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-¿Qué pasa si tengo relaciones sin protección?
A sus dieciocho años, esa pregunta respondida hasta el hartazgo por sus padres, estaba de más.
Shen Qingqiu tenía mucho trabajo organizando su archivo en Qing Jing, las clases personales con Ming Fan, sus reuniones con sus hermanos marciales, una junta privada con Zhangmen-shixiong, una ceremonia de adjudicación de armas a las que debía llevar a sus discípulos ya listos. Lo último que necesitaba ahora en su agenda era tener que responder una pregunta hipotética de su (nunca) despistado hijo.
-¿Estás tratando de atrasar mi trabajo?
Su hijo negó con la cabeza y con ambas manos para dejar asentadas sus intenciones. Él no estaba bromeando al respecto.
-¿Qué pasa si tengo, por accidente, relaciones allí sin protección?
Shen Qingqiu decidió que ese "allí" necesitaba una aclaración urgente.
-¿Fuiste envenenado?
-No
-¿Estás envenenado ahora?
-No
-¿Estás pensando en envenenarte para estudiar una planta?
-No, solo quiero saber las consecuencias.
Dependiendo quién fuera la compañera del acto, Shen Qingqiu respondió, si tiene razones para creer que ha sido contagiado de una enfermedad tendría que acudir de inmediato a Qian Cao
-No me contagió nada -su hijo evidenció -Solo... fue un accidente.
Shen Qingqiu organizó una reunión sencilla con el MoShang pero para ello preparó muy bien su comedor y sala de estar.
-¿Pasó algo? -fue lo primero que Shang Qinghua preguntó en cuanto vio la comida de Junshang servida con solemnidad sobre la mesa. MoBei Jun encendió todas las alarmas.
Junshang estaba allí, majestuoso, sin un rastro de arrogancia.
-Sientense.
MoBei Jun obedeció sin chistar, el corazón de Qinghua se estremeció al pensar que estos serían sus últimos minutos de vida ¿Había echo algo desleal? Él no recordaba.
-¿De qué se nos acusa? -exigió saber.
Shen Qingqiu negó y permitió que Binghe sostuviera su mano en apoyo moral para lo que tenía que decir.
-Hace unos días mi hijo (de cuya inteligencia emocional e intelectual estoy tan orgulloso) vino a mí, preguntando con urgente necesidad qué pasaba si se tenía relaciones sin protección.
MoBei Jun se levantó y arrojó por los aires toda la comida de la mesa que Qinghua aún no había probado lamentablemente.
-No.
-MoBei, siéntate -la orden de Junshang se elevó por encima del ruido de los platos rotos.
-No.
De ninguna manera iban a culpar a su hijo por querer al hijo del BingQiu y ser correspondido, de ninguna manera iban a castigarlo por seguir sus instintos.
-Quiero disculparme -Shen Qingqiu continuó antes que los ánimos de los esposos se exasperaran más -en nombre de A-Lian por lo que pasó. Él estaba investigando sobre un polen...
-Oh, hermano -Shang Qinghua interrumpió llevándose la mano a la cara.
-... una planta cuya propiedad inductora es extremadamente difícil de combatir y tu hijo estaba con él.
MoBei Jun asintió, si había sido culpa de Shen Lian que cagaran a azotes al joven entonces.
-Como tu hijo está siempre con él sirviendolo (palabras de él), empujó a A-Lian y absorbió el polen en su cuerpo.
Estaba bien, el papapa con un demonio celestial afortunadamente lo ayudó a eliminar el veneno de su sistema.
El problema había sido que Shen Lian realmente, realmente quería seguir teniendo papapa con Shang Xue y no dudó en llevarlo aparte para "convencerlo".
-¿Cuánto tiempo? -Shang Qinghua intentó calcular mentalmente los ciclos de reproducción, tres días más cuatro más tres. Dios, que no fuera cierto.
-Tres semanas...
Oh, carajo.
Tres semanas practicando activamente el papapa sin protección, tomándose pausas para decirse "te quiero", "eres tan bueno, lo haces bien", "dime si te duele", acicalandose como si fueran un matrimonio consumado y legal.
Shang Qinghua pensó que su hijo estaría viviendo un sueño y no querría despertar pero este podría ser un incidente diplomático de gravedad si no se tomaban cartas en el asunto.
-¿Entonces...? ¿Él está? -MoBei Jun quiso saber.
-No afortunadamente, quizá por una incompatibilidad genuina entre ambas razas, A-Lian está... bien.
No estaría bien en cuanto pasara el tiempo y comenzaran los reproches y las acusaciones de un reino a otro pero Shang Qinghua podía entenderlo. Él también había estado en sus zapatos una vez.
-¿Qué zapatos? ¿de qué hablas?
Por favor, como si lo hubieran olvidado ¿su enamoramiento imposible por MoBei Jun, hola? ¿Cuánto tiempo había estado sufriendo en silencio por él? Y Luo Binghe ¿acaso no había sentido lo mismo por su irrazonable shizun, ah?
Shen Lian siempre había mirado con una simpatía innegable hacia el demonio de hielo, buscando formas de acercarse y hablar con él. Y su hijo, A-Xue, siempre tan distante, tan frío, tan pensando en otras cosas (Shang Qinghua quisiera poder aconsejarle mejor) ¿cómo no iba a entenderlo?
-Mi hijo se aprovechó del tuyo, no eres quien debe mostrar caridad en este asunto -Shen Qingqiu se desesperó -Deberías estar pidiendo su cabeza.
-¿Estarías pidiendo la cabeza de mi hijo si hubiera sido él, el perpetrador de esta trama? -inquirió Qinghua.
-¡Tu hijo jamás se atrevería!
Al menos Shen Qingqiu no estaba cegado por el amor a su primogénito para delirar. Por supuesto que Shang Xue jamás se aprovecharía de su primo así.
-¡Deja de decir que son primos, Avión!
Jamás.
MoBei Jun consideró una tregua pero Shang Qinghua no entendió de qué hablaba hasta que Junshang aclaró:
-No tengo nada en contra de los demonios de hielo...
¿Pero...?
-Creo que ambos son muy jóvenes y su desconocimiento del mundo real es muy grande... Ellos no saben lo que quieren...
Por supuesto que lo único que querían ahora era estar juntos en la intimidad, ignorar el mundo alrededor pero crecerían, entenderían las tramas reales de su relación, se interesarían por otros temas, otras personas y ese pasado compartido sería un obstáculo para afianzar las relaciones diplomáticas.
¿Y si uno de los dos demostraba rencor? ¿Si uno de los dos era vengativo? ¿Si uno planeaba la caída del otro? Las pasiones podían cambiar de objetivo. Shen Lian era un candidato serio como proyecto de villano escoria; Shang Xue, un salvaje sin compasión.
Esta podría haber sido una reunión jovial ("Tu hijo y el mío") pero las malas predicciones superaraban las buenas.
Bueno, podrían intentar que ellos solo lo superaran ¿qué cosa mala podría pasar?
-¿Hay algo que quieras decir, hijo mío? -Junshang alentó con voz cálida, solidarizándose con su crío.
-¡Hay algo que tienes que decir! ¡Dilo ahora! -ordenó Shen Qingqiu.
Shen Lian dió un paso adelante y Shang Xue se volvió solo para verlo. Sus ojos claros ¿había ojos más hermosos en un rostro? Si los había no quería saberlo.
-Yo... -¿qué iba a decir? ¿Por qué querían obligarlo a disculparse? Le había gustado coger con él, su primera vez ¡Y qué primera! ¡Cuánta calidad! No podían obligarlo a retractarse ¿quién le creería que estaba arrepentido?
-Yo... - oh y ahora Shang Xue le estaba dando esa mirada ¿cómo se atrevía a mostrar esos ojos seductores por aquí? ¿Estaban ciegos todos? ¿No podían ver lo que le provocaba? -... ¿me disculpo?
-Eso es una pregunta, estamos esperando que te disculpes con A-Xue por lo que hiciste.
¡Él no había hecho algo, solo había sido sincero con lo que sentía! Si los dos se amaban ¿por qué iban a perder el tiempo? ¿y si una criatura se alzaba y mataba a uno de ellos y virgen? ¿con qué cara iba a ascender a los cielos? ¿con qué?
-Me disculpo por ser un fanfarrón, no era mi intención -sí era -pero no puedo evitarlo. Hay muchas historias escritas sobre nosotros dos, solo quería saber qué se sentía vivirlas al menos una vez.
Historias ¿qué historias? Oh, no... Que Binghe no descubriera las cosas que Shang Xue le hacía a Shen Lian en esas novelas amarillas de bajo presupuesto.
-A-Xue es mi personaje favorito en todas ellas. Incluso cuando es el villano y quiere derrocar a papá
¡Basta, esto se estaba saliendo del canon a chorradas!
-¿Qué dijiste?
-Solo son libros, papá...
-¿Qué libros?
Bien, ahora Junshang estaría ocupado direccionando su atención sobre la reproducción de esas novelas y dejaría en paz a los herederos por un tiempo.
Shen Qingqiu hubiera querido cortarle la lengua para que no lo dijera.
Shang Qinghua expresó su deseo que todos los presentes puedan tener felices vidas, ahora se ausentaría un tiempo del palacio.
Shen Lian tuvo un mal presentimiento al oirlo ¿por qué shibo se despedía tan solemnemente cuando antes siempre era un "nos vemos al rato"? ¿Pasaba algo?
Vio a Shang Xue acercarse a Junshang y su corazón dió varios tumbos como si lo hubieran arrojado por las escaleras ¿por qué su padre le daba esa mirada tan fea, la mirada que daba cuando alguien despreciable se arrodillaba frente a él?
¡Ojalá lo comprendiera! ¡Le diera una oportunidad para conocerlo! Así sabría que había tomado la mejor decisión.
-¿Te contó cómo fue?
-Avión...
Antes de irse, Shang Qinghua quería confirmarlo. No le correspondía exigir los detalles (si hubiera tenido otro hijo, lo habría hecho), pero quería, tenía que comprobar si A-Xue había sido gentil o no, si había esperado, si se había preocupado...
Shen Qingqiu levantó su abanico y lo inclinó hacia él.
-Terriblemente gentil, lo educaste tan bien...
Sonrió. No iba a decirle nada más, Qinghua podía morirse de envidia, lo que su hijo le confiara era sagrado para él. Pero ahí lo tenía ¿no? Su hijo lo había hecho bien.
Shang Qinghua se fue, orgulloso del trabajo hecho.