Elige un buen nombre de dominio

Bienvenidos al vídeo de hoy. ¿No os ha pasado nunca que habéis intentado poner nombre a un dominio y después de dar mil vueltas habéis acabado con uno que no era bueno, que habéis tenido que cambiar al final lo que ha representado mil millones de dolores de cabeza? Bueno, pues vamos a intentar poner fin a todo eso. En primer lugar, a la hora de valorar qué nombre vamos a poner a nuestro dominio debemos comprender la diferencia entre nombre de dominio y nombre DNS. El nombre corto de dominio, también conocido como nombre NetBIOS, representa el nombre del dominio en la mayoría de operaciones internas, como, por ejemplo, en comandos LDAP. Podemos obtener ambos nombres utilizando el comando set. Podemos ver, también, fácilmente el nombre NetBIOS a la hora de iniciar sesión en muchos sistemas con dominio/usuario. Por el contrario, el nombre DNS se utiliza para la resolución de nombres de equipos y servicios dentro del dominio. Por ejemplo, equipo.dominio.com. En este caso linkedin.int. De hecho, el nombre DNS y el nombre de dominio podrían ser distintos y tener nombres de dominio desconectados, pero esa no es una solución ideal y puede llegar a provocar más de un dolor de cabeza. Vamos a ver el nombre de dominio DNS de este dominio. Existe la práctica de utilizar nombres DNS de dominio como .local o .int. Aunque todavía es una práctica común en muchas empresas, dejó de ser una recomendación para entornos de producción hace tiempo. Esto se debe a que estos nombres no son estándar dentro de internet y si algún día se añadieran esos dominios al listado de dominios públicos, existe la posibilidad de que dejáramos de tener control del dominio a nivel público, lo que podría generar errores y problemas a la hora de resolver nombres internamente. Hay incluso administradores que usan nombres totalmente diferentes interna y externamente, como dominio.com y empresa.local. Esto resulta poco transparente e inconsistente para los usuarios. Otras personas deciden utilizar un nombre DNS de dominio único en su ámbito externo e interno: dominio.com o en este caso, dominiolinkedin.com. Aunque puede parecer simple de gestionar, no lo es para nada, ya que seguir esta práctica resultaría en posibles conflictos con DNS y añadiría dificultad a la hora de gestionar el servicio con errores de red, pérdida de rendimiento y otros problemas relacionados con la seguridad y la estabilidad. Finalmente, podremos crear un nombre DNS de dominio interno usando un subdominio del dominio público. Es decir, de linkedin.com crearíamos corp.linkedin.com, por ejemplo. Esta aproximación es la más recomendada ya que mantenemos el control de ese dominio tanto en internet con linkedin.com, como en nuestro ámbito interno con corp.linkedin.com y la estructura de nombres es coherente y evita cualquier confusión.