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La lluvia golpeaba la ventana suavemente en un ritmo continuo. Era tranquilizante, comparado con el silencio denso del apartamento.
Normalmente, a esta hora, el grupo estaría cenando, jugando videojuegos o simplemente viendo una película en el comedor.
Pero después de un día agotador de grabaciones y ensayos, los cinco integrantes se habían encerrado en sus respectivas habitaciones nada más llegar a casa. No estaban de humor para hablar, sobre todo Yeonjun, que había estado tenso las últimas horas por los errores que habían cometido los tres maknaes en el baile para el nuevo comeback.
Les había gritado, sí, pero Beomgyu no estaba enfadado. Sabía lo mucho que el mayor los quería, y que siempre hay días en los que uno simplemente esta más irritado. Probablemente Soobin haría una reunión de equipo al día siguiente.
Así que, así estaba el apartamento, en silencio.
Menos la habitación de Beomgyu.
El único sonido en la habitación que acompañaba al de la lluvia, era el de la respiración frágil y los susurros agitados de su novio contra su pecho.
. . .
(Beomgyu estaba sentado en su cama, la luz tenue de su lamparilla de noche siendo la única luz de la habitación mientras miraba un vídeo cualquiera para matar el tiempo.
Cuando Taehyun abrió la puerta silenciosamente, Beomgyu alzó la mirada con una sonrisa, que pronto desapareció al ver los ojos vidriosos del castaño, alarmándolo.
—¿Taehyun? Cariño, ¿qué te pasa?
Un sollozo.
—Déjame dormir aquí contigo, por favor.
No hubo más palabras entre ellos. Una simple mirada bastó para que Beomgyu comprendiera el dolor del otro, y abrió los brazos con una sonrisa dulce. Taehyun rápidamente se encontró en el abrazo de su novio, escondiendo su contra en su pecho con un quejido ahogado.)
. . .
Después de un buen rato llorando, Taehyun finalmente empezó a decir frases coherentes, agarrándose con desesperación a la camiseta de su novio, quien lo abrazaba mientras movía sus dedos por su espalda lentamente.
—E-estoy…ta-an cansado…
Fue un susurro débil, pero Beomgyu lo escucho perfectamente. Taehyun no solía llorar frente a nadie, y Beomgyu apreciaba que haya decidido confiar en él para verlo en una situación de vulnerabilidad como esta.
—Shhh... Lo sé, cariño, estás trabajando mucho.
—P-pero no es sufi-suficiente— jadeó con una voz rota, dejando al mayor más preocupado que antes. Tenía ganas de enfadarse con todos por haber hecho llorar así a su Taehyun, pero sabía que ahora mismo tenía que centrarse en calmarlo.
—Eso no es verdad, es más que suficiente, Hyunnie.
Beomgyu acentuó cada palabra con un suave beso en su frente, sus dedos subiendo por su espalda y enredándose en el cabello del otro, dando suaves tirones. Sabía que eso le ayudaba a tranquilizarse. Los ojos de Taehyun se cerraron un momento al sentirlo, frotando su cara contra el pecho del otro.
—…No quiero que Yeonjun hyung esté decepcionado conmigo. N-no quiero que tú estés decepcionado conmigo…— confesó entre más lágrimas.
Beomgyu negó con la cabeza, apretando un poco más fuerte el cuerpo de Taehyun en sus brazos.
—Jamás me podrías decepcionar. Taehyun, eres la persona que más amo y admiro, ¿sabías?
Taehyun no dijo nada, así que Beomgyu colocó una mano en su mejilla, para levantar su cabeza y mirarle a los ojos. Sintió un punzón en el pecho al ver la expresión de agotamiento del otro.
Acarició su rostro suavemente con el dorso de su mano, arreglando también el flequillo despeinado en su frente.
—Haces todo con una pasión y una dedicación tan grande que siempre me dejas maravillado, tienes tanto talento…— siguió Beomgyu, hablando con cariño. Sus palabras eran como un bálsamo para el chico cansado de sus brazos.
—…Me pone tan orgulloso saber que estamos en el mismo grupo, que el mismísimo Kang Taehyun es mi novio. ¿Okay?
Taehyun se sonrojó levemente, los dedos de Beomgyu acariciando las facciones de su cara con delicadeza. Ya había dejado de llorar, aunque su respiración aún seguía irregular. Taehyun notaba como el sueño llegaba a su cuerpo, manteniendo los ojos ligeramente entrecerrados.
—…Okay.
Beomgyu sonrió, dándole otro delicado beso en la frente, sus dedos enredándose de nuevo en el cabello de su nuca y dando un último suave tirón.
—Duerme, bonito. Mañana hablamos con los demás.— susurró Beomgyu, moviendo a ambos para estar en una posición más cómoda, colocando la manta para que cubra el cuerpo de los dos. Taehyun simplemente asintió, cerrando sus ojos lentamente.
—Gracias…
—Shhhh. No me tienes que agradecer nada.
Taehyun se acurrucó para estar más cerca de su novio, sus labios presionándose contra su cuello, dejando un beso como agradecimiento silencioso. Beomgyu sonrió al tacto, un sonrojo apareciendo en sus mejillas.
—Te quiero.
—Yo más.