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Nace Franky el Cyborg

Summary:

Después de ser atropellado por el tren marino, Franky consigue llegar a un barco lleno de armas para reparar su cuerpo. A partir de ahí, su vida humana termina y empieza su etapa como cyborg. ¿Cómo habrá cambiado su ciudad natal desde entonces? ¿Qué hará Franky a partir de ahora?

Notes:

One Piece pertenece a Eiichiro Oda

(See the end of the work for more notes.)

Work Text:

Franky está tumbado en el suelo lleno de sangre. Tiene casi todos los huesos de su cuerpo destrozados.

El tren marino lo había atropellado y tirado su cuerpo por los aires.

Cuerpo que ahora era completamente inservible.

¿Qué podía hacer?

No puede dejar su cuerpo humano tirado ahí hasta que se muriera de inanición.

Un momento.

Él es constructor de barcos. Si puede construir un barco desde cero, puede reparar su cuerpo.

Por suerte, ha logrado llegar arrastrándose hasta un barco lleno de armas. Allí hay mucho material para repararse a sí mismo.

Sólo necesita encontrar un martillo y clavos.

Moviéndose con sus últimas fuerzas, consigue arrastrarse hasta encontrar todo el metal necesario para reconstruir su cuerpo.

Tiene los brazos y las piernas rotas. Pero se esfuerza en coger el martillo, las planchas de aluminio y clavarlas en su cuerpo para que sustituyan los huesos y los músculos, que ahora han quedado inservibles. Cuando termina con el brazo izquierdo, cambia el martillo de mano y empieza a arreglarse el brazo derecho. Él es diestro, pero a la hora de trabajar se ha vuelto algo ambidiestro. Cuando termina con el brazo derecho se arregla el pecho y la cara. Le duele un poco tener que meter planchas de metal en la cara, pero se ha roto la mandíbula, la nariz y parte del cráneo… Cuando termina con su rostro y tronco, ya puede incorporarse y arreglar las piernas. Ahora ya se ha acostumbrado al dolor de clavar metal en su propio cuerpo y ya no lo nota.

Por fin ya puede incorporarse. Se dirige a la orilla del mar a ver el aspecto que tiene.

— ¡AAAAAAAHHHHHHHHHH! — pega un brinco al ver su propio reflejo.

Ahora tiene el aspecto de un robot más que el de una persona.

¿Qué puede hacer?

Quizás recubrirse su cuerpo con algo parecido a su propia piel y así no se asustará cada vez que se vea…

Dicho y hecho.

Bien, ahora ya se parece más a su aspecto de antes del accidente, cuando todavía era un humano y no un cyborg. Lo único que ha cambiado es que ahora su nariz es metálica. Su anterior nariz quedó destruida y nunca le gustó.

Al ser ahora un cyborg, necesita conseguir energía de alguna parte.

Ya está, la cola, su bebida favorita.

Coge un mapa y decide rediseñar algunas partes de su cuerpo. Al sustituirlas por metal, según que órganos quedarán inservibles, como el estómago, si llena su cuerpo con un dispositivo de energía.

También diseña otros mecanismos de ataque. Porque Franky no es idiota, sabe que su casa, Water 7 está en la Grand Line, un lugar lleno de piratas, bandidos y criminales. Tendrá que defenderse y también están los planos del arma Plutón que su maestro les dio a él y a Iceburg antes de ser llevado a la Torre Judicial y ser ajusticiado por el Gobierno Mundial. Se pone unos bazucas en los antebrazos, haciendo que sea una parte del cuerpo enorme en comparación a la de un humano, molan mogollón, pero tiene que ponerse más armas. Ah sí, un generador de fuego para poder escupir fuego por la boca y poder separar parte de sus piernas como si fuera un centauro. Que también mola.

Una vez encuentra todas las herramientas para preparar las armas, se pone manos a la obra. Incluso, añade unos tatuajes de unas estrellas en los antebrazos. Lo tiene que hacer el mismo y no en una tienda especializada porque ahora sus brazos son todo metal.

Finalmente, su cuerpo está listo.

La ropa que llevaba usada cuando el tren lo embistió, ha quedado hecha harapos. A él no le importa ir desnudo. Pero, de momento, no quiere llamar la atención. La llevará puesta hasta que consiga algo mejor.

Al llegar a la ciudad, ve que en todo el tiempo que él ha estado fuera ha cambiado mucho. ¿Galley-La Company? ¿Qué es esa compañía?

Decide ir directo a por su objetivo. Va a una tienda de ropa y se compra un tanga, una camisa hawaiana, una cadena dorada para usar como colgante y unas gafas de sol. Su look estrella.

— Disculpe, ¿qué es Galley-La Company? — pregunta a la tendera cuando va a pagar.

— Galley-La Company es una compañía de carpinteros que juntó a los siete diques que antes había en la isla. Ahora sólo hay una gran compañía de constructores de barcos en todo Water 7.

— ¿Y a quién se le ha ocurrido esa genialidad? — pregunta sorprendido.

— Al señor Iceburg, el nuevo alcalde. — responde la tendera sonriente.

"No puede ser".

— ¡ICEBURG! — exclama. Al idiota de Iceburg lo conocía desde hacía muchos años. Los dos llevaban siendo aprendices del constructor de barcos Tom, de la Tom's Workers, desde que eran unos mocosos.

— Sí, ¿qué ocurre? — pregunta la tendera sorprendida.

— Nada, nada. ¿Sabe dónde lo puedo encontrar?

— En la sede de Galley-La Company en el distrito uno.

Dicho y hecho, Franky se dirige para allá.

…..

Franky llama a la puerta de Galley-La Company, por el camino se ha deshecho de los pantalones que llevaba, y ahora sólo usa la tanga y la camisa que se ha comprado.

Le recibe una mujer blanca, joven, guapa y rubia de cabello corto a media melena.

— Soy Kalifa, la secretaría del señor Iceburg. ¿Tiene cita previa?

— No, dígale que soy Cutty Flam y que quiere verle.

Kalifa asiente y se va.

Franky se inclina en la silla a esperar. Habría dicho el nombre de Franky directamente, pero eso sólo es un apodo. Su verdadero nombre es Cutty Flam. El nombre que le pusieron los hijos de puta de sus padres, unos piratas que lo abandonaron en el distrito de chatarra cuando él era un niño y tuvo la suerte de ser adoptado por el maestro Tom. Él sabe que nació en el South Blue, pero no sabe si sus padres también son originarios de allí o sólo estaban de pasada en ese mar cuando él nació.

Ve a Kalifa llegar y se levanta de su asiento.

— Lamento informarle que el señor Iceburg no puede recibirle. — le informa en tono estoico.

Franky no se sorprende. No sabe si es porque no se lo cree, todo el mundo le daba por muerto, o porque todavía sigue enfadado con él. Cuando hicieron el juicio al maestro Tom por haber construido el Oro Jackson, el barco del Rey de los Piratas, el juez estuvo a punto de absolverle por haber construido el tren de mar, que tanto ayudó a Water 7. Pero el mal nacido de Spandam cogió los Battle Franky, sus barcos de guerra, y atacó al juez y a los civiles. El maestro Tom también quedó herido y se echó la culpa del incidente para que nada malo le pasara a él y a Iceburg. Y fue cuando se lo llevaron con el tren marino hacia Ennies Lobby, donde lo ajusticiaron...

Iceburg llevaba diciéndole desde siempre que no construyera barcos con armas y no los dejase tirados por ahí, que alguien podría usarlos para lastimar a alguien. Alguien inocente. Alguien a quién él quería. Y al final, tuvo razón.

Kalifa lo acompaña hasta la puerta.

Como Franky no tiene un lugar donde dormir, se va a vivir a la antigua casa de Tom y oficina de la Tom's Workers.

Cuando es medianoche, oye unos pasos. Franky se prepara y se pone alerta. Ve que es Iceburg. Está más cambiado, más corpulento y tiene el pelo corto, más formal. También usa un traje caro.

— Franky.

— Iceburg.

Se dicen en tono serio y distante. Ambos se sientan en los sillones que alguien, seguramente, la señora Kokoro, dejó ahí.

— Veo que te has hecho muy famoso… — le comenta Franky.

— El señor Tom estaba muy preocupado por el futuro de Water 7. Incluso, después de construir el tren de mar. Así que, yo he decidido seguir sus pasos y seguir luchando por su bienestar. Conseguí juntar los siete diques en uno solo, formando una gran empresa, y hace poco gané las elecciones como alcalde de la ciudad.

— Al final, si sigues así no dejarás ningún puesto de mando para nadie. — bufa Franky.

Iceburg lo ignora.

— Qué apariencia más rara tienes ahora. — le comenta.

— Ahora soy un cyborg. He tenido que reconstruir mi propio cuerpo porque el mío como humano quedó inservible tras el atropello del tren marino.

Iceburg saca unos papeles y se los entrega.

Franky los observa.

— Los planos del arma ancestral Plutón. — exclama.

— ¿Te acuerdas cuando el maestro Tom nos los enseñó? Tras su detención, yo me los quedé. Él quería que nosotros fuéramos sus sucesores y los protegiéramos para que no cayeran en malas manos. Sin embargo, el Gobierno Mundial sabe que yo soy el aprendiz del maestro Tom, el que queda vivo, y no paran de venir a verme para que se los venda. Con sólo correr el pequeño rumor de que yo los tenga es suficiente, no necesitan estar cien por cien seguros de ello. Para el mundo Cutty Flam está muerto. Quédate tú con los planos, Franky, no uses tu verdadero nombre, Cutty Flam. Usa Franky. Todo el mundo te conoce por ese nombre. Finge que no me conoces. Huye de Water 7.

— ¡¿ERES IDIOTA?! ¡¿CÓMO PUEDES PEDIRME QUE HUYA DE MI CIUDAD DE ACOGIDA, TONTOBERG?! ¡PUEDES PEDIRME QUE FINJA QUE NO TE CONOZCA, PERO NO QUE HUYA DE WATER 7!

— Como quieras.

Iceburg se levanta y se va. Pero antes de irse, le confiesa:

— Franky, nunca te perdonaré lo que le pasó al señor Tom, pero… — Iceburg empieza a hipar y a llorar, se lleva una mano a la frente, — ¡ME ALEGRO DE QUE SIGAS VIVO!

…..

Si Tontoberg juntó a todos los carpinteros y constructores de barcos en una sola compañía, Franky hará lo mismo con los maleantes de la ciudad para que la protejan. Sabe perfectamente dónde encontrarlos, en las tabernas y los barrios bajos. Lo sabe muy bien porque él también lo es.

La primera vez que va por ahí ve a dos mujeres súper borrachas con la nariz puntiaguda, el pelo negro, una de ellas con el pelo rizado y la otra, liso. Ambas llevan una botella vacía en la mano.

— Oye, guapo. ¿Quieres pasar un rato alegre con nosotras? — ambas están tambaleándose y hablan con la voz arrastrada, fruto del alcohol.

Franky sonríe. Les quita las botellas y las inmoviliza. Las mujeres protestan, pero él es más fuerte.

— Lo siento, señoritas. Pero no es bueno estar tan bebido a estar horas de la mañana. Será mejor que volváis a casa.

Otra noche, Franky se presenta ante unos maleantes de los suburbios de Water 7.

Su líder le encara con una cañería.

— Soy Zambai, el líder de estas calles. ¿Y tú quién coño eres para entrar en mi territorio sin mi permiso?

Zambai le golpea con la cañería dándole de lleno, pero para sorpresa de todos menos para Franky, la cañería se dobla. Todos los maleantes se sorprenden. Franky derrota a Zambai y a su tropa con suma facilidad.

Y como dice el código de los barriobajeros, hay que unirse al más fuerte o al hombre que te gana, Zambai y su tropa se unen a las órdenes de Franky.

…..

Unos días más tarde, en las afueras de Water 7, se funda una casa bastante hortera construida con madera y hierro mal clavado que parece que puede derrumbarse en cualquier momento. Lo que más destaca son la pinza metálica y la media luna que hay en el tejado y el letrero de la Franky Family.

Encima de un escenario están Franky con las dos mujeres a su lado, las hermanas Mozu y Kiwi, y empiezan a gritar a pleno pulmón.

— ¡ESTÁ ES LA FRANKY HOUSE!

— ¡ESTÁ ES LA FRANKY HOUSE! — gritan Zambai y su tropa a pleno pulmón.

— ¡SOMOS LA FRANKY FAMILY! — vuelven a gritar Franky, Mozu y Kiwi.

— ¡SOMOS LA FRANKY FAMILY! — repiten los otros.

Y así es como nace la Franky Family, un grupo de maleantes de los peores antros unidos por un hombre en un intento de redimirse porque sus armas de construcción fueron usadas en un complot para condenar a muerte a su tan amado maestro.

Notes:

En general, la relación fraternal entre Franky y Iceburg me gusta mucho. Se pelean, son contrarios en aspecto y personalidad, pero se nota que se quieren.

Nos leemos :)