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Excelente enclave para visitar especialmente si estás haciendo la Vía Verde del Aceite . Ojo a la cuesta que hay que salvar desde la Via Verde hasta llegar a las calles céntricas.

La gente entrañable y familiar, muy agradable. la población recogida, tranquila, con hermosos monumentos y buenos sitios donde comer muy bien productos locales, con acceso a varios comercios de todo tipo de suministros diarios, todo a precio corriente, y farmacia muy accesible y completa. Zonas de aparcamiento suficientes en las proximidades del caserío, cómodo para dejar el vehículo. El entorno del río Bailón y las sierras de la Subbética extraordinarias, con un paisaje magnífico y buenas zonas donde hacer senderismo, igual que la vía verde, antigua vía ferroviaria que te permite caminar o hacer ciclismo por una ruta cómoda y muy agradable. La Cueva de los Murciélagos espectacular. Las localidades del entorno bien comunicadas y de acceso sencillo, con espacios museísticos y monumentales extraordinarios.

Qué pueblo tan precioso! Tranquilo, gente muy amable, muy bonito, muy cuidado y limpio, rodeado de olivares hasta donde alcanza la vista. En lo alto de la sierra, con calles y casas encaladas de blanco y macetas por las calles. Bares para tomar algo, todo bueno, sencillo, de la tierra y ese aceite! Buenísimo! Miradores y vistas a los olivos, piscina municipal para pasar el día de calor por 2,50 euros a la sombra de los árboles y con cafetería para comer allí barato y bueno. Senderos para recorrer. Más pueblos en los alrededores que ver, muy cerca de Baena, por si te apetece un lugar con más gente. Volvería.

Un pueblo encantador, pienso volver en no muy tardar, bonito con lluvia, con sol, y una maravilla el entorno del pueblo.

Es un pueblo pequeño, pero está precioso, todo encalado, el castillo y los museos pequeños pero muy chulos. Por el pueblo pasa la vía verde del aceite, y también sale del pueblo la ruta para la garganta del Río Bailón, que es muy bonita, sobre todo en primavera y está bien señalizada. Cerca del pueblo, hay otros también muy bonitos, como Luque, Cabra y Priego de Córdoba.

Pueblo con un encanto especial. Al ir en época navideña, el pueblo estaba elegantemente iluminado. Muy bonito; la gente muy amable.