Chapter Text
La habitación de barracon del escoces yacía iluminada por la luz que entraba por la cortina corrida y la lampara de su escritorio mientras que el resto estaba en un gran silencio siendo el único ruido el movimiento de un bolígrafo contra el papel y los que se filtraban por debajo de la puerta, sonidos cotidianos de soldados como todos los días en la base, su pie derecho no dejaba de tener un pequeño tic ansioso como si de alguna manera fuera a adelantar el tiempo y el trabajo. Su teléfono no estaba a menos de unos cuantos centímetros de su mano con el pequeño punto de luz verde parpadeando indicando que estuvo recibiendo notificaciones desde hacia un tiempo, hubiera querido tomarlo para saber que se trataba pero debía ser mas fuerte e ignorarlos y hacer lo que tenia en manos.
Estuvo haciendo el tonto posponiendo el papeleo de la ultima misión hasta este día que debía entregarlo al final del día.“Y justamente tenia que ser hoy” pensó, apenas el Capitán lo reprendió por el retraso.
“No pudo evitar” (Spoiler claro que si lo pudo), los nuevos juguetitos explosivos que llegaron no hacia un par de semanas lo habían distraído, la base tenia una regla no dicha que el experto en demoliciones tenia pase libre para probar los explosivos y de algunas maneras calmar la bestia piromana que se arrastra en su interior lista para ver el mundo arder, ganar y ganar, los de arriba ganan, Price gana y Soap ganaba. También el haber estado ayudando a Gaz con su papeleo luego de que en la ultima misión se dislocara el hombro, en resumen varias cosas retrasaron el papeleo rompiendo con su tradición de ser puntual.
Dejando el bolígrafo en el escritorio soltando un suspiro largo y satisfactorio al terminar el ultimo de los fastidiosos papeleos que tenía pendiente, levantando sus brazos por encima de su cabeza estirando los músculos entumecidos por las horas de estar sentado en la silla de metal, soltó un gemido de alivio cuando su espalda y cuello tronaron liberando la tensión acumulada. Dando un ultimo vistazo con intención de asegurarse de que estuviera todo en orden y listo para entregar al Capitán, aunque tenia la plena seguridad que no lo leería en el momento de ser entregado por ese día, metiendo los papeles en sus correspondientes carpetas empujo la silla hacia atrás tomando su celular viendo la hora y varias notificaciones con varios mensajes y notificaciones de redes sociales, el primero que leyó entre todos en la pantalla de bloqueo fue uno de Gaz.
“The MotherFucker Gaz”
“-¿Tav, donde estas? ¡Esta mierda esta empezando a ponerse buena!”
Sino no fuera porque debía de llevar toda la montaña de papeleo en ese instante al despacho del capitán habría salido corriendo a la sala de oseo con el resto de soldados como tenia previsto días posteriores. Guardando su teléfono en su bolsillo trasero de sus vaqueros, ese día no debía ir a entrenar a soldados rasos o a si mismo por lo que decidió ir con un estilo mas ligero yendo en vaqueros y una camisa con su apellido en la espalda y su rango en el pecho sobre el corazón. Tomando la montaña de papeles entre sus brazos, apago la lampara antes de salir de su habitación poniéndole seguro antes de emprender rápidamente camino al edificio de oficinas.
En todo el trayecto hacia allí, las habituales cruzadas con soldados saludándolo disminuyeron considerablemente ese día especialmente, habían alguno que otro soldado haciendo sus trabajos del día pero estaba seguro que el resto estarían fuera de la base en algún bar. De camino a su objetivo el buen tiempo le daba ánimos, formando una leve sonrisa entro al edificio saludando a la vieja y buena recepcionista de la entrada que todos les caían bien, paso por varias puertas de oficinas de tenientes, capitanes, coroneles y demás superiores, como también por salas de conferencias. Lo mismo paso con el edificio principal, muchas oficinas tenían las luces apagadas indicado la ausencia de los dueños de las mismas indicadas por los nombres grabadas en placas puestas en las puertas.
Luego de un relativo largo trayecto llego a la oficina de su capitán viéndose las luces encendidas a través del opaco cristal, su teoría de que estuviera allí se reafirmo al escuchar unos bajos susurros enérgicos de dentro de la habitación, años de servicio son suficientes para potencial en una persona todos los sentidos. Sosteniendo la pila de papeles con una mano dándose la liberad de usar su otra mano para dar pequeños toques en la puerta, supo que había pillado al hombre de gran barba con las manos en la masa cuando los susurros de fuera lo que fuera que estaba pasando adentro cesaron y un “adelante” después de unos segundos quizás momentos que uso el otro hombre para acomodarse mejor.
Abriendo la puerta con la mano libre se topo con el característico aroma de puros que le daba su identidad a Price junto a su sombrero, entrando con la mano libre cerro la puerta detrás suyo, no tenia intención de quedarse a charlar como siempre lo hacia, se acerco al hombre en su escritorio viendo su computadora personal abierta, algunos papeles que parecían abandonados hacia tiempo y un cenicero con restos de cenizas. El cuidado y dedicación que el hombre con mas edad del equipo 1.4.1 por sus preciados puros no tenia comparación, él capitán podía sentarse a hablar de las maravillas de los puros; desde de donde vienen, como sostenerlos, como saborearlos y sentirlos, y rara vez los compartía, podía decirse que esa es una de las maneras de poner lidiar con la agotadora vida como militar y mas importante como capitán.
-¿Vendrá con nosotros a la sala de oseo señor?- Pregunto el escoces dejando la pila de carpetas en una esquina del escritorio-.
-Posiblemente vaya en los últimos minutos muchacho- Respondió dejando el puro que tenia entre los labios a que reposara en el cenicero-.
Sus ojos azul gisaseos brillaron con cierta malicia temeraria volteando a ver la pantalla de la computadora encendida reproduciendo sin audio un partido de fútbol en vivo.
Si, todo el revuelo de hoy venia de un partido de fútbol, ese día era la final de la Eurocopa de Inglaterra y España, Escocia había perdido hacia rato en la selección de grupos pero la idea de apoyar a España solo para joderle la vida a Gaz un rato era demasiado tentadora.
-Guárdenme algo de beber- Él británico mayor hizo un ademas despidiendo al escoces-.
-No prometemos nada- Comento con una sonrisa saliendo de la oficina cerrando la puerta detrás suyo-.
Soltando un suspiro largo antes de girar sus pies empezando a caminar rápido teniendo que retenerse físicamente para no correr hacia el edificio principal donde estaba la sala de oseo, mientras mas se acercaba a su objetivo pudo escuchar a los lejos como voces masculinas correaban un “GOL”, mordiendo su labio acelero el andar entrando a el casi abarrotado salón.
-Vaya hasta que por fin te apareces, ya pensamos que el papeleo te había comido-.
Gaz fue el primero en notar su presencia, luego el resto lo hizo, era inevitable, Soap actuaba como el fuego mismo atrayendo a las polillas, su presencia radiaba un calor atrayente para las personas, que este presente en una habitación representaba que dejaba de sentirse tan frió.
Acercándose se percato de que Gaz estaba en el sofá usando el compresor muscular en el hombro debajo de la camisa recomendado por el medico luego de la dislocación del hombro, aparte de eso, Rodolfo y Alejandro también estaban sentados allí, otra cosa que noto fue que no había mas puesto, cada asiento estaba ocupado, por lo visto tendrá que quedarse de pie. Apoyando los antebrazos detrás del respaldo del sofá entre Alejandro y Gaz inclinándose hacia adelante mientras sus ojos observan la pantalla del televisor.
-Díganme que me guardaron algo interesante- Con sus ojos apunto a las botellas y latas de cerveza que tenían frente el sofá en la mesa de té y el resto del lugar, viendo incluso que tanto Alejandro y Rudy tenían cervezas corona-.
-Revisa en la nevera hermano- Alejandro apunto con su cabeza a la nevera en la cocina de la sala de oseo-.
Despegándose del sofá camino hacia el refrigerador saludando a algunos soldados al pasar escuchando de fondo el acalorado partido de fútbol. Abriendo la puerta de la nevera se inclino hacia adelante sintiendo el bien recibido aire frió golpear contra su rostro observando varias botellas y latas de cerveza que no parecían muy interesantes, frunciendo un poco el ceño rebusco entre los recipientes que albergaban alcohol hasta como un milagro de la navidad (Aunque no estaban ni cerca de navidad), encontró una botella de cerveza que le gustaba escondida u olvidada por el ojo de Dios, la tomo sin dudarlo, si tenía dueño tristemente ahora su nuevo dueño era un escocés experto en demoliciones con el nombre de un producto de limpieza.
-Hola preciosa, tu vienes conmigo- Musillo en voz baja girando la botella entre su mano sintiendo el frió calar en lo profundo de su huesos-.
Levantándose cerro la puerta de refrigerador giro rápidamente su cabeza se percato de un presencia vestida de negro subiendo la mirada viendo el enmascarado rostro de calavera tan familiar, en ese momento ver la profundidad oscura su corazón se acelero, claro por el susto por supuesto...
-Carajo teniente- Levando una mano hacia el pecho de manera algo dramática- Tu cabrón espeluznante, te pondré un cascabel encima o la próxima vez me mataras de un susto-.
La expresión de enfadado que puso no tuvo el efecto esperado ya que en pocos segundos se suavizo formando una amplia sonrisa dándole un pequeño golpe en el hombro a su superior, él sargento era suficientemente valiente como para poder dirigirse hacia el Ghost con tanta confianza y casi falta de respecto por su autoridad que cualquiera prefiere un tiro en la pierna a probar suerte como lo logro hacer el sargento escocés.
-¿Con la guardia baja MacTavish? Espero que tus reflejos estén listo para la siguiente misión- Dijo sin una pizca de acidez en sus palabras si tomamos en cuenta como las esquinas se sus ojos se formaban patas de gallo demostrando que estaba sonriendo detrás de la mascara-.
-No lo dude señor- Dijo formando una sonrisa arrogante en sus labios-.
Estirando su mano al destapador de botellas con imán pegado en la nevera abrió la botella dejando saltar la tapa de la misma en su mano antes de tirarla en el tacho de basura viendo al frente en dirección a la pantalla del televisor viendo como pasaban las estadísticas de los jugadores, llevando la boca de la botella a los labios dándole el primer merecido sorbo del amargo liquido bien recibido. Aunque toda su mirada estuviera puesta en el partido innegablemente su atención se dirigió a un lado observando de reojo los movimientos tan silenciosos y calculados del teniente.
La presencia del hombre de mascara era inevitable no sentirse atraído, bueno el resto probablemente ni volteara a verlo para no provocar la ira del hombre pero John MacTavish alias Soap era un desquiciado que no paso el examen psicológico del todo como el resto del miembros de la 1.4.1 (El que diga lo contrario esta mintiendo), todo lo que hace Ghost era tan “perfecto” y limpio como los disparos de francotirador. Saber de alguna manera que ese poderoso y temido hombre se hayan acoplado creando algo mas destructivo y eficiente, como una bomba bien creada, le llenaba de alguna manera de un falso orgullo y posesividad.
El sonido de las voces que se alzaron en la sala común lo sacaron de su ensueño despierto dirigiendo su mirada a la pantalla observando como el portero del equipo España detuvo el gol de Inglaterra. Presionando los labios en el borde de la botella sin hacer un intento real de inclinarla para dar otro sorbo, mientras sus ojos analizaba la repetición de la jugada, todo su cuerpo recobro consciencia de si mismo sintiendo la presión en su brazo, bajando la botella sin darle el sorbo su mirada fue hacia su brazo pudiendo darse cuenta que la otra persona que tenia a su lado no era nada mas que Ghost.
Su brazo hormigueaba en el punto de contacto pero no hizo ningún intento por alejarse, ni tampoco dijo porque estuviera allí en primer lugar, el hombre aborrecía ese tipo de encuentros en la base, llevarlo al bar con el resto se consideraba una moneda al aire probando suerte si tenían suerte de tener su presencia. Ni tampoco hizo comentario alguno ante la repentina nueva necesidad por querer tener un punto de contacto mas frecuente, tampoco dirá que no disfruta de eso.
Volviendo a presionar los labios contra el boca de la botella sintiendo sus propios labios curvarse en una sonrisa antes de dar otro sorbo finalmente.
En el otro lado de la sala común Rudy observo todo sintiéndose feliz viendo a Ghost y Soap, la química que ellos dos tenia se sentía a kilómetros, ver la tranquilidad que adquiría el teniente al lado del escocés y la genuina feliz que el hombre de mohicano se mostraba decía mucho. Pero allí estaban, incapaces de cruzar aunque Ghost parecía que le afecto el ultimo intento de celo exitoso no hacia nada para cambiar las cosas, esos dos enserio necesitaban ayuda para llegar algún lugar. Viendo a Alejandro unos segundos le dio un codazo sutil para que se prepare antes de voltear a ver a Soap.
-Hey Soap, hermano ¿Te vas a quedar parado allí el resto del partido?- Pregunto Rudy aprovechando el corte comercial del partido- Ven aquí-.
La atención del escocés viajo ahora al teniente mexicano ladeando su cabeza mostrando una sonrisa divertida, ignoro deliberadamente el como Ghost se tenso alado del joven sargento. Se sentía mal ante el hecho de aprovecharse de como Soap no tenia una capacidad de decir “No” a los que le importa, pero, ese pensamiento lo empujara lejos por el momento.
-Dudo mucho que haya un espacio allí para mi Rudy, a no ser que quieras que me siente en tus piernas-.
-¿Por qué no?, vamos ven aquí-.
El plan estuvo yendo muy bien, los “cortejos” seguían sucediendo como se planeo y el nivel de ser atrevidos se hizo mas fácil al descubrir lo táctil que podía ser Soap. También se volvieron mas egoístas, dejando que Ghost pensaba que lo tenia antes de quitárselo, enserio estaban haciendo una apuesta peligrosa con el plan que no hacia mas que funcionar viendo como la paciencia disminuía y celos aumentaba en Ghost.
Viendo como el joven y enérgico sargento se acerca luego de cruzar algunas palabras con Ghost que no escuchaba desde allí, abrió las piernas dándole una de sus piernas para que se sentara, al Rudy estar en uno de los extremos del sofá. Los ojos de Soap vieron a Rudy antes de ver a Alejandro buscando algo de incomodidad que al parecer no existía dándole a Soap el permiso silencioso sentándose en el regazo del sub-teniente estaba de espaldas al extremo del sofá y sus dos piernas entre las piernas abiertas de Rodolfo.
Dejando que Soap hablara con Gaz cuando el moreno le pregunto si el capitán venia o no con ellos, Alejandro puso su mano en el rodilla de Soap siendo bien reciba al ser tan físicamente afectivo. Tomando un poco de su cerveza corona se dio el lujo de mirar a Ghost en busca de su reacción, y consiguió exactamente la reacción que se buscaba, hombros tensos, mirada afilada y aura inquieta.
A esas alturas ya debía de estar acostumbrado a esto, a suprimir el instinto casi primitivo que le decía que dejar a la muerte en paz y devolver lo que es suyo por derecho, pero no, algo animal le decía aun que se diera media vuelta y se fuera al carajo, al carajo todo y esos euros. Su madre no crió a ningún cobarde se recuerda como una excusa, ya estaba pensando a estas alturas que los instintos suicidas de Alejandro se le están contagiando.
Volteando la mirada a la dirección de la ultima ubicación de Ghost esperando que no hubiera rastros de él como se esperaba, pero casi se atraganta con la cerveza al encontrarlo sentado a uno de los solitarios sillones a muy pocos metros, pobre el desgraciado que fue intimidado por la alta y negra figura para que le dieran el puesto.
Nadie dijo nada realmente ante la presencia del teniente Ghost, lo importante para todos era como seria el desenlace de la Eurocopa completamente al filo de los asientos, podían simplemente pensar que como buen patriota estaría allí para apoyar a Inglaterra como gran parte de los soldados presentes.
Eso es una gran mentira.
No con la manera que parecía mirar cada pequeño movimiento que hacia Alejandro y Rudy que provocara que Soap se sienta incomodo para que en cualquier momento se lance a arrancar el cálido sargento de encima. Nada lo detiene de hacerlo en ese momento, arrastrar al sargento fuera de allí con una orden y el escocés seguiría la orden siguiendo teniente como un cachorro perdido, sin embargo no era un secreto que Ghost era demasiado indulgente con el sargento, dentro del campo lo trataba como todos los demás soldados (Si se ignora los coqueteos a través de los comunicadores, miradas que solos ellos pueden entender y una palmada demasiado prolongada) pero fuera tenia una debilidad por el escocés.
En retrospectiva la gente ignora que Soap era el verdadero soldado mas peligroso de la base al tener al Ghost alrededor de su meñique, listo para quemar el mundo solo para ver los ojos del sargento brillar con esa piromania que no hace un esfuerzo de ocultar.
El resto del partido el teniente no se retiro, rehusó de irse de esa colina donde decidió tirarse a morir, aun vigilante como un perro guardián con el único objetivo de lanzarse a morder cuando su dueño resulte en peligro. Sin prestarle atención a los acontecimientos del partido de su propia nación con España, escaneando y tensándose ante las manos errantes en su rodilla por parte de Alejandro (Bendito sea su feliz ignorancia) y otra en la cintura por parte de Rudy con intención de que no se fuera de bruces al suelo cada vez que se inquietaba, Rodolfo no podía pasar de largo como los ojos del teniente pasaban de las manos ofensivas a la cara del sargento, como sus ojos afilados se ablandaban ante la sonrisa todas dientes, risas, gritos, todo tan brillante que te podía cegar.
Era tan imposible estar suficiente enojo con Alejandro y como podía tener razón con este plan cuando podía ver eso.
Al minuto 75 del partido finalmente el capitán Price se digno de dar la cara en el lugar con la misma tranquilidad que lo caracteriza esta vez teñidos por la incertidumbre del desenlace del partido ante como los dos equipos iban 1-1, no obstante se dio sorprendido ante la presencia de Ghost pero simplemente no hizo preguntas, quizás sintiéndose feliz que decidiera salir de su barracon para pasar el rato con el equipo, y simplemente lo dejo ser mientras se apoyaba en el sofá donde estaba sentado su teniente de equipo.
Mientras los minutos pasaban del partido, se sentía entrañable la manera como los dos sargentos se inclinaban lentamente hacia adelante olvidando sus cervezas a casi terminar para poner toda la atención al televisor, la gorra de Gaz quedo a estar aplastada entre sus manos y Rudy podía sentir como físicamente Soap estuviera a nada de implosionar.
El teniente mexicano se estremeció ante la explosión de ovaciones de Soap y su propia pareja ante el gol de España, riéndose a carcajadas ante la celebración del escocés con el coronel mexicano mientras Gaz se hundía derrotado en su puesto escondiendo su propia cara en su gorra toda arrugada antes de que los dos sargentos se enfrascara en una pelea sin veneno alguno sobre que Soap ni siquiera Español y Soap argumentando que mientras vaya en contra de Inglaterra le iría a cualquiera, además por lo que se denotaba ver, los dos estuvieron haciendo apuestas previas.
El brazo de Alejandro reposo placida mente en los hombros de Soap volteando a ver en dirección de Price y Ghost mostrando una sonrisa todo dientes antes de levantar su botella de cerveza palmeando el costado de Soap antes de sentarse juntos en el lugar anterior donde estaban.
Para Price el gesto no debía ser tan alarmante, solo una camareria entre soldados pero Ghost, oh Dios apiade el alma de incauto de Alejandro, pinchando todos los botones correcto para que empezara dudar en convertirlo en pasar de un aliado a su enemigo numero uno, sus manos se apretaron sobre sus brazos gruñendo bajo ahogado por los quejidos de los otros soldados. Lo único que lo detenida de abrir una guerra contra las fuerzas especiales Mexicanas era unos ojos azules en forma de media luna con todos las arrugas y brillo correctas de una sonrisa genuina, observo Alejandro.
El final del partido se anuncio trayendo consigo gemidos de decepción por los británicos y celebraciones muy llenas de palabras escocesas y latinas, aun habiendo decepción todos parecían disfrutar de este ambiente, era lo mas humanamente cotidiano que le permitía la vida militar entre tanta muerte; contra hostiles, hacia sus compañeros de equipo e incluso a si mismos.
Al sargento Soap levantarse de las piernas de Rodolfo le dio una mirada llena de agradecimiento y pena podía darse la idea de que sus piernas estarían adoloridas y hasta dormidas, en cambio el mexicano negó con la cabeza restándole importancia a ese problema. La confirmación de los dos sargentos tuvieron una apuesta fue acertada cuando Gaz a regañadientes refunfuño sacando de su billetera los euros acordados mientras el sargento de mohicano se mostraba orgulloso.
-Al menos espero que me des un premio de consolación- Refunfuño Garrick cruzándose de brazos viendo al otro sargento portando un mohin en los labios-.
-Lo siento amigo, ya están comprometidos- Garrick no necesitaba preguntar porque sabia, todos en el lugar lo sabían-.
Fue lo ultimo que respondió el sargento MacTavish antes de caminar rápidamente fuera del lugar siguiente a Ghost a la entrada de la sala de oseo como un pequeño cachorro perdido empezando a parlotear animada mente sobre el partido, quien se dio sorprendido tropezando por un momento con sus palabras antes de relajarse nuevamente ante la mano de Ghost en su hombro, una mano firme que se sentía sobre las letras del apellido del escocés en su espalda y veía con una gran posesividad.
Llevando al sargento fuera del lugar, Ghost giro la cabeza para mirar a los dos soldados mexicanos prolongado un poco mas el cruce de miradas, el mensaje era claro.
“Era suyo”
Estremeciéndose ante la mirada esa seria la señal de finalizar el plan y retirarse con lo que tenia pero Alejandro, el desquiciado Alejandro parecía brillar con el nuevo desafió, para él esto no había termina, estaba dispuesto a bajar mas profundo en los anillos del infierno que implicaba meterse con la muerte misma y lo suyo.
Que la virgen de Guadalupe le di paciencia porque si le daba fuerza, mataba a su pareja por Ghost.