo podía creer, era una moneda como lo había mostrado antes Ulises, era uno color plateado con bordes dorados, por eso el brazalete sonaba mucho, en el auto, en el evento, pero me preguntaba quien lo envió.
-¿Y qué vas a hacer ahora?- dijo Carlos.
-Vamos Alex, no es tiempo para juegos, apágalo de una vez- dijo Naomi desesperada y adolorida.
Oí que ellos se acercaban, no tenía opción, introduje la moneda en el brazalete y de pronto se puso en actualización. El zorro con su pandilla nos habían encontrado, salimos corriendo otra vez, no sé hasta cuando seguiríamos, así que le dije a Carlos que cuidara de Naomi mientras los distrajera.
- chicos, ustedes váyanse, yo los distraeré un momento, es a mí quien buscan.
-Alex, no digas estupideces y vámonos.
-Vete ahora, no hay mucho tiempo, váyanse.
Carlos y Naomi no querían, pero no tenían opción, se fueron y me quede contra ellos.
-Ya estoy aquí, es a mi quien buscan ¿no? ¡Ya paren!
-Jajaja! Con que al fin nos enfrentas, ¿qué quieres hacer con él Rhino?- dijo el toro a Rhino.
-Jeje, lo mismo que tu Bill– dijo Rhino.
-A ver, Rhino y Bill, y el zorro ¿será su líder?- me decía mientras los observaba.
- Van a hacer algo o quieren que haga todo el trabajo – dijo el zorro bien molesto.
De pronto el brazalete empezó a dar una luz brillante, lo apunté a ellos como si los atacara, pero esa luz que lanzó hizo que abriera un… aunque no lo creería, abrió un portal.
-¡Deténganlo, no dejen que entre!- dijo el zorro sorprendido lo que pasaba.
No tuve alternativa, entré adentro del portal y vi como entrara al vacío. Muchas luces aparecían frente a mí. Sentí una pureza en el aire, estaba agotado y después de eso quede inconsciente.
Al despertar me sentí en un lugar diferente, observaba el lugar, estaba verde y colorido por la naturaleza.
-¿Dónde estoy?
Me levanté y miré alrededor, caminé para lograr ver algo, y vi ahí una aldea, pero había visto algo diferente, no sé, pero me sentía raro.
Category Story / All
Species Unspecified / Any
Gender Any
Size 50 x 50px
File Size 3 B
Comments