Work Text:
-Huaisang, ¿estás seguro que es buena idea?
- si lo que queremos es conseguir dinero rápido, no hay nada mejor que esto. Nuestro trabajo no será como el de los demás no deberás permitir que viejos pervertidos beban tu leche directo de tus pezones, claro que sin tu permiso.
-pero aun así es denigrante.
-por ello utilizaremos antifaces.
Ambos habían salido de sus casas, por diferentes razones, se conocieron al alquilar un cuarto, y ahora habían conseguido empleo en un restaurante donde solo se contrataban omegas. ¿La razón? Al ser omegas podían producir leche, durante sus celos era más dulce, la vendían por litro o elaboraban postres y comidas, en algunos casos los clientes podían pagar un precio mucho más alto para beber directo de sus pezones, pero tenía que ser con consentimiento del omega. Estaban desesperados por conseguir dinero, pero no tanto como para rebajarse tanto.
En su primer día se les entregó un traje de sirvienta, no era tan revelador, pero sin duda daba una vista provocativa. Se encargarían de atender a los clientes y llevarles sus pedidos, claro deberían actuar de acuerdo a su papel, se adaptaba bien a ellos, había maids tiernas, dulces, amables, sexis rudas y tsunderes. Huaisang fue catalogado como un maid dulce y Cheng como uno tsundere.
En su primera semana habían visto varios tipos de empleados, a pesar de trabajar medio tiempo por sus estudios tenían varios tipos de clientes, jóvenes, adultos con gustos cuestionables, y viejos decrépitos y pervertidos, aunque la mayoría eran pervertidos no se atrevían a sobrepasarse con lo omegas. Hasta que un tipo horrible por cierto quiso obligar a varios a darle un trato especial. Los guardias de seguridad se encargaron de sacarlo, y una semana después regresó con una amenaza, donde si no le permitían estar con al menos tres trabajadoras y trabajadores cerrarían el lugar.
A quienes se "ofrecieron" les ofrecieron el sueldo de una semana, claro eso saldría de aquel tipo que presumía de tener dinero para pedirles a todos allí que se les unieran. Consiguieron un abogado que de alguna forma logró ponerle un alto y ya no regreso. Con el dinero que ganaban cumpliendo algún tipo de fetiche de aquellos sujetos y de algunas mujeres.
Un día Cheng vio entrar a aquel lugar a Wei Wuxian un alfa y su crush de la universidad, quiso atenderlo en cuanto lo vio, pero al recordar dónde trabajaba y cómo vestía en ese momento quiso esconderse ¿Qué pensaría de él?, por lo que regresó a la cocina.
-Jiang Cheng: ¿Qué haces aquí? Ya terminamos de sacar tu leche, sigue atendiendo a los clientes
-pero...-piensa en algo convincente- sentí un poco mojados mis pezones quizá comience a producir más leche por mi celo, falta poco.
Wuxian seguía yendo y en pocas ocasiones era él quien lo atendía, normalmente iba con dos amigos. En esa ocasión iba solo y sentía su mirada en él cada vez que aparecía en su campo de visión. –Cheng- lo llamo mientras serbia un frappé de galleta – quisiera saber ¿tú también das el servicio especial? Puedo oler que se aproxima tu celo y he escuchado que en es cuando la leche de los omegas es más dulce, ¿podría pedir tu servicio?
Cheng se sorprendió al escuchar aquella petición –ese servicio es más caro, ¿seguro que quieres gastar así tu dinero?
-sé que valdrá la pena- Cheng se había prometido no degradarse de ese modo, pero lo dudaba en ese momento, wuxian le gustaba. Creo que podría hacerlo una vez, por él. Acepto dejar que wuxian se sirviera de sus pezones, para ello tuvieron que ir a una habitación donde nadie más podría verlos. Al entrar, Cheng acomodó su diadema con orejas de gato y bajo sus tirantes y camisa, dejando a la vista sus pechos, un poco hinchados por la leche.
-puedes tomar toda la leche que quieras, también puedes tomar mis pechos, apretarlos y succionarlos, solo no muerdas. Wuxian tomó sus pechos con ambas manos- gracias por la comida- apretó sus pechos y la leche salió en un pequeño chorro, comenzó a succionar el pezón derecho y después alterno al ver que el pezón izquierdo seguía escurriendo leche y dejaba una pequeña mancha húmeda en su camisa, no podía dejar sus manos quietas y menos al escuchar los pequeños gemidos y jadeos que Cheng dejaba soltar, por reojo vio como Cheng tenía entrecerrados sus ojos y un hermoso rubor invadía sus mejillas y hombros, al ver esa hermosa vista sus manos divagaron hacia sus piernas acariciándolas y dando leves apretones.
Cheng al sentir las grandes manos de Wuxian en sus piernas sintió un escalofrió recorrer su espalda y no pudo evitar soltar un gemido más audible, no detuvo el recorrido de sus manos e instintivamente abrió sus piernas permitiéndole a Wuxian acomodarse entre ellas.
-Cheng: ¿sabías que yo también produzco leche? - consiguió que Cheng le prestara atención.
- ¿Enserio?, creí que solo los omegas producíamos leche.
-no es así, dime ¿quisieras probarla?
Acepta y ve cómo Wuxían baja, la cremallera de sus pantalones y posteriormente los bajaban junto con su ropa interior, observe cómo su miembro estaba semi erecto y a pesar de no estar completamente duro, era grande y grueso.
-Cheng si lo sigues viendo así no quedare satisfecho con solo estar en tu boca.
Cheng dejó de ver su pene y por alguna razón se hincó, sospecha que su omega quien tomó el control de si al ver a aquel pene de alfa. Estiro su mano y comenzó a masturbarlo, era primerizo, pero con Huaisang había visto libros y videos, se puede decir que tiene un poco de teoría.
Cuando sintió que el miembro se encontraba completamente erecto metió la punta en su boca, tenía un sabor amargo, pero tolerable. Podía escuchar como Wuxian jadeaba cuando movía su lengua alrededor del miembro que llenaba su boca, al poco tiempo ya tenía la mitad del pene en su boca y ambos se movían más rápido. Wuxian lo agarro de su corto cabello con ambas manos impidiéndole moverse mientras el aceleraba el movimiento de sus caderas y metía más de su pene en la boca de Cheng –relaja tu garganta para que pueda entrar más, quiero llegar a tu garganta, ver como mi pene forma un bulto en ella.
Cheng relajó lo más que pudo su garganta y sintió como Wuxian se adentraba aún más, y sin necesidad de verlo o tocarlo sabía que el pene ahora formaba un bulto en su garganta. Siguieron con el ritmo hasta que Wuxian trastabillo en sus embestidas y se corrió en su garganta, dejando que su semen fuera directo a su estómago. Al separarse noto que debajo de Cheng había un pequeño charco de sus fluidos y su camisa estaba empapada por toda la leche que escurría de sus pechos.
- ¿te gusto mi leche a-Cheng?
-me encanto a-Xian- se relamió los labios para enfatizar su respuesta – me gustó tanto que mis tetas se volvieron a llenar de leche y terminé corriéndome cuando la sentí bajar por mi garganta. - al terminar su turno decidieron continuar con su encuentro en un lugar más íntimo.